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12 La República Jueves 14 de Mayo de 1993 Gentes y Paisajes Caminos y veredas. La esperanza es lo último. A ESPERANZA ES LO ULTIMO que se pierde, reza el dicho. para algunos sanjuanineños qué raro suena. el turismo puede ser una salvación; o que el Gobierno, con políticas coherentes coadyuve a resolver la postración financiera del lugar.
Un ex campeón quiere luchar Dentro del panorama de depresión de San Juanillo, un norteamericano, Jack Hunter, ex Campeón Mundial de Automovilismo (ya le haremos en otra edición una entrevista. desea poner su grano de arena para ayudar al lugar. No se trata del gringo que llega y se aísla; Mr. Hunter se enamoró de Costa Rica, a donde llegó por una recomendación del entonces Embajador de Costa Rica en Inglaterra, don Jorge Borbón. Recorrió todo el país, y al encontrar una finca de cuatro hectáreas frente al mar, a 100 metros del aeropuerto de San Juanillo, no lo pensó dos veces: la compró y decidió venirse a vivir a nuestro país.
Un caso diferente Nosotros abogamos para que el costarricense no venda sus tierras. Sin embargo, cuando el costarricense se cruza de brazos, y en medio de una riqueza inconmensurable como lo es el maravilloso collar de playas de arenas amarillas de este sector de San Jua Familia de don Francisco López, el primer maestro de San Juanillo, quien regresa a menudo para disfrunillo, uno medita: Idiay, el tesoro de paisaje que Dios tar de las bellezas escénicas del lugar.
nos dio, no logra sacar por iniciativa de los nacionales a los pueblos de la miseria. Entonces, si llega un extranjero que quiere dar trabajo en una plantación para la exportación y además en el negocio de los peces de colores. qué debemos hacer. Cerrarle las puertas?
No, si viene a compartir con nosotros, y a dar trabajo.
Hoy, el señor Hunter es una esperanza para San Juanillo. Pero cuidado: ya le robaron en la aduana parte de su equipaje. lo engañan los lugareños con encargos como el de horcones y otras cosas. Quiere seguir, pero si se le sigue tratando mal, a lo mejor toma sus cosas y se va con los bártulos a otra parte.
El maestro regresa Saring Estábamos tirados a la bartola debajo de un almendro, cuando desde la sombra de otro palo nos hizo un amable saludo una señora, a quien acompañaba su familia, entre esta, dos muchachas muy guapas. Venciendo nuestra natural timidez nos acercamos y cuál no sería nuestra sorpresa cuando nos invitaron a almorzar. Ni cosa mejor, porque ya picaba la tripa. Pero además porque don Francisco López, el jefe de familia, nos contó que el fue uno de los primeros maestros, ya que llegó a San Juanillo en 1959, y lo hizo en bicicleta desde Santa Cruz. Ya por aquellos años había más de 400 familias en la enorme finca del señor Sobrado, que medía 148 hectáreas, más 400 que le había dado en arriendo el Gobierno. Fue en la administración de don Francisco don Chico Orlich cuando por decreto ejecutivo se intervino la finca y se le buscó solución al conflicto. Sobre la historia de San Juanitc don Clodoveo Cruz Alvarez ha hecho un in Grupo de pescadores que trabaja con los hijos del Comandante Cero. Edén Pastora, quienes poseen teresante trabajo, del cual haremos un extracto para dos barquitos, pero se quejan de lo mal que anda la pesca con el fenómeno llamado Del Niño. Panfilo una edición futura de Gentes y Paisajes.
Pastora, tercero de izquierda a derecha, es uno de los hijos de don Eden Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica

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