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Para graduarse en la UCR hay que tomarse su tiempo

Mariana Granados tiene 24  años y estudia derecho. Ingresó a la Universidad de Costa Rica en el 2008 a estudiar arquitectura y estimó que duraría unos seis años en sacar su título. Por falta de beca interrumpió sus estudios y se cambió de carrera; ahora lo más probable es que dure nueve años en esta Universidad hasta lograr convertirse en bachiller.

Mariana Granados tiene 24  años y estudia derecho. Ingresó a la Universidad de Costa Rica en el 2008 a estudiar arquitectura y estimó que duraría unos seis años en sacar su título. Por falta de beca interrumpió sus estudios y se cambió de carrera; ahora lo más probable es que dure nueve años en esta Universidad hasta lograr convertirse en bachiller.
El tiempo que Mariana durará en cursar su carrera, no es la excepción, sino la norma; una investigación realizada por tres estadísticos, durante el 2012, estima que un estudiante que ingresa a la UCR tiene más de 90% de probabilidades de no graduarse antes de cinco años, tal como están estructurados en los planes de bachillerato en esta Universidad.
La investigación “Tiempos de graduación, factores socioeconómicos y académicos asociados”, fue realizada por los estadísticos Eugenia Gallardo, Mauricio Molina y Rebeca Cordero; quienes analizaron a toda la población estudiantil que ingresó a la UCR desde el año 2000 hasta el 2003 y le siguieron el paso hasta el 2010 (ver recuadro sobre estudio).
El estudio determinó que tienen más posibilidades de graduarse en menor tiempo las mujeres que los hombres, así como quienes obtienen notas superiores en el examen de admisión (en una escala de 400 a 800) y también quienes tienen beca de asistencia socioeconómica;  además, los estudiantes de sedes regionales o quienes cursan carreras en la Facultad de Medicina también están en ventaja de concluir la carrera más rápido.
Para el proyecto solamente se tomaron en cuenta carreras en las que se puede obtener el título de bachillerato y no aquellas en las que el primer título obtenido es el de licenciatura.
Durante el tiempo de observación, los investigadores se dieron a la tarea de determinar cuándo se graduaban los poco más de 14.000 estudiantes que ingresaron a la UCR durante esos cuatro años, para así luego estimar las oportunidades que tienen los universitarios de terminar su bachillerato en tiempos determinados de acuerdo con otras características, como si cuenta o no con beca socioeconómica, si estudia en una sede regional, el sexo, y la nota de examen de admisión.

TARDANZA MULTIFACTORIAL
Algunas carreras cuentan con planes de estudio “sobrecargados”, apuntó Henning Jensen, Rector de la UCR, sobre una de las razones académicas por las cuales los estudiantes pueden durar más en sacar su carrera en bachillerato, además de que los profesores consejeros deben dar más seguimiento al desarrollo de la carrera de su estudiante encargado. (Ver entrevista)
El estudio mencionado solo puede estimar posibilidades, pero por su naturaleza no puede revelar las causas que provocan estos números tan bajos, ni cuántos estudiantes que ingresaron durante esos años continúan en la Universidad, o si han aplazado su carrera universitaria.
Tanto el rector Jensen, como Ruth de la Asunción, Vicerrectora de Vida Estudiantil, coinciden en que determinar las razones por las cuales son tan escasas las posibilidades de graduarse en poco tiempo dentro de la UCR es muy difícil, si se considera que existen situaciones propias de cada estudiante en las que la institución no tiene un efecto directo.
Estos eventos son, por ejemplo, el hecho de que un estudiante se case, tenga hijos, sufra un accidente o algún evento personal que le impida sacar los estudios de forma más fluida que un estudiante que no sufra situaciones personales que lo atrasen; estas circunstancias, de acuerdo con el Rector, son las más difíciles de medir en algún estudio.
Para Adela Barrantes, trabajadora social del Centro de Asesoría Estudiantil de la UCR, existe una tendencia a que los estudiantes lleven más de una carrera dentro de esta Universidad, que puede provocar que los retarde en sus estudios. Barrantes cree que existe una preocupación del estudiante por complementar sus carreras con otras áreas, desde el bachillerato.

MUJERES CON MÁS PROBABILIDADES
El estudio encontró que de cada 100 mujeres que logran ingresar a esta Universidad estatal solo 45 se graduarían en ocho años o menos, mientras que solo 30 de cada 100 hombres podrían graduarse en ese tiempo.
Monserrat Sagot, subdirectora del Centro de Investigación de Estudios de la Mujer de la UCR, destacó que esta es una tendencia no solo en la UCR, sino mundial; y que la mujer en su educación primaria y secundaria presenta mayores índices de éxito en su graduación, en comparación con los hombres; aunque esta ventaja no se refleje posteriormente en las condiciones laborales de las profesionales.
La experta en el tema de género explica que esto se debe a que la sociedad tiende a obligar más a la mujer a ejercer y cumplir con responsabilidades y compromisos, mientras que a los hombres se les permite más perder el tiempo.
“A la hora de entrar a la UCR, el control social que se ejerce sobre las mujeres es muchísimo mayor, lo cual las compromete a sacar la carrera de forma más exitosa”, apuntó Sagot.

NOTA DE ADMISIÓN ACELERA EL GRADUARSE
El estudio también calculó que si un estudiante logra sacar, por ejemplo, una nota de 600 puntos en su examen de admisión (en una escala de 400 a 800), tiene un 45% más de oportunidades de sacar la carrera en menor tiempo que otro estudiante que obtuvo 500 puntos en esta prueba.
El Rector de la UCR, quien conoce de cerca el tema de la prueba de aptitud académica, destacó que el estudio revela las “virtudes” que tienen los estudiantes que sobresalen en la prueba de aptitud, ya que este examen comprueba habilidades y la formación académica que tiene el estudiante antes de entrar a la Universidad.
Colaboró en este reportaje Daniel Salazar

  • Sergio Zúñiga Ruiz 
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