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La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) no estaría en crisis y tendría un superávit cercano a los ¢30.000 millones cada año, si el Estado y otros actores cumplieran anualmente con sus obligaciones, según un informe de la Dirección Actuarial de la institución, realizado en 2009.
El informe “Valoración actuarial del seguro de salud 2009”, elaboró proyecciones hasta el año 2014, en las que se llegó a la conclusión de que si se recibieran todos los dineros que por ley le tocan a la CCSS, la institución tendría un superávit cercano a los ¢30.000 millones anuales hasta el 2012, y alcanzaría los ¢48.000 millones en el 2014.
CRISIS ANUNCIADA
El matemático actuarial, Rodrigo Arias López, quien trabajó en la Dirección Actuarial de la CCSS, aseguró que estos superávits se producirían considerando solo el pago anual de las cuotas por parte del Estado, sin incluir sus deudas anteriores y el pago de intereses por estas.
En sus conclusiones, el documento del 2009 señala: “El sistema financiero del Seguro de Salud requiere el cumplimiento en el pago de las obligaciones de cada uno de los sectores contributivos y en especial el financiamiento oportuno en el Programa de Asegurados por el Estado”.
Para Rodrigo Arias, es claro que la actual crisis de la CCSS no es un asunto de gastos, como lo señala el informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), sino un problema de ingresos relacionado principalmente con el incumplimiento gubernamental de sus obligaciones.
Arias criticó el hecho de que las autoridades de la Caja salieran a reconocer que la institución tiene una crisis hasta que les fue señalado por la OPS en un “borrador de informe”, cuando él como actuario envió un informe a la Junta Directiva de la entidad en el 2005, proyectando la crisis que hoy se vive.
Sin embargo, las advertencias de Arias fueron obviadas por la Junta Directiva, entonces presidida por Alberto Sáenz, y más bien se inició en su contra un proceso de persecución que incluyó la confiscación de su computadora y una prohibición de referirse en público a la situación financiera de la institución, la cual tuvo que ser revocada por la Sala Constitucional.
“Al ver lo que pasa hoy con la CCSS me da tristeza por el estado de destrucción en que tienen a la institución, pero, por otro lado, me alienta saber que estaba en lo correcto, y que lo que invirtió la Caja en mi formación como actuario, lo pude retribuir con un análisis adecuado de lo que iba a suceder”, expresó.
En su informe titulado “Cobertura, Costos y Financiamiento del Seguro de Salud”, Arias realizó un detallado estudio sobre los aportes de patronos y asalariados, pensionados, trabajadores independientes y del Estado.
Dicho documento deja claro que, salvo el caso de los aportes de los asalariados que siempre son superavitarios, los demás sectores presentaban déficits en relación con los montos que destina la CCSS en su atención.
El rubro más deficitario es el de los aportes del Estado, que no solo incumple con los dineros para cubrir a las personas que no pueden pagar el seguro, sino que además evadía el pago de las cuotas obrero-patronales de sus empleados.
Lo anterior significa entonces, según explicó Arias, que con el superávit de las cuotas de los asalariados, se ha venido cubriendo en los últimos años los déficits dejados por los demás sectores, de los cuales la deuda estatal es el hoyo más grande y ya se llegó al punto en que no se pudo cubrir más.
Arias hizo una serie de recomendaciones en las que se incluía una reforma a la estructura de las cuotas de cada sector, de manera tal que se redujeran los porcentajes de los aportes, pero se compensara con la recaudación por medio de impuestos como el de ventas.
CUBRIENDO CORRUPTOS
Para Rodrigo Arias, el informe de la OPS lejos de ser algo para destacar, lo que hace es de alguna manera “cubrir a los políticos corruptos”, pues en su criterio enfoca mal las verdaderas causas de la crisis en la seguridad social.
“La OPS vino a proteger a los verdaderos culpables, al decir que la crisis viene de dos años para acá, cuando todos sabemos que el Estado viene incumpliendo constantemente desde la década de los 70; y también viene a decirnos que la crisis se debe a que han contratado trabajadores adicionales, como si no supieran la inmensidad de necesidades de la población”, criticó Arias.
El actuario aseguró que Costa Rica aún está muy por debajo del promedio de médicos por habitante, que tienen países desarrollados como Noruega, Suecia y Holanda; y además, se manifestó molesto porque el informe señale que parte de la culpa la tiene también la Sala Constitucional, al atender los reclamos de la gente sobre algunos medicamentos.
Durante la conferencia de prensa para presentar el informe de OPS, la presidenta ejecutiva de la CCSS, Ileana Balmaceda, aseguró que las distintas resoluciones judiciales en el tema de medicamentos han creado un desbalance, ya que el 25% del presupuesto en este rubro se gasta en 1000 pacientes con cinco patologías diferentes.
“Ahora la OPS nos dice que la crisis es culpa de la Sala, por considerar la salud como un derecho. El problema no es ese. La posición de la OPS lo que hace es salvar a los corruptos al enfocarse en los gastos, pero respecto a los ingresos dice que “no se puede hacer nada”, lamentó.
Arias criticó también el hecho de que el análisis de OPS se realizó en un periodo de dos meses y sin la participación de un actuario, que les permitiera analizar con detalle la situación financiera de la entidad.
“Eso de que la Junta Directiva de la CCSS salga dos horas después de recibir el informe a anunciar los resultados a la prensa, sin analizar lo que dice, es pura politiquería”, comentó.
La presidenta de la CCSS, Ileana Balmaceda, anunció -tras este informe- que la entidad “atacará los disparadores del gasto”, para volver a estabilizar las finanzas de la institución en el año 2015.
Arias advirtió que estas políticas de reducción de gasto son solo parte de los lineamientos de los organismos financieros internacionales como el Banco Mundial, que desde hace décadas han pretendido reducir el seguro social a la prestación de servicios básicos, para dar así más “espacio” a la expansión de la medicina privada.
¿El gobierno ya pagó su deuda?
El actuario matemático Rodrigo Arias, criticó la forma en que el gobierno de la presidenta Laura Chinchilla pretendió “ayudar” a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) con el pago de ¢85.000 millones.
La presidenta Chinchilla aseguró que este dinero es un “adelanto” de lo que debía pagar en los próximos años el Gobierno, según el convenio firmado por la administración anterior en el año 2007.
Arias López recordó que la deuda que se está pagando con ese convenio fue “calculada a conveniencia” del Gobierno, reduciendo en casi ¢150.000 millones la deuda y sin reconocer a la CCSS los intereses correspondientes.
En el documento del convenio de pago, se establece que el Gobierno pagaría ¢8.000 millones a la CCSS cada año, a partir del 2011 y hasta el 2020, por lo que con estos ¢85.000 millones el Gobierno estaría “cancelando” su deuda.
“Lo peor es que teniendo la Caja problemas de liquidez, vengan y le paguen ahora con deuda que no se sabe si se va a tener que vender con descuento, por las condiciones actuales del mercado de valores. O sea, que tras de que a la Caja le recortaron el monto adeudado, ahora corre el riesgo de recibir mucho menos de lo debido”, apuntó López.
Este documento no posee notas.