Con un anuncio sorpresivo y contradictorio con su renuncia a la candidatura presidencial por el Partido Unidad Socialcristiana (PUSC), Rodolfo Hernández retomó este sábado su aspiración presidencial, sin revelar los nombres de quienes con su ¨traición¨ habrían provocado su declinación.

Solo 48 horas le duró la voluntad de apartarse de la campaña política al candidato socialcristiano.
Este sábado, tras recibir en la puerta de su casa de habitación a un grupo de partidarios que le pidieron regresar a la arena electoral, Hernández salió a la puerta de su hogar, acompañado de su esposa, Marcelle de Mezerville y sentenció: “no se repartan nada¨.
¨Soy un hombre que no puede dejar solos a los más desamparados¨, se justificó el político.
Hernández había renunciado a su candidatura por el PUSC, difundiendo una carta pública en la que decía que había sido traicionado por su entorno partidario, que sus candidatos a diputados solo querían conseguir una curul aunque al partido ¨se lo lleve el diablo¨ y denunció que trabajaban en su contra.
“Desilusión es lo que siento cuando la gente que puede contribuir a la campaña se niega a hacerlo, presionadas por quien pensó que mi candidatura sería no para ganar sino para resucitar al partido y allanar el camino para que otro sea el candidato en el 2018”.
Hoy, la desilusión y la rabia anunciada dos días atrás, habían desaparecido. Al dar marcha atrás en su anunció, Hernández alegó que, ¨cuando redacté la carta jamás pensé que hoy estarían aquí¨.
Con su decisión de volver a la campaña electoral Hernández contradijo, lo que había afirmado un día antes, cuando aseguró que era un hombre de palabra ¨aunque ustedes no lo crean¨ y pidió a los medios de prensa: “no me busquen”.