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16 Revista Dominical. LA REPUBLICA. Domingo de noviembre de 1987 UNIDOS EN IDEALES HACIA EL TRIUNFO DE 1990 EL DESARROLLO INTEGRAL DE COSTA RICA. los costarricenses los liberacionistas Durante más de cuatro décadas, el liberacionismo ha sido el eje central del desarrollo nacional. Ningún otro movimiento político, en la historia de Costa Rica, ha interpretado con tanta fidelidad al ser costarricense.
Para los liberacionistas el destino de la Patria, antes y ahora, es un compromiso ineludible que se debe asumir con entrega, autenticidad, desprendimiento y serenidad. Por ello la política, en el sentido liberacionista, es un acto de compromiso integral con Costa Rica.
Para los liberacionistas no existe una frontera entre lo político, lo económico y lo social. Todas esas variables son expresión de una misma aspiración nacional: alcanzar la democracia integralmen Costa Rica. Para nosotros, la democracia económica y la democracia social son el soporte esencial y mutuamente condicionado de la democracia política. Una realidad explica a las otras y viceversa.
Costa Rica, en la última década de este siglo, tiene que profundizar aún más su democracia económica y su democracia social, a la vez que preservar la vigencia plena de su democracia política. Para ello, el país tendrá que enfrentar con madurez y realismo reformas impostergables de naturaleza estructural. Esas reformas alcanzan necesariamente al Estado y también al sector privado.
LA DEMOCRACIA ECONOMICA LA ULTIMA DECADA DEL SIGLO XX.
Avanzamos hacia la última década del siglo XX. Hace ya varios años que la crisis económica mundial golpea intensamente a las puertas de nuestra sociedad. Aún hoy, surgen nuevas y graves interrogantes como consecuencia de la inestabilidad de los mercados financieros mundiales. pesar de ello, nos hemos defendido y hemos superado el caos del período 19781982.
La obra de la reconstrucción nacional, sin embargo, no ha concluido. Queda aún mucho camino por recorrer.
EL ESTILO DE DESARROLLO LIBERACIONISTA.
Lograda la democracia política por los hombres de principios de siglo y reafirmada la democracia social por el liberacionismo, nos corresponde ahora alcanzar para todos los costarricenses la democracia económica.
Esa democracia integral que requieren los tiempos y en la que los liberacionistas estamos trabajando desde 1982, tendrá que sustentarse en una clara definición de las funciones que le son propias al Estado y a la banca nacionalizada, así como las que corresponden al esfuerzo de los trabajadores y de los empresarios, como fuentes generadoras de riqueza y crecimiento nacional. Es necesario acelerar y profundizar ese ajuste y esa modernización, a la vez que avanzar sin miedo, con inteligencia y audacia, hacia una redefinición de nuestra inserción como país en la economia mundial.
LIBERTAD JUSTICIA SOCIAL.
La crisis de los últimos años ha puesto a prueba el sentido y la razón de ser del estilo de desarrollo liberacionista. Nosotros hoy queremos reafirmar y ratificar que, en lo fundamental, la opción liberacionista ha sido y es la correcta, y que no podrían explicarse los logros de nuestra sociedad, en lo político, en lo económico y en lo social, sin una valoración justa y honesta de lo que ha sido la obra del Partido Liberación Nacional.
Ese juicio, sin embargo, jamás podría excusarnos de no asumir, a la vez, una necesaria actitud crítica. El liberacionista está obligado, como el que más de los costarricenses, a ser exigente y riguroso en el balance de lo que hemos hecho y de lo aún falta por hacer antes de que se hayan cumplido plenamente, los objetivos de la Segunda Proclama de Santa María de Dota, en el origen de nuestro movimiento político, cuando don José Figueres le declaró la guerra a la miseria.
Firmy responsable: Todo ello tendrá que hacerse sin abandonar la razón primera de nuestro compromiso político liberacionista: la lucha por la libertad, la paz y la justicia social. De ahí que el esfuerzo trascendental del Presidente Oscar Arias por alcanzar la paz y la democracia en Centro América, es un empeño que nos enorgullece y dignifica como país. Así lo ha entendido también la comunidad internacional. El Premio Nobel de la Paz que le ha sido otorgado es el justo reconocimiento a su talento y a su visión de gran costarricense.
GUSTAVO ABARCA Cod. 681. 430
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