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Investigue: pierda su tiempo

“Ánimo, ya no pierda su tiempo investigando y redactando, nosotros hacemos todo por usted.”  Así se ofrece en Internet  una empresa que se dedica a hacer tesis. Dicen haber elaborado más de 500 tesis de graduación para estudiantes de diversos niveles educativos como bachillerato, licenciatura y maestría de diversas universidades, tanto públicas como privadas.

“Ánimo, ya no pierda su tiempo investigando y redactando, nosotros hacemos todo por usted.”  Así se ofrece en Internet  una empresa que se dedica a hacer tesis. Dicen haber elaborado más de 500 tesis de graduación para estudiantes de diversos niveles educativos como bachillerato, licenciatura y maestría de diversas universidades, tanto públicas como privadas.
El tema, señala la página, no es ningún problema, pues en la empresa laboran profesionales de diversas ciencias. “No tema, firmamos un contrato de confidencialidad y servicios”. Al contrario de la competencia, garantizan no hacer copias (“no hacemos (copy-page)”; así como se lee “page”.
“Indigno”, expresa una estudiante en el curso de Investigación en Terapia Física. Y entre las personas del curso surgieron diferentes inquietudes respecto de tan particular negocio: ¿Profe, qué pasa si luego de graduada una persona por este método se le comprueba que pagó por una tesis que nunca hizo? ¿Qué sucede con el Tribunal Examinador que deja pasar como propia una investigación que la persona nunca redactó? ¿Profe, eso ha pasado en la UCR?
Las autoridades de universidades públicas y privadas deberían tener respuestas claras a estas inquietudes y que ahora se las hago públicamente: ¿Existe normativa para retirar las credenciales de profesional a una persona que se le compruebe haber pagado por su tesis de graduación? ¿Existe normativa para sancionar a los docentes que permiten por omisión o comisión este tipo de práctica antiética? ¿Hacer pasar como propia una investigación que nunca la hizo el estudiante constituye delito de falsedad ideológica?
En 1998, Rafa Ugalde y periodistas del Semanario analizaron este fenómeno, y tengo entendido que el Fiscal General expresó que hacer tesis por encargo no constituía delito.
No pierda el tiempo investigando ni redactando, es un llamado al facilismo, al mínimo esfuerzo, en fin a la corrupción académica.
Mi experiencia en las comisiones de trabajos finales de Salud Pública y de Tecnologías en Salud, me permite afirmar que por el método de trabajo que se sigue se evita que esta práctica se pudiera llegar a realizar: los estudiantes comienzan a elaborar su trabajo final desde los primeros talleres, además de que son acompañados por tutores especialistas en la materia. En una parte del documento deben hacer declaración de las consideraciones éticas. Según sea el caso, algunos anteproyectos en que tengan participación personas como fuentes de información, deben ser evaluados por el Comité Ético Científico. No me cabe la idea de que un Tribunal Examinador, al menos en estas escuelas, se deje embaucar con una investigación espuria.
“No pierda el tiempo investigando y redactando”: un llamado a hundir más en el subdesarrollo a este país.

  • Carlos Fuentes Bolaños (Profesor)
  • Opinión
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