Los Partidos Frente Amplio (FA) y Patria Nueva (PN) solicitaron a los magistrados del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) dar marcha atrás en la decisión de eliminar los nombres de los candidatos y candidatas a diputado en las papeletas de las próximas elecciones, donde solo aparecerán los colores de cada partido. Un asunto que ha motivado polémica pública en las últimas semanas, principalmente en redes sociales y programas de opinión, en la que el Tribunal ha dado sus razones para sostener la medida,  y los detractores las suyas al considerarla un atropello a las prácticas democráticas del pueblo costarricense.
“Sé que otros han estado de acuerdo con esto, yo no”, dijo el exdiputado José Miguel Corrales, candidato presidencial de PN, quien calificó de inaudita la decisión del  TSE y llamó a los costarricenses a manifestarse en contra.
“Todavía están a tiempo de enmendar el rumbo”, indicó por su parte el comité ejecutivo del FA en nota dirigida al presidente del TSE, Luis Antonio Sobrado.
 
La forma de votar que se pretende castiga a los partidos que hacen un esfuerzo por depurar sus listas de candidaturas, eligiendo a las personas más capacitadas y más honradas. Sin duda es una decisión que se orienta a favorecer a aquellos partidos que tienen más arraigo en la tradición, donde la gente vota por la bandera, sin importar las personas y su trayectoria, agrega.
 
Los representantes del Tribunal han dicho que esos reclamos son extemporáneos porque oportunamente les consultó a todos los partidos, ninguno se opuso y ahora la decisión está tomada. Tanto el FA como PN negaron haber sido consultados mientras que los demás partidos no se han pronunciado sobre el tema.
Corrales, a quien el TSE le rechazó un recurso contra la decisión de eliminar de las papeletas las listas de diputados, consideró que el hecho no se puede desligar de otros “muy cuestionables”, como el haber suprimido antes el voto con huella digital para sustituirlo por la marca con lapicero, lo que a su juicio elimina la única manera de probar un fraude.
También criticó la introducción del voto consular en el próximo proceso electoral, para que los nacionales residentes en el extranjero puedan votar, lo cual en su criterio es muy peligroso porque por Internet se puede realizar un “fraude masivo”.
Asimismo, consideró grave que las papeletas de votación vayan a ser impresas en Guatemala por una empresa trasnacional, cuando hay imprentas que lo podían hacer en el país, e incluso a menor precio. Calificó de peregrino el argumento utilizado por el Tribunal para adjudicar el contrato a la empresa extranjera. El acta del acuerdo dice que aunque se constató que tanto la imprenta del Instituto Costarricense de Electricidad como la Imprenta Nacional estaban en condiciones de hacer bien el trabajo, hay que considerar que en tales instituciones los trabajadores están organizados en sindicatos y existe el riesgo de que una huelga por razones laborales atrase la impresión de las papeletas.
“Yo hago la denuncia porque los indicios indican que las cosas no están bien; salvo que estemos de acuerdo en que no haya nombres, que una empresa guatemalteca haga las boletas, que el cónsul sea el que reciba los votos, y que sea marcando una equis como se vota. Si estamos de acuerdo con eso, pues no hay nada de qué hablar”, dijo Corrales.
Los representantes del Tribunal han aducido, además del costo de hacer papeletas de mayor tamaño, que la cantidad de partidos participantes llevará a incluir  una larga lista de candidatos, por lo que o bien habría que imprimirla en letra muy pequeña de difícil lectura, o la papeleta sería de un tamaño de manejo complicado para el elector.
Lo fundamental en este caso es el derecho del elector a ser informado y para eso el TSE publicará las listas de candidatos en su página web, publicará insertos en los periódicos y distribuirá a los partidos muestras de las listas de diputados que serán colocadas en todas las mesas de votación para que los sufragantes puedan informarse y decidir por quién votar, han argumentado.
DISCUSIÓN TONTA
Según el presidente del TSE, se ha generado una “discusión tonta” alrededor de un tema sencillo, porque lo fundamental es que la persona pueda estar enterada y pueda saber quiénes son los candidatos.
“Tradicionalmente la lista ha aparecido en las papeletas, pero hay una hiperinflación de los partidos políticos donde, solo en San José, en la papeleta para diputados pueden haber 19 partidos en disputa, y esto nos lleva a una lista que ronda o superaría los 400 nombres”, dijo Sobrado en una entrevista radial.
A esto debe agregarse que el elector tiene 90 segundos para votar y puede anularse su voto si no respeta este tiempo. Una lista de 400 nombres no puede ser leída en ese tiempo y más bien es un factor que impulsaría la eventual anulación del voto, señaló tras insistir en las diferentes formas previstas para dar a conocer los nombres de los candidatos.