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Jueves 13 de Mayo de 1993 LA REPUBLICA 15A BARELY Elliocide Opinión Consumismo y corrupción BIBLIOTECA RACIONAL JUAN RAFAEL QUESADA Dva dast CHISPORROTEOS Burta ALBERTO CANAS eta do CUAMPAGNE Una de sorpresas más gratas que me ha deparado en los últimos tiempos mi vida de lector, ha sido el encuentro con la novela EL EMPERADOR TERTULIANO LA LEGION DE LOS SUPERLIMPIOS, de un autor novel, Rodolfo Arias, que ha entrado con el pie derecho en las letras costarricenses, dándonos la más impresionante opera prima reciente y revelándose como una promesa firme, que ojalá no se meta en los manglares existenciales que están a punto de dar al traste con muchos de sus contemporáneos. La 10vela fue publicada por EDUCA en 1991, pero no es sino hasta ahora que me entero de que lo ha sido.
En La República del 15 de abril, Mariana Lev denuncia, acertadamente, el cambio de valores que está viviendo Costa Rica; es decir, el reino del consumismo desaforado, la pérdida de identidad y la corrupción.
Sin lugar a dudas, en las últimas tres décadas, la sociedad costarricense ha asumido y profundizado como valores, el individualismo, el egoísmo, el espíritu de lucro y el consumismo. Esto último está en estre.
cha relación con el carácter de periferia que mantiene nuestro país con los países industrializados.
En efecto, Costa Rica no es una sociedad industrial, pero debido a una estrecha relación de dependencia económica y cultural, ha adoptado las pautas de consumo de esas sociedades. Sociedades, donde según el decir de Galbraith: El individuo sirve al sistema industrial porque le suministra ahorro y el capital resultante le sirve consumiendo productos.
Es cierto que existe una correlación positiva entre desarrollo económico e igualación progresiva del consumo y de la satisfacción. Es cierto, además, que en las últimas décadas al menos hasta 1980 Costa Rica tuvo un crecimiento económico que se acompañó de una dinámica distributiva que aumento significativamente el nivel de vida de la mayoría de la población (especialmente los sectores medios se vieron muy favorecidos. Pero estos sectores adquirieron pautas de consumo excesivas, y llegaron a tener como punto de referencia el modo de vida americano. Presenciamos, entonces, un nivel de consumo con gusto de champaña pero LEVU con bolsillo de agua dulce.
En 1980 estalló en nuestro país una profunda crisis económica. La decadencia de la producción, el desequilibrio de la balanza de pagos y el voluminoso crecimiento de la deuda externa, han traído como resultado un significativo em.
pobrecimiento de los sectores bajos y medios, y la aparición de nuevas formas de riqueza extrema.
Si bien, la crisis económica ha empobrecido a muchos y enriquecido a unos pocos, todos los sectores sociales quieren consumir como antes, desean seguir pensando en el sueño americano. Ante la certeza de que la crisis es irreversible, el costarricense quiere realizar en lo inmediato, lo que en otra época habria te.
nido que concretar a largo plazo. De esa manera, la crisis nos hace. paradójicamente más consumistas.
El individualismo, y su hermano el egoísmo se acentúan, y para diferenciarnos, consumimos más y de mejor calidad. la marca nos diferencia y nos valoriza más que los atributos propios de la persona humana.
Si el éxito económico y la acumulación de riqueza constituyen el motor de la sociedad, el triunfador es el adinerado, el poderoso que La República Sorge tia sigue gozando de prestigio y estima. Hay que hacer dinero a toda costa y, para ello, muchos procedimientos son válidos. En ese contexto, el límite entre lo moral y lo inmoral se torna cada vez más borroso: la corrupción carcome, entonces, todo el cuerpo social. Se habrá acabado la Costa Rica de labriegos sencillos. El tema de esta novela es la vida burocrática.
Su escenario básico, una oficina. Pero allí termina la similitud con Los Perros no ladraron de Carmen Naranjo, novela que contempló angustiosamente, y casi indentificándose con ella, la falta de horizontes de la clase burocrática, mientras que la novela de Arias la observa desde fuera, con ojo satirico, desnudándole la mediocridad de sus horizontes, la pequeñez de sus ambiciones, la ausencia de visión, pero sin conmoverse. Las cosas son como son, parece decirnos Arias, y no es problema del autor ni del lector que así sean. La fotografia es terminante y cruel. es de señalar aquí el singular mérito de Arias, de escribir mirando hacia afuera, examinando el mundo, y no examinándose a sí mismo, introspectivamente, para narrar en tono de poesía lírica las propias experiencias, como ha ocurrido tan frecuente y tan decepcionantemente en las últimas promociones literarias, tan imbuidas de un existencialismo modelo 1947.
El genial tono satírico en que está escrita, la deja en fotografía y no le permite ni falta que le hace pasar a radiografia. Arias no le interesan las motivaciones de sus personajes, ni el origen de sus cortísimas y chatas ambiciones. Su objetividad en ese sentido, es casi hemingwaya.
na, y esto emparenta su novela también, aunque en menor grado, contra otra pieza costarricense de grandes méritos pero muy menospreciada: ADIOS, PRESTIÑO, de Hernán Elizondo, la nove la del arrabal josefino.
Las congojas de los huérfanos Fundado hace más de cien años por un grupo de Damas Vicentinas, el Hospicio de Huérfanos de San José pasó a ser, al paso de los años, la institución consentida de los costarricenses. Su obra social es inconmensurable y lo más encomiable es que su labor, tanto la de sus benefactores como la de las personas que lo regentan, se realiza en forma anónima. Atendiendo a estas razones, en consideración a que el mencionado Hospicio se ha constituido en una institución eminentemente popular, la Asamblea Legislativa dictó la Ley No. 4286, la cual estableció en sus artículos y 11 la obligación que tiene la Municipalidad de San José de entregar al Hospicio de Huérfanos de San José el cincuenta por ciento de las utilidades o excedentes que generan los festejos populares de fin de año. Quiso así el legislador que el pueblo costarricense compartiera la alegría de los festejos con los huérfanos del Hospicio. Pero ahora resulta que su junta directiva ha tenido que recurrir a los tribunales de justicia a interponer un Recurso de Amparo, a fin de que se obligue a la mencionada Municipalidad a cumplir con la ley, con el silencio complaciente de la Contraloría General de la República, que obligada por la ley a intervenir, no ha he.
cho nada al respecto. Mayor desparpajo no se puede concebir en un país co estro en el cual, como Pero todo cuanto llevo dicho es nada, ante lo que realmente sorprende y apabulla de EL EMJOSÉ CORDERO CROCERI PERADOR TERTULIANO LA LEGION DE LOS SUPERLIMPIOS, que es su lenguaje. Con finísidecía nuestro inigualable Aquileo Echeverría, la ley mo oído, comparable con el de Aquileo, Carmen se estira y se encoge, según a quien se le aplica. Lyra y Fallas, Rodolfo Arias no es que ha captaEs oportuno aprovechar la oportunidad para infor do la terminología, los ritmos y las tonalidades mar sobre la labor, desconocida para la mayoría de los del lenguaje que llamamos pachuco, del lenguaje costarricenses, realizada en beneficio de la niñez de de barrio bajo, de autobús, de gradería de sol, sino samparada. Gracias a ingentes sacrificios, al desinte. que ha escrito su novela en ese lenguaje, experirés y espíritu de servicio de sus directoras y a la gene mento inédito en Costa Rica (aunque México lo rosidad sin límite de personas nacionales y extranje conoció hace unos diez años. ras, que bajo el anonimato le hacen apreciables dotaciones, se logró levantar en Vista de Mar de GoicoeNo es lo que llamaríamos una novela hablada, chea, unas cómodas instalaciones, con amplias zonas pues no hay un narrador identificable que habla, para cultivos, en donde los niños y niñas aprenden el sino, claramente, un autor que escribe, y que obamor a la tierra y reciben los conocimientos básicos serva omnisciente a sus personajes, ninguno de para que orienten su vocaciones en el futuro. quí los cuales está identificado por su nombre, y totambién se mantiene un lote de vacas lecheras, con lo dos por sus apodos, algunos de ellos ingeniosísicual el Hospicio se surte para llenar sus necesidades. mos. Arias da muestras de una facundia lingüísAdemás, cerca de Ciudad Colón se levanta un tipo de tica que entre nosotros sólo tiene parangón con centro de enseñanza vocacional para jóvenes desam la de Durán Ayanegui, y su constante empleo del parados, en el cual, con el asesoramiento de algunas juego de palabras, del calambur, es una invitainstituciones públicas, se les proveerá de alguna ca ción para el lector, que de pronto siente la satisrrera práctica que les sirva para enfrentarse a los em facción de desentrañar alguna inteligente charabates de su futuro. Podríamos destacar la labor que se da que estaba medianamente escondida.
realiza en otros campos, pero el objeto de este comentario, no era otro que el de señalar la injusticia que se más de sus numerosos méritos literarios, EL comete con una entidad que, como el Hospicio de EMPERADOR TERTULIANO LA LEGION DE Huérfanos, debe merecer el respeto y el apoyo de quie LOS SUPERLIMPIOS, será de consulta obligatones fueron llevados a cargos públicos mediante el voto ria en el futuro, cuando se trate de estudiar cómo de todos los ciudadanos. ATHUV hablaba el costarricense urbano de fines de siglo.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
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