El 18 de octubre fue presentado en Cinépolis Terramall el cortometraje “Imae”, dirigido por Esteban Ramírez, en el que se aborda la temática de los embarazos en jóvenes, y que contó con el patrocinio del Ministerio de Cultura y Juventud y de la empresa Bayern.
Aunque en un principio estaba previsto el estreno para septiembre, debido a los pequeños atrasos del  proyecto, que tuvo un presupuesto de $17.000 (¢8,5 millones), el lanzamiento tuvo que postergarse unos días.
El cortometraje de Ramírez no solo tiene como actores a jóvenes, sino que su público meta son todas aquellas mujeres que están en riesgo de sufrir un embarazo sin haber terminado la secundaria o cuando apenas comienzan a experimentar la vida universitaria.
 
Ramírez expresó que fue una “grata experiencia el haber trabajado con jóvenes que no tenían formación en el campo del cine” y se mostró optimista de que el cortometraje, que tiene una duración de 23 minutos, pueda “encontrar su público”.
El director reconoció que el guión original sufrió modificaciones, pero que esta parte del proceso también se constituyó en una parte interesante tanto para él como para las tres estudiantes que ganaron el concurso.
“Todo el proceso duró alrededor de siete meses, entre la producción, la filmación y la posproducción”, explicó Ramírez, quien precisó que el corto será transmitido por la televisión nacional.
También, se espera que pueda difundirse por otros canales, entre los que no descarta el hecho de poder subirlo a Internet para que tenga una mayor exposición. Estudian, asimismo, la posibilidad de distribuirlos por las cadenas de cines nacionales.
El cineasta comentó que el tener que trabajar con un formato como el cortometraje, que obliga a condensar la narración, le representó un verdadero reto.
“Asumí el trabajo con todo el profesionalismo que se requería y como tal estamos satisfechos por el resultado”, dijo.
En la actualidad, Ramírez trabaja con varios proyectos, con el fin de volver a los largometrajes, que son el formato que más frecuenta.
En relación con la experiencia de haber participado como director de “Imae”, destacó “que siempre se aprende y a lo mejor se descubren talentos para futuras películas”.
RESPALDO
El proyecto contó con un importante respaldo financiero e incluso del público nacional que intervino como “extra” en los diferentes días de grabación en las distintas locaciones elegidas por el productor del corto.
La historia la escribieron las estudiantes Keshia Madrigal, Carolina Quirós y Marcia Campos, quienes participaron en un concurso al que concurrieron 69 trabajos. Al resultar ganadoras, tenían la oportunidad de que su guión fuera producido por Ramírez, quien grabó “Caribe” y “Gestación”, dos películas que tuvieron buen recibimiento por parte del público.
En esta oportunidad, el guión original, cuyo título era “regresiones”, se tradujo a “Imae”, expresión que pretende captar una forma del habla de los jóvenes cuando se encuentran en problemas.
La propuesta general forma parte del proyecto “Tu vida, tu decisión”, mediante el cual buscan crear una reflexión a los embarazos no deseados en jóvenes parejas.
Ramírez, como parte de lo acordado con los patrocinadores, compartió con las tres jóvenes el proceso creativo de ajustar, modificar y “limpiar” el guión, de modo que no quedasen cabos sueltos para la hora de la filmación.
Se sabe que en el cine como en la literatura, los formatos cortos en ocasiones exigen más que los largometrajes, por lo que para el director de “Caribe” y “Gestación” constituyó todo un reto.
El corto se centra en la experiencia de Gaby y Elena, quienes son dos jóvenes universitarias con “sueños, planes y que viven una vida agitada con sus respectivas parejas”.
El mundo de ambas cambia cuando son invitadas a asistir a un “picnic” para celebrar el cumpleaños del amigo de una de ellas. “El convivio se alargará hasta la noche y evidenciará la realidad compleja y confusa en que vive la juventud del país, donde abunda el individualismo, la apatía y el conformismo”.
Tras esa jornada, se da un punto de quiebre y la historia evoluciona hacia un desenlace que busca la reflexión entre los jóvenes, que es al primer público al que va dirigido el cortometraje.
Ya en la película “Gestación” se abordaba el tema de los embarazos en adolescentes, el cual se retoma en esta oportunidad en una serie de locaciones como el Barrio La Granja en San Pedro de Montes de Oca, en la Universidad de Costa Rica (UCR) y en el volcán Irazú.
Los actores del filme son Natalia Carvajal (Gaby), Agustín Gutiérrez (Josué), Yerling Villalobos (Elena) y José Miguel Alfaro (Andrés).
Para las grabaciones, el equipo de producción dispuso de un tiempo de cinco días, en los cuales se tenía que recabar el material completo para luego pasar al proceso de edición y posproducción.
La experiencia tanto de los productores como para las guionistas invitadas, es decir, las tres jóvenes ganadoras del concurso, resultó favorable para las partes, según expresiones tanto de Ramírez como de las tres ganadoras.
El cortometraje es un género que cada día gana más adeptos en el mundo del cine y como el cuento en la literatura tiene la particularidad de que se requiere de una gran capacidad de síntesis para condensar lo que en otro formato dispondría de 90 minutos para relatar una historia.
Recientemente, en el país se realizó El Festival Internacional de Shnit de cortometrajes, en los que se difundieron trabajos de Europa y América Latina, así como producciones nacionales que no sobrepasaran los 20 minutos.
Este tipo de festivales refuerza el gusto por los formatos cortos, lo que ha hecho a su vez que haya una proliferación de espacios para dar a conocer todas estas manifestaciones.