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Maclou LA REPUBLICA. Domingo 14 de Marzo de 1993 13C Domingo Scicli.
Jaime González.
También tenían otras tareas, porque la Ojalá que no volvamos a vivir algo pa tragedia del río Reventado, que destruyó Tacantidad de ceniza que cayó era tan grande recido jamás. Nunca podré olvidar como ras.
que amenazaba con hundir los techos y, dia lloraba la gente, cuando veía en lo que se ha Fue una suerte que las familias que parriamente, los pocos habitantes debían subir bía convertido su hogar.
tieron en esa fecha, lograron salir sanos y sobre sus casas y palear la ceniza acumusalvos.
lada por las noches. Además, las emanacio Eso nos convenció de que habíamos tones del volcán oxidaban las latas de zinc.
mado una buena decisión, pero partimos Fue cuando el Gobierno nos ofreció 70 Tuvimos que partir con la idea de regresar, aunque muchos de quintales de zinc y mi papá las guardó en su nuestros vecinos no volvieron nunca.
troja para repartirlas entre los vecinos. Pe Claudio Carvajal, conocido como don Cu Don Cuyo cumplió la promesa y Llano ro luego vinieron y se las llevaron otra vez. yo, se acomoda el sombrero para contar su Grande fue testigo de su regreso, donde ahoPiensa en algo que lo hace sonreír, una historia.
ra se dedica a la siembra de flores, en unión vez estábamos en un papal y tuvimos que Fue algo tremendo lo que pasó, todos los de sus hijos. Vea el pueblo ahora, es un paesperar corno veinte minutos, ya que una días había que sacudir las piedras y las ceni raíso, el desierto y la tragedia quedaron nube de ceniza lo tapó todo y no podíamos zas del techo. Además, a veces nos asustaba atrás.
vernos, todo se oscureció. Una familia que un ruido que se había hecho muy común patrabajaba con nosotros decidió irse.
ra nosotros. Alistaron sus cosas y se fueron para San Eran los grandes árboles que se esgajata María de Dota y, al llegar allá, la ceniza ban con el peso de las cenizas y la lluvia.
Una nueva vida se les había adelantado y ya había caído en La tragedia hizo que muchas personas ese pueblo. El padre del lugar en tono de se fueran a Heredia, a San Carlos y a Sar Llano Grande de Cartago no ha olvidado broma les dijo que se devolvieran, pues la chí, pero no me gustaba la idea de irme a la ceniza y la furia del volcán, pero aprenceniza había llegado con ellos.
esos campamentos del Gobierno, donde me dió a salir adelante y las flores fueron el vetían muchas familias en un aula de una es hículo utilizado para lograr el progreso.
cuela; yo pensaba que en cualquier momen Uno de los pioneros de este desarrollo es to se iba a armar un pleito entre tanta mu Luis Guillermo Vega, de la Corporación Vi La ceniza no se irá jer y tanto guila.
saflor, empresa que hace quince años se esDecidió irse a San Rafael de Heredia, pe tableció en la zona para sembrar flores.
Don Jaime se pone triste y ya no sonríe ro antes, los hombres habían ido a buscar Cuando dije que iba a sembrar flores en cuando recuerda como todo lo que habían casa y trabajo, en la finca de Elías Camacho. una zona fría, la gente creyó que estaba losembrado se perdió, las lecherías cercanas Ya quedábamos pocos, seguía temblan co, pero el experimento dio excelentes resulfueron cerradas y la emigración aumento de do tanto que hasta se estremecían los vi tados y se convirtió en una fuente de prosmanera desmedida.
drios de la casa y parecía que vivíamos en peridad para el pueblo.
Pero ahí se quedó y aprendió a esperar, un desierto, sin árboles, sin animales y to Muchos habitantes de Llano Grande laa batir la ceniza que en algunos lugares al do lleno de ceniza. Era solo Dios y polvo. boran en las fincas de flores y otros se han canzó más de un metro de altura, para tra En algunas oportunidades todo se oscu unido a la siembra en sus propios terrenos.
tar de recuperar la tierra que había queda recía y una vez nos quedamos tre ta La comunidad respira tranquilidad; la bedo inhabilitada y que los había dejado en la minutos sin ver nada. Ya estábamos agota lleza del paisaje aumenta con las flores, y la ruina.
dos y decidimos partir el de noviembre, gente, aunque mira con recelo al volcán, Muchas personas se fueron y no regresa pero ese día, mientras salíamos, ocurrió la confía en que la tragedia no se repetirá.
ron, solo vinieron a vender sus tierras.
Otros extrañaron el lugar y se instalaron en Llano Grande de nuevo. Fue una época muy dura en que día a día revolvimos la ceniza con la tierra original. Sin embargo, con los años, todo el material que lanzó el volcán se convirtió en algo maravilloso, la tierra ganó con esos nutrientes y, aunque la batalla fue muy dolorosa, al final la ganamos.
Todavía hoy, según aseguró don Jaime, cuando abre un hueco se puede observar fácilmente la ceniza. Además, muchas veces en las noches durante el tiempo de las erupciones, cuenta que subió para verlas. Eran explosiones muy bonitas y se sentían tumbos muy sólidos y algunos temblores. La gente que murió, fueron curiosos que se acercaron demasiado y no respetaron al volcán.
La tristeza ensombrece de nuevo su rostro curtido por 67 años de trabajos en el campo, y los malos recuerdos se revuelcan en su interior. La ceniza durará siempre. Imagínese que cuando yo era chiquillo y jugaba abrien207. 970. 102 do las cuevas de las taltusas (topos. muchas 276133 usios augasboue estaban llenas de ceniza de erupciones anS 2G Cogi teriores y yo decia que era pólvora 198575 89. 90 Polka CISG 150 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Jetal

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