14LA REPUBLICA. Viernes 25 de setiembre de 1987.
EDITORIAL ENFOQUE DE REDACTORES Las dos vertientes de una visita Hay que arriesgar para triunfar intre nog nos gio dos los nue ha rar mia tras cul hai azu cad che ba: en tida cor No es lo mismo analizar la visita del presi ca, con lo individualistas que somos, es probadente Arias desde los Estados Unidos que des ble que aún la claque opositora sintiera, a pesar de Costa Rica.
de sus aplausos, una reacción contraria a la parPara tratar de entender mejor el punto de ticipación extraña en un asunto cuya resolución vista estadounidense conviene ponerse, por un sólo corresponde a la nación afectada.
momento, en su lugar. Supongamos que en Abierto así un ángulo de comprensión de Costa Rica la oposición domina la Asamblea Le las posibles reacciones de los estadounidengislativa y que un sector de la prensa, por con ses, es lo cierto que ellos conforman una socievencimiento, por prurito de independencia, o dad más abierta, menos individualista que la por partidarismo electoral, auspicia y agiganta nuestra, por lo que sus reacciones probablela postura de la oposición formando una enor mente no serán tan agudas como serían en me caja de resonancia a sus tesis, contrarias a Costa Rica.
las del Poder Ejecutivo, elegido por una impor Desde nuestra perspectiva nacional, debetante mayoría de votos populares.
mos procurar no precipitar un juicio de valor eSupongamos, también, que un Jefe de Esta mitido sobre los signos externos y momentánedo extranjero viene al país en vísperas de una dos Unidos.
Por el momento, sólo percibimos os de la visita de nuestro Mandatario a los Estavotación importante para la controversia entre gobierno y oposición, y se dedica a pronunciar los aplausos, los actos protocolarios, y, sin duuna apretada serie de discursos en favor de la da alguna, el respaldo internacional y local a su tesis opositora.
tésis, coincidente con la de la oposición estadounidense, pero las reacciones provocadas Planteado así el cuadro, preguntémonos por los aspectos negativos de su gira, se produqué pensaríamos los costarricenses de esa acti cirán en el futuro y son ellos los que definirán si tud, y también, desde luego, qué pensaría de e son buenos o malos para el interés nacional.
lla el Presidente de la República, en cierta for No cabe duda de que la visita presidencial a ma anfitrión, aunque no hubiera cursado invita los Estados Unidos constituyó, desde el primer ción oficial al mandatario extranjero para su visi momento, un riesgo. Los efectos internacionata.
les de la visita han sido excelentes, como era Conociéndonos bier es dable suponer, se previsible. Ahora falta por considerar los efecgún lo propuesto, que la legión opositora aplau tos nacionales de la misma, especialmente desda, hasta reventarse las manos, la febril activi pués de que, de manera imprevista, el Presidendad del mandatario visitante, y que el sector le te Arias se hizo vocero de la petición nicaraal a las tesis del gobierno manifieste resenti güense sobre la necesidad de un diálogo direcmiento por la intromisión de quien llega de afue to Estados Unidos Nicaragua, mientras nada ra para decirnos como debemos manejar nues se dice o se hace en relación a la intervención tra política. Si el supuesto ocurriera en Costa Ri soviética y cubana en el área centroamericana. El que no arriesga no cruza el mar. dice un viejo y gastado adagio. Pero a pesar de su antigüedad y constante uso, cuán cierto y aplicable que es quizá a una de las situaciones que mejor le calza el dicho es la que se vive en la sede de la Federación Costarricense de Fútbol, también conocida como Casa de los sustos.
En ese edificio, ubicado en La Sabana, se debate desde varios meses atrás un importante asunto, que además es base fundamental Eliseo Quesada Campos para el crecimiento de nuestro decadente balompié. el nombramiento de un Supervisor de Selecciones y del técnico de nuestra representación mayor.
La discusión de quién podria ser la persona más adecuada para este cargo se hacia en medio de un ambiente de optimismo poco común entre nuestros dirigentes futbolísticos.
Ese optimismo se debía a grandes logros obtenidos por el Comité Director de ese organismo, entre el que se contaba el total financiamiento de un pomposo plan de Selecciones, por parte de la empresa privada, con un costo de muchos millones de colones.
Se hablaba también de que los candidatos no incluían en nada a costarricenses, pues ya en años atrás se habían producido muchos fracasos por nuestra inexperiencia y poco avance, en materia balompédica.
Sin embargo, al transcurrir el tiempo, el tema se fue alargando, mientras los aficionados a nuestro máximo deporte seguía.
mos esperando el desenlace del asunto.
Al momento de escribir esta columna, aún no se conocía quién ocuparía los cargos mencionados, pero supongo que al momento de que usted lea esta columna, ya se debe conocer quién es el dueño de cada vacante.
Pero indiferentemente de que estén o no nombrados, las lar.
gas que se le han dado a su elección ha dejado en claro que a nuestros dirigentes de fútbol aún les hace falta la suficiente madurez como para aspirar a un crecimiento del deporte rey de los tiCOS.
Ahora, luego de todo lo que se dijo y se pensó, ya la posibilidad de que un extranjero se haga cargo del puesto de técnico de la mayor es casi nulo, a no ser por el entrenador del Cartaginés.
La FEDEFUTBOL se ha asustado por las altas cifras que piden los foráneos por dirigir, pero realmente no han pensado que esa inversión es fundamental para que el fútbol costarricense resurja.
Es cierto que en nuestro país existen entrenadores capaces, que han alcanzado grandes logros en nuestro territorio y en el área de CONCACAF, pero eso no quiere decir que sean los más adecuados para hacerse cargo de la selección mayor.
Necesitamos gente de afuera, que nos venga a enseñar cosas nuevas y revolucionarias, e intentar salir de la clasificación que nos tiene la FIFA entre el mundo del fútbol, uno de los más bajos.
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La República al Di Publicado por Editorial La Razón, Director Vicepresidente: Lic. Joaquín Vargas Gené Gerente General: Enrique Odio Herrera Subdirector Yehudi Monestel Arce Subgerente General Luis Guillermo Holst Quirós cia su me СО Jefe de Redacción: Luis Cartin Sánchez Gerente de Ventas: Alberto Oreamuno Gutiérrez PREMIO LUTHER KING Gerente de Producción: Ricardo Lang Alvarado Mul Central telefónica: Publicidad: 23 02 66 22 28 14 22 92 15 23 05 60 23 00 76 23 06 44 Cobros: 23 06 96 21 04 29 23 04 37 Suscripciones: 23 88 85 23 00 22 Apartado: 2130 1000 Télex: 2538 Las publicaciones en este tipo de letra son pagadas Impreso en los talleres de Editorial La Razón.
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