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Revista Dominical. Domingo de febrero de 1988 Este es mi PROBLEMA Dra. Emily Powers Santa Bábara de Heredia Querida doctora: Mi hijo de años tiene el problema de que sufre de pesadillas; todas las noches se despierta llorando y quiere pasarse a dormir con nosotros. La persona que lo cuida (porque yo trabajo en las tardes) dice que durante el día está como siempre y que se porta bien. Qué me aconseja. Debo llevarlo a un médico. Madre preocupada Querida señora: No me parece que el caso de su hijo amerite la intervención de un facultativo; creo que usted está en capacidad de ayudarlo más positivamente que una persona ajena a la familia: rodee de tranquilidad y cariños las horas anteriores al sueño del niño, cuidese de que no mire en la television programas de mostruos que pueden excitar negativamente su imaginación y sea comprensiva con él, cuando en la noche demuestre estar perturbado. La seguridad y el amor que usted infunda en la mente de su hijo serán la mejor protección contra las pesadillas.
Emily Powers Querida Emily Powers: Desde hace años conocí a una persona de quien me enamoré inmediatamente, pero yo tengo 19 años y él 40. Al principio todos me decían que eran chiquilladas. pero ha pasado el tiempo y siento que cada vez lo amo más. El es bueno, amigo de mi casa, siempre me ha respetado y está dispuesto a visitar la familia; sin embargo duda de mí y me dice que lo piense bien, porque la diferencia de edades es muy importante. Temo que otra mujer con más experiencia (yo nunca he tenido novio) me lo quite. Qué me aconseja?
Marita Juan Pablo II Querida Marita: Si ambos están seguros de la solidez del cariño que los une, no deben temer por la diferencia de edades. Usted me escribe que nunca ha tenido novio, y que desde edad temprana está soñando con el amor de ese hombre; estas condiciones me hacen aconsejarle que deje que pase más tiempo antes de tomar decisiones definitivas sobre su futuro, con el fin de que se cerciore de que es auténtico el amor que siente y no solamente imaginación de niña inmadura.
Emily Powers El camino de la solidaridad OR encima de los sistemas, regímenes e ideologías que intentan regular las relaciones sociales, he propuesto una vía, la de la solidaridad: el camino de la solidaridad del mundo del trabajo. Se trata de una solidaridad abierta y dinámica, basada en la concepción del trabajo humano y que ve en la dignidad de la persona humana, en conformidad con el mandato recibido del Creador, el criterio primero y último de su valor. Ojalá esta solidaridad les sirva a ustedes de guía en sus debates y en sus realizaciones!
Querida doctora: Tengo 29 años; tuve un novio durante años y tuvimos un hijo; el entonces me decía que se iba a hacer cargo de mi, pero como toma mucho licor yo me aburri y me vine de Guanacaste a trabajar en Heredia; pasamos un año sin vernos, luego él me buscó y pensamos juntarnos, pero no nos convino y él se trasladó a trabajar a San José y se olvidó del niño y de mí, nunca volvió a darnos nada y se junto con otra mujer sola, que ya tenía hijos y con quien tiene otro chiquito. El problema es que ahora sabe dónde trabajo y me llama constantemente para que salgamos y hagamos el amor y como yo lo amo tanto y además es el padre de mi hijo, no puedo negarme. Quedamos nuevamente en que íbamos a juntarnos, pero este fin de año me dijeron que él tenía iguales planes con otra mujer y a mí me duele mucho el engaño. Sufro mucho porque lo quiero y ahora no sé si dejarlo y nunca más hacer el amor con él o perdonarlo, porque sé que sus problemas se deben a que bebe mucho licor. Cree usted que él me ame?
Vivo en Rohrmoser La Organización Internacional del Trabajo tiene ya un enorme patrimonio de relaciones en su campo de actividad. Ustedes han elaborado numerosas declaraciones y convenciones internacionales, y elaborarán otras para afrontar los problemas que se vayan presentando y para encontrar soluciones cada vez más adecuadas. Han formulado orientaciones y establecido programas múltiples y están decididos a continuar, por su parte, esta aventura sublime que es la humanización del trabajo. Al tomar la palabra en nombre de la Sede Apostolica, de la Iglesia y de la fe cristiana, deseo de todo corazón reiterarles mis felicitaciones por los méritos de su organización. Y, al mismo tiempo, formulo el voto de que su actividad, todos sus esfuerzos y todo su trabajo continúen sirviendo a la dignidad del trabajo humano y al auténtico progreso de la humanidad. Les deseo que contribuyan sin tregua a la creación de una civilización del trabajo humano, de una civilización de la solidaridad, y diría aún más, de una civilización del amor del hombre. Ojalá el hombre, gracias a sus esfuerzos, considerables y de todas clases, someta verdaderamente la tierra y alcance él mismo la plenitud de su humanidad, aquella plenitud que le ha sido fijada por la sabiduría eterna y por el eterno amor!
Estimada amiga: Ha hecho mal en alentar por tanto tiempo esperanzas de alcanzar una mejor forma de vida al lado de un hombre que mantiene una conducta tan irregular. Lo mejor que puede hacer es tratar de olvidar el pasado y encarar el porvenir con más valentía; tiene usted trabajo y puede mantener a su hijo; dedíquese a realizar esa labor que si ese hombre la ama en realidad, enmendará su conducta y le dará pruebas de su cariño. Piense que nunca podrá ser feliz ni logrará dar a su hijo un hogar estable y bien consolidado, mientras él continúe bebiendo y manteniendo relaciones con Otras mujeres. Me parece que si como usted dice ahora sufre mucho, sufriría mucho más si estuviera unida a él y él no se enmienda.
Emily Powers Si usted tiene algún problema escriba a la doctora Emily Powers, apartado 2130 1000 San José. En esta sección aparecerá su respuesta.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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