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Al paso de 30 años de laborar en la Universidad de Costa Rica se me ha permitido llegar a la Jubilación.
Mis primeros pasos los di en el Taller de Ebanistería en el Departamento de Acabado en madera bajo la dirección de don Mario Muñoz, y posteriormente laboré durante 30 años en la Sección de Seguridad y Tránsito, lugar que abrió un espacio en mi vida que no tiene comparación.
Guardo respeto por personas que he vinculado en mi trayectoria; primero a Dios por el don de vida y a mi padre Jorge Jiménez Olivas (QDDG) quien me enseñara el oficio de Laqueador de Muebles, y gracias a su gestión se me abrieron las puertas en la UCR.
A mi compañero Marlon Morales, por depositar su confianza en mí, misma que me permitió concursar en una plaza en Seguridad y Tránsito.
Mi gratitud a mis compañeros de Servicios Generales, con quienes compartí grandes y agradables momentos, igualmente con los compañeros de Transportes, Edificio Administrativo, desde luego los compañeros del Centro Centroamericano de Población, Centro de Investigación donde laboré los últimos 10 años, a la Comisión del Día del Funcionario(a) Universitario(a), quienes me permitieron animar los programas de Variedades y Karaoke durante 17 años.
Di mi servicio voluntario como Maestro de Ceremonias a la Vicerrectoría de Acción Social en varias graduaciones, y además me ocupé de organizar en todo el trayecto de mi vida laboral los funerales de compañeros y otras personas de la UCR.
A los compañeros con los que compartí alegrías y tristezas, a todos mil gracias y que Dios los guarde siempre.
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