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El Conservatorio de Castella enfatiza la formación multidisciplinaria de sus estudiantes. (Foto: archivo)
“Esta escuela creemos que será el vivero de los futuros grandes artistas del país”, auguró el 25 de noviembre de 1953 Arnoldo Herrera, al inaugurar el Conservatorio de Castella.
Seis décadas más tarde, sus palabras son confirmadas por la cantidad de artistas de renombre —en las más diversas disciplinas creativas— egresados de la institución.
Por ello, las autoridades del Conservatorio se han lanzado a organizar un festival de celebración a lo largo de este 2013, el cual ya arrancó con la exposición inaugurada el 6 de junio y un concierto el pasado 24 de junio.
Arnoldo Herrera recibió el Premio Nacional de Cultura Magón, en 1991. (Foto: Revista Cultural del Conservatorio de Castella)
Al reflexionar sobre el aporte de la institución al país durante estas seis décadas, el actual director, Carlos López, destacó que quienes se gradúan del Conservatorio salen al mundo “con un perfil pensado para que haga la diferencia en la sociedad, en cualquier trabajo que desempeñe, sea artístico o no, para que tenga una mentalidad abierta, de manera que valore no solo lo técnico o académico, sino el hecho de que a través del arte todo se complementa mejor”.
Así enfatizó la importancia que se le da al hecho de que los alumnos no se desempeñen únicamente en disciplinas artísticas, pues −según dijo− de cada 100 estudiantes que se gradúan, unos 20 se dedican a las artes profesionalmente, mientras que muchos han encontrado su camino en profesiones como medicina, arquitectura o ingeniería, pero con una sensibilidad artística y creativa.
De igual manera, destacó que el Castella siempre se ha caracterizado por la experiencia interdisciplinaria que aporta a sus estudiantes y que esa filosofía se manifiesta en que aquel estudiante que se decide por el énfasis de la música, por ejemplo, también participa en obras de teatro y en talleres exploratorios como pueden ser los de danza o folclore.
LEGADO DEL MAESTRO
Gran cantidad de artistas de relevancia han pasado por las aulas del Castella. Entre ellas se pueden mencionar figuras como Elián López –quien ganó un Premio Nacional de Danza−; el luthier Juan Carlos Soto; el compositor Marvin Camacho; la escritora Shirley Campbell; la bailarina y directora de Danza Universitaria, Hazel González; la productora audiovisual Gabriela Hernández; el escultor Aquiles Jiménez; o el actual viceministro de Cultura, Iván Rodríguez.
Para la bailarina Estefanía Madrigal −quien luego de graduarse del Castella se formó como instructora de ballet en la Royal Academy of Dance (Real Academia de Danza) de Londres−, la principal influencia del Conservatorio radica en “el convencimiento de que el arte es algo serio, que se estudia igual que otras carreras, porque tiene su parte teórica y que requiere la misma dedicación de tiempo”.
Además, destacó que el sistema del colegio obliga al estudiante −desde la secundaria− a ser independiente y organizar sus horarios de acuerdo con la especialidad escogida y sus prioridades. “En mi caso, como bailarina e instructora independiente, me doy cuenta de que el colegio fue un entrenamiento para la vida”.
Madrigal resaltó que en esa filosofía “está presente la imagen de don Arnoldo, sus luchas por sus sueños y su visión del arte como algo esencial en la vida de las personas”, y que por ello quienes se gradúan del Conservatorio −aunque no se dediquen al arte− “son creativos y excelentes en lo que hacen”.
Camilo Poltronieri, músico que ha destacado en iniciativas como “Parque en el Espacio” y “Naguall Project”, también estudió en el Castella y recordó que en un inicio “estaba más metido en el teatro”, pero en el montaje de una obra se interpretó música flamenca, lo cual “me volvió loco y así empecé”.
Relató que luego se escapaba de clases con otros compañeros para tocar la guitarra; “don Arnoldo nos veía y nos permitía permanecer donde estábamos, precisamente por estar practicando”.
“Él es el alma del Castella. Su pensamiento fue de vanguardia, pues creía que el arte, en vez de una actividad elitista, debía ser accesible para todo el mundo”. Añadió que Herrera fue “como un abuelo en la institución, me regañaba a cada rato y durante todo el colegio, pero inspiraba respeto, carisma y cariño”.
Al referirse al aporte del Conservatorio al país, Poltronieri expresó que hoy en día se aprecia más la producción musical y artística nacional, lo cual se debe a “gente que le ha dado renombre a Costa Rica en el exterior, que en un 98 % salió del Castella”.
“HACIA EL FUTURO”
Precisamente, el lema de “creer, crear y crecer”, acuñado por Arnoldo Herrera, es la esencia que le ha permitido al Conservatorio hacer su aporte a la cultura costarricense.
La institución ha superado momentos difíciles, ya que luego de la muerte del fundador −quien fungió como director más de 40 años− se dieron conflictos “con directores que llegaban sin conocer la institución”, y buscaron imponer un “perfil muy administrativo sin sensibilidad artística”, aseveró el director López.
“Había una fundación que asumió labores administrativas por la indefinición de si era una institución pública o privada; luego los tribunales aclararon que es pública y, automáticamente, por ley debe ser administrada por una junta administrativa o una junta de educación”, recordó.
Sin embargo, aclaró que se mantiene un conflicto legal, en vista de que el terreno que ocupa el Conservatorio está inscrito a nombre de esa fundación, lo cual implica que el Ministerio de Educación no puede aportarle dinero para mejorar o renovar la infraestructura.
López expuso que al ser él exalumno del Conservatorio y llegar al cargo de director, “no me tenían que decir cómo es la institución; se ha logrado crear un ambiente de paz y tranquilidad, y hemos retomado el camino del Castella para el siglo XXI y proyectarnos hacia el futuro”.
Festival por entregas
El festival para celebrar los 60 años del Conservatorio de Castella se inició el pasado 6 de junio con la exposición “Crónicas de arcilla y pintura” −en la Galería Nacional−, en la cual participan 18 artistas exalumnos de la institución, como Marco Chía, Lucía Howell o Tzeitel Hernández.
El pasado lunes 24 de junio se realizó un concierto, en el que el estudiante Adrián Moreno —quien logró un tercer lugar en un certamen internacional en México— interpretó el “Concierto de Aranjuez”, de Joaquín Rodrigo; el profesor Aldo Rodríguez ofreció el “Concierto de las islas”, de Rafael Guedes; y la Orquesta Sinfónica del Conservatorio de Castella ejecutó una selección de la ópera “Carmen”, de Georges Bizet.
La siguiente actividad será el Día del Exalumno, el próximo 31 de agosto, pero será cerrada al público y en ella se realizarán actividades de celebración y convivencia.
Del 19 al 26 de setiembre se realizará el Festival Artístico Maestro Arnoldo Herrera, en el teatro que lleva su nombre. Durante esos días, habrá diferentes actividades de danza, guitarra y otras disciplinas. Para mayor información, se puede consultar la página de Facebook del evento.
De acuerdo con Carlos López —director del colegio—, a finales de octubre o principios de noviembre (la fecha exacta aún está por definir), se ofrecerá una producción interdisciplinaria de la obra de teatro “Sueño de una noche de verano”, de William Shakespeare.
La presentación será en el teatro “Maestro Arnoldo Herrera” −en La Sabana− y López destacó que algunos de los actores son del grupo de canto. La puesta en escena incluirá coros, danza, la participación de la Orquesta Sinfónica del Conservatorio y un grupo de música antigua. Se escogió esa obra por tratarse de la primera pieza que montó el Castella, en 1954.
El 25 de noviembre —fecha en que se firmó el documento de creación del Conservatorio—, la Orquesta Sinfónica de ese colegio, acompañada por coro y solistas, ofrecerá la «Misa de coronación Nº 14», de Mozart, para orquesta sinfónica, coro y solistas.
“Esta misa tiene su historia; fue montada en vida por el propio Arnoldo Herrera. Muchos exalumnos la cantamos como coro. Yo mismo la canté como solista y ahora de nuevo lo haré”, rememoró el director, quien anunció que el coro contará con invitados especiales solistas, entre profesores y exalumnos. El sitio y hora exacta se informará oportunamente.
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