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Alianza legislativa va tras agenda mínima para consolidarse

Las cinco bancadas de la “Alianza por Costa Rica” dieron un nuevo aliento al bloque opositor, con el objetivo de retener el control del directorio de la Asamblea Legislativa el próximo 1 de mayo -cuando se elegiría como presidente al libertario Danilo Cubero- y en función del logro de una eventual coalición electoral para el 2014, coincidieron en afirmar varios de sus integrantes.

Las cinco bancadas de la “Alianza por Costa Rica” dieron un nuevo aliento al bloque opositor, con el objetivo de retener el control del directorio de la Asamblea Legislativa el próximo 1 de mayo -cuando se elegiría como presidente al libertario Danilo Cubero- y en función del logro de una eventual coalición electoral para el 2014, coincidieron en afirmar varios de sus integrantes.
Los jefes de bancada de los partidos Acción Ciudadana (PAC), Movimiento Libertario (PML), Unidad Social Cristiana (PUSC), Accesibilidad sin Exclusión (PASE) y Frente Amplio (FA) acordaron el pasado viernes 27 ratificar y ampliar el pacto que dio vida a la alianza en abril del 2011.
Para ello atendieron los reclamos del PASE y el FA, tendientes a mantener su apoyo al bloque opositor; esto es, que se incluyera en la agenda legislativa tres proyectos de ley que consideran prioritarios: la reforma para elevar a rango constitucional el agua como bien público y de derecho humano -impulsada por el FA-, así como la ley de tabaco, y la ley de trasplante de órganos, apoyadas por el PASE.
 
“Hubo acuerdo de todos los partidos miembros de la Alianza para continuar con el proceso, tanto el parlamentario, como en función del proceso electoral para el 2014”, dijo Juan Carlos Mendoza, actual presidente de la Asamblea Legislativa y miembro de la bancada del PAC.
Se ratificaron las bases del acuerdo anterior y se está buscando profundizarlo. Se va a hacer un adendo para impulsar algunos proyectos de interés común entre las distintas fracciones. Ante la solicitud del PASE y el FA, se acordó respetar los proyectos que se habían planteado, y buscar un acuerdo respecto a la reforma constitucional sobre el  agua en el artículo 50 de la Constitución Política, dijo Mendoza.
También se convino incrementar el control político en la actual coyuntura, en la que hay muchos temas que denunciar con más vehemencia. “Los casos de corrupción en este país requieren hacer denuncias más contundentes; vamos a coordinar muchísimo más, y queremos renovar ese ejercicio a partir de ahora”, apuntó.
La alianza acordó respetar las diferencias entre sus integrantes, surgidas por la decisión de la bancada del PAC de llegar a un acuerdo con el Poder Ejecutivo para impulsar el plan fiscal. El tema había causado roces dentro del grupo aliado, que no se reunía desde octubre pasado.
En dos semanas los representantes de la alianza volverán a reunirse, con el fin de reafirmar el pacto que le dio vida al bloque opositor hace casi un año.
Danilo Cubero, jefe de fracción del PML, dijo que lo primero que convinieron el viernes pasado fue respaldar la Alianza y todos los acuerdos del documento inicial (ver recuadros).
Además, con la experiencia acumulada en el primer año, los miembros de la Alianza por Costa Rica van a seguir trabajando para procurar una serie de proyectos de ley, algunos ya presentados y otros nuevos para impulsarlos, añadió.
“Vemos la Alianza como un niño: primero nace, luego gatea, después camina, y ahí vamos poco a poco, con vista al 2014”, detalló Cubero cuando se le preguntó si cree que la Alianza sale fortalecida en función de lograr una unión de fuerzas opositoras para las elecciones nacionales.
José María Villalta, del FA, expuso que tras el acuerdo logrado, los libertarios se comprometen a no obstaculizar la reforma constitucional del agua, y permitir que se vote. Con esto se da “un paso gigantesco hacia el logro de este objetivo, que durante tantos años hemos estado impulsando, de proteger el agua en la Constitución y que no se ha podido por el bloqueo de los libertarios”, comentó.
“Acordamos que vamos a presentar un proyecto nuevo de reforma al artículo 50 de la Constitución, con los elementos que se establecen en el manifiesto que publicamos (el FA y el PASE) la semana antepasada, y donde planteamos que la reforma debe tener como mínimo el reconocimiento del agua como un derecho humano, que se inscriba en la Constitución como un bien público y la prioridad en el uso del agua a favor de las comunidades”.
Villalta también resaltó el acuerdo de hacer un agregado al compromiso que firmaron el año pasado, e incluir una agenda de proyectos de ley para impulsar conjuntamente en la Alianza, “algo que desde hace mucho tiempo queremos realizar en este proceso para fortalecerlo. No significa que vamos a estar de acuerdo en todos los proyectos, pero sí hacer una agenda mínima de consenso, y va a haber un compromiso por los menos de no obstaculizarla”.
Explicó que la idea es consensuar entre las fracciones una lista de proyectos, para impulsarlos conjuntamente.
Se ha dado un paso pequeño, pero muy importante en función de ir madurando un acuerdo que tenga mayor perspectiva hacia al futuro, consideró Villalta, tras recordar que la Alianza en sí no es una coalición electoral, aunque sí un paso inicial para poder llegar a una eventual coalición electoral.
“Inicialmente la tarea más importante era desbancar al Partido Liberación Nacional (PLN) del directorio legislativo, frenar el abuso de poder que han venido practicando, fortalecer el control político. En este primer año hicimos avances en generar confianza y tender puentes, pero también se cometieron graves errores. Hay que aprender de estos errores y en este segundo año la Alianza da un paso más hacia la posibilidad de conformar una agenda legislativa común, que es un elemento indispensable para un acuerdo electoral”, destacó Villalta.
REVÉS
Los partidos de la alianza suman 31 votos, dos más que los 29 necesarios para ganar la elección de los seis puestos del directorio legislativo el 1 de mayo. La ratificación del acuerdo opositor implica un serio revés para las pretensiones del PLN, de recuperar la presidencia del Poder Legislativo que perdió el año pasado, tras la alianza de los partidos opositores  de diverso signo ideológico.
Con 24 votos propios, la fracción oficialista -por medio de su jefe Luis Gerardo Villanueva-  había anunciado una ofensiva de negociaciones con diputados opositores, a la caza de al menos cinco votos para completar los 29 que le permitirían recuperar el control legislativo en este tercer año del mandato de la presidenta Laura Chinchilla, que se considera clave para impulsar los proyectos de mayor interés del Poder Ejecutivo, antes que arranque el proceso electoral para el 2014.
El Poder Legislativo renovará su directorio y las jefaturas de todas las bancadas el 1 de mayo, cuando se elegirá a las presidencias de las comisiones legislativas, por votación de los diputados miembros.
Durante la elección del 1 de mayo de 2011 surgió una crisis constitucional, debido a que los opositores acusaron al oficialismo de realizar la elección del nuevo directorio legislativo mediante un procedimiento inadecuado de elección secreta y rompieron el quórum. El oficialismo continuó con la elección y reeligió a Luis Gerardo Villanueva como presidente del Congreso, aunque este renunció para dar paso a una nueva elección al día siguiente, que ganó la oposición.

Acuerdos de la Alianza por Costa Rica

Entre los acuerdos adoptados por la Alianza por Costa Rica el año pasado se encuentran:

-Que el primer año el directorio legislativo lo presida el PAC, el segundo el PML y el tercero el PUSC. Además se distribuyeron las presidencias y los miembros integrantes de las diferentes comisiones legislativas.

-Hacer foros permanentes que procuren encontrar las mejores soluciones legislativas y la viabilidad política a las propuestas concretas en los siguientes ejes temáticos: agua, ambiente y energías limpias; seguridad ciudadana, área social, reactivación económica, soberanía y seguridad alimentaria, política fiscal y modernización del Estado.

-Garantizar un manejo transparente y equilibrado de la agenda parlamentaria, en estricto apego al reglamento y promoción de un debate de calidad, que muestre el más profundo respeto a las minorías.

-Comunicación constante del Directorio Legislativo con la fracción oficialista y diálogo sistemático y constante con el Poder Ejecutivo.

-Establecer  un mecanismo para fortalecer la fiscalización sobre los presupuestos de las instituciones descentralizadas del  Estado.

-Conformación de comisiones especiales investigadoras.

-Manejar la administración del Legislativo de manera eficaz y eficiente, optimizando el uso de los recursos públicos.

-Promover reformas al reglamento legislativo para agilizar el funcionamiento de la Asamblea Legislativa, para que las interpelaciones a los ministros sean un verdadero debate político y tengan efecto vinculante, y para que los informes de las comisiones investigadoras se conozcan efectivamente en el Plenario.

 
Danilo Cubero: Lo que más une a la Alianza es el riesgo de una dictadura del PLN

El Movimiento Libertario (ML) no obstaculizará la reforma constitucional relativa al agua que promueve el Frente Amplio (FA), y más bien podrían presentar un proyecto conjunto, afirmó Danilo Cubero, jefe de bancada de los libertarios y quien se convertiría en el próximo presidente de la Asamblea Legislativa con los votos de la Alianza, tras el acuerdo logrado la semana anterior para ratificar el pacto opositor.

El riesgo que tiene Costa Rica de caer en una dictadura absoluta encabezada por el Partido Liberación Nacional (PLN) es lo que más une a la Alianza, aseveró Cubero, quien aspira a una presidencia legislativa de mucho diálogo y respeto para las diferentes fuerzas políticas y sectores sociales.

Don Danilo, tras el acuerdo que lograron los jefes de fracción el viernes, ¿desaparece la objeción que tenían el Frente Amplio (FA) y Accesibilidad sin Exclusión (PASE) para continuar en la Alianza, para que el ML dejara de obstruir unos proyectos que impulsan esos partidos?

-Nunca lo sentí como una objeción, sino como un llamado a la Alianza para que se permitiera discutir con mayor fluidez los proyectos de ley, proyectos que si usted revisa por ejemplo las mociones que se le han aprobado a la diputada Marielos Alfaro, del ML, en la ley antitabaco, el PASE ha estado de acuerdo.

Lo que hacía falta era ese espacio de diálogo y vernos juntos los actores que componemos la Alianza, y buscar el mecanismo a través del cual ellos logren impulsar sus proyectos y llevarlos a votación;  creo que eso es lo más sano.

Todos los partidos políticos tienen sectores importantes de la población cercanos; en el PASE eso está muy demarcado y me parece que estos son temas sensibles para ellos, en los cuales el partido (libertario) puede colaborar y lo va a hacer.

¿Y  en cuanto a la reforma sobre el agua que impulsa el FA?

-En el tema del agua llegamos al acuerdo de que vamos a hacer un nuevo texto, en el artículo 50 de la Constitución, buscando equilibrar tanto la potestad de imperio del Estado sobre los bienes demaniales, como la posibilidad de los ciudadanos de poder aprovechar de manera regulada esos bienes, como es el caso de la concesiones y las explotaciones que se dan. Sé que lo vamos a lograr y con eso estaríamos cerrando un círculo de discusión de más de 9 años aquí en la Asamblea Legislativa. Discusión que ha sido productiva, porque en los proyectos iniciales la reforma era en el artículo 121 de la Constitución, en un capítulo diferente. Hoy estamos hablando del artículo 50, en un  capítulo de la Constitución donde se están tutelando otros derechos, con otras características, y esto se ha logrado en una discusión larga, porque son temas muy sensibles.

¿Ustedes suscribirían junto con el FA un nuevo proyecto sobre el agua?

-Sí, sí, claro, y todo el que esté de acuerdo con el proyecto. Es posible construirlo y lo vamos a construir.

¿Qué dice ante el escepticismo de quienes dudan que pueda funcionar realmente una Alianza de partidos tan diversos ideológicamente?

-Lo que más une a la Alianza en torno a la realidad que hoy vive el país es el riesgo inminente que tiene Costa Rica de caer, ya de manera absoluta, en la dictadura de partido de Liberación Nacional, en el poder ultraconcentrado de Liberación Nacional. Eso no le conviene al sistema democrático. Eso lo han entendido los costarricenses, según las diferentes encuestas, y eso es motivo suficiente para que todos los actores de la Alianza hagamos un acto de madurez política y busquemos grandes acuerdos programáticos y temáticos. En eso estamos trabajando.

¿Será suficiente para mantener la unión y la colaboración entre los partidos?

-Sí se logra y lo estamos haciendo. Yo les decía a los jefes de fracción en la reunión del viernes, que nosotros cada vez que estamos en período ordinario tenemos que consensuar una agenda, y para eso se presentan las listas de proyectos, se reúnen los asesores de las bancadas, se revisan los proyectos, se hacen las objeciones y presentamos mociones. De igual manera nosotros, trabajando como Alianza, pondríamos contra la pared al Gobierno.

El Gobierno ha jugado con todas las fracciones individualmente. Le desconvoca un proyecto a una bancada y le convoca a otra, en aras de ir sacando ellos algún juego político, y logran crear roces a lo interno de la Alianza con estos juegos. Esto hay que invertirlo, ir más bien la Alianza unida poniendo contra la pared al Gobierno.



¿Qué aporte cabe esperar de una presidencia suya en la Asamblea Legislativa?

-Más que un aporte en lo personal, el aporte sería conjuntar la experiencia de don Luis Fishman (jefe de banca de la Unidad social Cristiana), con la experiencia que ha tenido en la presidencia don Juan Carlos Mendoza, las posiciones valiosas en torno a los temas de reglamento y equilibrio de fuerzas y participación, del Frente Amplio. También tenemos qué ver en la figura de Manrique Oviedo y Jeannette Ruiz (jefe y subjefa de fracción del Partido Acción Ciudadana), que también vienen a aportar.

Aquí el rol importante de la presidencia es mantener esa línea de diálogo que ha creado Juan Carlos, de respeto desde la bancada unipersonal, hasta la bancada más grande que es la del PLN. Tenemos que acercar aun más a los sectores productivos nacionales; hay que construir con vista en las necesidades tanto de los sectores sindicales como de otros.

No nos gusta desde el ML la forma como ha venido trabajando el Gobierno, que presenta un paquete de impuestos sin haber conversado con las cooperativas, los sindicatos, con las cámaras. Creo que la presidencia de  la Asamblea Legislativa puede jugar un rol en ese acercamiento a los sectores y tenderle puentes al Ejecutivo; de ninguna manera vamos a ponerle piedras en el camino.

Tenemos la madurez política para ver en la presidencia de la Asamblea Legislativa una instancia para  construir para Costa Rica, entendiendo que esta es la Asamblea Legislativa,  que en Zapote está el Ejecutivo y que a los 200 metros de aquí  está el Poder Judicial. En ese entendido de la división de poderes, en la medida que se pueda unir esfuerzos, lo vamos a hacer.

  • Jorge Araya 
  • País
National LiberationPartido Liberación Nacional
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