Guardar

LA REPUBLICA. Domingo de diciembre de 1988 15 OPINION CIRCULACION PRESTAMO Aibliotecas.
Son ¿Quiénes ensucian la ciudad?
Oración y contemplación. Biblioteca Nacionate sort ples El problema de la basura en las ciudades no se soluciona con campañas esporádicas, sino con un sostenido proceso educativo desde las escuelas. El problema de la Mario Brenes Rimolo basura refleja en el costarricense una ausencia de cultura y de conciencia social; lanzar basura a la calle es ya algo instintivo un acto que no se valora como negativo sino como algo común. El costarricense individualmente es limpio, mantiene su casa limpia; pero socialmente, ciudadanamente es todo lo contrario. Veamos quiénes ensucian la ciudad: 1) Los comerciantes y las tiendas que barren sus locales en la mañana de adentro hacia afuera, echando la basura en el caño que minutos antes el servidor municipal limpió. Qué cuesta recoger la basura con una palita y meterla en una bolsa plástica?
2) Los peatones que estando a un metro de un basurero, indiferentemente botan la basura en media calle. Por qué no guardarla hasta encontrar un basurero?
3) Los vecinos, que creyendo limpiar el frente de su casa, su acera y su caño, creen haber cumplido con su deber barriendo la basura echándosela al vecino, o simplemente dejando la basura que barrio de su acera en el olo caño. por qué no recogerla y depositarla en la bolsa de la basura?
4) Los Oficiales de Tránsito que una vez hecho el parte, botan el papel carbón a la calle.
5) Los recolectores de basura de las municipalidades, que tiran con descuido las bolsas con basura rompiéndolas, derramando la basura, y sin ser capaces de juntar lo que se cayó, dejan tras de si una estela de papeles y desperdicios en media calle. Por qué no ser más cuidadosos en la manipulación de los depósitos de basura y por qué no juntar lo que se cayó?
6) Los turistas nacionales y extranjeros que les da lo mismo dejar los parques, playas y sitios turísticos llenos de botellas de vidrio y plástico, bolsas, papeles y vasos, sin percatarse del daño que se hace al ecosistema y al paisaje. Por qué no llevar consigo una bolsa plástica para guardar la basura y luego botarla en el lugar indicado?
7) Los que viajan en autos y autobuses, que lanzan basura por la ventana sin considerar lo indebido del hecho. En todo autobús debe haber un basurero y si no ¿por qué no guardar la basura y depositaria luego en un basurero?
8) Los que viven en las riberas de los rios, que lanzan toda clase de basura al cauce como si eso no fuera problema de ellos, a los que tiran basura en los lotes baldíos.
En fin, todos en una u otra forma ensuciamos la ciudad. Parece que nos hemos vuelto un tanto desinteresados, despreocupados e indiferentes por la limpieza de esta ciudad que es nuestro hogar. Qué pensaría usted si yo abro la ventana de su casa y tiro a través de ella toda clase de basura, o si caminando por la acera tiro las cáscaras de una fruta al patio de su casa?
Pensaría que soy un cochino verdad, además de que le disgustaria. Pues, eso es lo que piensa la ciudad San José de todos nosotros, hemos convertido nuestra casa en una porqueriza, a Costa rica en un gigantesco basurero.
Debemos tomar conciencia de este grave problema social y emprender un estuerzo para cambiar de actitud, educándonos, educando a nuestros hijos, ayudando a limpiar, controlando bien la higiene del barrio de la ciudad.
Las autoridades deben instalar más basureros en las ciudades, sancionar con multas, a través de una acción permanente, a quienes boten basura en la via pública, o educar a los niños para que razonen lo necesario de no botar basura donde no se debe; las empresas usuarios de envases desechables deben contribuir con campañas preventivas de limpieza, en fin, en realidad debe ser una acción nacional para eliminar la irritante costumbre de tirar la basura donde mejor nos venga en gana, y es necesario que empecemos a llamarle la atención a quienes veamos botar basura donde no debe. Si todavía nos queda vergüenza y amor por lo nuestro, si todavía nos preciamos de ser un pueblo culto y limpio, este panorama de desechos y suciedad debe cambiar para poder así vivir en una ciudad saludable, bella y humana.
He insistido en que los ejercicios de conscienciación. fundamentalmente el del silencio y el y de las sensaciones Juan Luis Mendoza corporales, contribuCOmumarcisyen, bien ar a las stalos rvaосо eme a de erán gasitica el Cuatricentenario de la recolección agustiniana Por: Angel Ríos Espáriz ser romsus o si eden dos Ride ad a Hay en el hombre una mente y un corazón místicos, afirman los experimentados en las cosas del espiritu. Se trata puntualiza Tony de Mello de una facultad que nos permite conocer a Dios directamente, comprenderle e intuirle en su ser auténtico, aunque de manera oscura, sin necesidad de usar palabras, imágenes o conceptos. Otro autor moderno llama a esa facultad Corazón. asi con mayúscula. Es como una especie de surtidor de agua viva, pero oculto y tapado.
Basta quitar de encima la piedra que lo tapa, y automáticamente se alza, con increible fuerza, al cielo. El hombre espontáneamente busca a Dios, tiende a unirse a El, liberado de cuanto se lo impide.
Liberado sobre todo ¿de qué? Pues de los pensamientos, imágenes y palabras que, más que facilitarnos la unión con Dios, lo que hacen es entrabarla: donde hay amor sobran las palabras.
Ahora bien, lo que más contribuye a la liberación de cuanto impida una comunicación más directa con Dios es el silencio interior, el silencio de la mente. Se ha fijado usted hasta qué punto son capaces de percibir las cosas los ciegos, mediante el oído y el tacto? Si fuéramos mentalmente ciegos, seríamos capaces de oir y tocar a Dios con mucha facilidad, mediante ese Corazón místico que todos llevamos dentro.
De ahí la necesidad de ejercitarse en el silencio revelador. en la percepción de las sensaciones corporales, sobre todo de la respiración, como disposición para la contemplación de Dios. Sin olvidar que esos mismos ejercicios, bien hechos, hechos con un Corazón desarrollado pueden ser y de hecho lo son en muchos casos auténtica contemplación: unión con Dios sin que medien pensamientos, imagines ni palabras.
Comunicación directa, hecha de vacío, oscuridad y silencio. Dios está o, mejor, es en todo. pero para verlo hay que cerrar los ojos.
hechos, hechos con dedicación y constancia, a que el hombre adquiera poco a poco los inestimables bienes de la relajación, la serenidad, dominio interior, gusto por la vida, fuerza espiritual. etc.
Tony de Mello afirma, fundado en su experiencia y en la de otra mucha gente, que esos ejercicios pueden constituir para el hombre de fe no sólo una buena preparación para la oración y la contemplación, sino que son en sí, que pueden ser, una verdadera contemplación, en el sentido cristiano del término. Yo comparto plenamente la afirmación.
Expresándonos de una manera muy simple, pero clara y suficiente, podemos definir qué es oración y qué es contemplación, para los efectos de este escrito. La Oración es una comunicación con Dios, hecha con base a pensamientos, imágenes y palabras. La contemplación es esa misma comunicación con Dios, pero sin pensamientos, imágenes o palabras; o muy poco de todo eso.
El ser humano es por naturaleza religioso, es decir, busca a Dios, lo siente en la oscura noche de los sentidos.
Ahora bien, basta que el hombre sea consciente de sí, mediante los ejercicios del silencio o de las sensaciones corporales, para que facilmente se ponga en comunicación con Dios, y esto sin necesidad de imágenes, pensamientos y palabras sino directamente. Es la contemplación, que San Juan de la Cruz define como noticia general, confusa y amorosa. Cómo se explica?
Rica los Os e 70a En este año de 1988 se celebra, a lo largo y ancho de la Recolección Agustiniana, el cuatricentenario de su nacimiento. Todo centenario es una ocasión única para analizar el pasado, ver el presente y crear perspetivas de futuro.
Han pasado muchos años desde que el de diciembre de 1588, un grupo de frailes de la Orden de los Agustinos. deseosos de mayor perfección. con licencia del General, abren el primer convento en Talavera de la Reina. Pero no sólo han pasado años, también ilusiones, angustias dificultades muy serias.
Para poder entender un poco este proceso religioso, tendríamos que remontarnos hasta San Agustin, Padre de la Iglesia, teólogo, filósofo, fundador de monasterios y por encima de todo santo. La influencia de esta gran persona ha sido decisiva para la vida religiosa e incluso para la misma Iglesia, el Concilio Vaticano Il cita con mucha frecuencia a San Agustin en sus documentos.
De aquellos primeros monasterios fundados por San Agustin, ya hace más de mil quinientos años nosotros debemos la inspiración la regla y en cierta forma, el carisma actual: servicio a la Iglesia, vida común interioridad.
Desde ese siglo hasta el XVI, fecha del nacimiento de la Orden agustinorecoleta, por desgajación de la Orden de los Agustinos, hay muchos entresijos dificiles de resumir en un breve artículo de prensa. Además, nuestro interés se centra lógicamente, a partir del nacimiento de 1588.
La nueva Congregación, que entonces era dependiente de la Orden madre, nace con un espíritu de perfección, de recogimiento (de ahi viene recolección. propio del ambiente de la contrarreforma católica y más todavia de la España Imperial de los Reyes católicos, Carlos y Felipe II, Rey gobernante a la sazón. Las circunstancias históricas se hacen sentir, por lo tanto, con mucha fuerza.
La nueva congregación no es una luchadora solitaria nadando contra corriente, sino que participa del fervor religioso y cristiano, fruto del espíritu de San Agustin. Podemos mencionar a Santo Tomás de Villanueva, a Agustín rrelas de San Ildefonso y a Fray Luis de León, principal redactor de la Forma de Vivir, documento fundamental que va a inspirar la vida de los primeros agustinos recoletos.
Aquellos primeros frailes, que nacen con un espíritu de contemplación, de vida comunitaria y de sobriedad, pronto se lanzan a la aventura misionera. Filipinas va a ser el campo principal de su apostolado, aunque también en México, e incluso en Costa Rica, donde llegamos en 1644, desarrollaron una fecundísima labor apostólica. La tarea evangélica en Costa Rica no duró mucho tiempo.
Pero no todo ha sido gloria, ha habido momentos muy difíciles, principalmente en el siglo XIX: primero la Guerra de la Independencia frente a los franceses que invadieron la península Ibérica y después la desamortización de Mendizabal, dejan reducida la Orden a la mínima expresión. Como dice Angel Cuesta, historiador de la Orden: la desamortización) no sólo arrebató a la congregación sus conventos y dio al traste con la vida religiosa de sus moradores; llegó, incluso, a modificar su misma orientación espiritual.
Con el siglo XX comienza una gran recuperación a todos los niveles, de tal forma que, de 400 miembros que había a comienzo de siglo, hoy somos 1200 aproximadamente. En estos momentos, la crisis de valores que afecta a todos los sectores y niveles de la sociedad, nos está golpeando negativamente. Por otra parte, hoy todo se cuestiona seriamente, incluso el mismo Concilio Vaticano II, nos invita a los religiosos a renovar nuestros criterios, a una reflexión seria. Todo esto produce incertidumbre, falta de seguridad. De todas formas las purificaciones son necesarias, aunque sean traumáticas.
Por otra parte no podemos olvidar las palabras del Señor: Yo estaré con vosotros todos los días.
En Costa Rica, los Agustinos Recoletos, llegamos por segunda vez hace 25 años, un de Diciembre 1963 En principio éste era un lugar de paso hacia México. Los frailes, mientras arreglaban el papeleo, realizaban ministerios esporádicos en diferentes parroquias. Al tiempo se vio la inaconveniencia de instalamos definitivamente en este pais y a la parroquia del barrio del Carmen de Alajuela, se añadió el ministerio de la Ciudad de los Niños, donde los agustinos recoletos llevamos más de 20 años de callada y fructifera labor en pro del cuidado y promoción de la niñez.
Otra fecha importante fue el de febrero de 1977, cuando tomamos las parroquias del Sarapiqui (Rio Frio, Puerto Viejo, San Miguel) y la de Venecia en San Carlos. estas parroquias se añadió San Antonio de Belén. En San José estuvimos realizando tareas de capellanias y hospitales durante un tiempo, después tuvimos la parroquia de Cristo Rey hasta que el año pasado se cumplió el contrato con la diócesis. Ha habido, pues, una presencia ascendente.
Este año de 1988, tuvimos capitulo en la Provincia de San Nicolás de Tolentino (la Orden se divide en siete provincias que gozan de amplia autonomia. En esta asamblea es donde se trazan las políticas a seguir durante un trienio y que se plasman en unas ordenaciones. Entre otras cosas, se va a poner mucho énfasis en las vocaciones. Esto va a afectar de lleno a Costa Rica donde, en vista de las buenas perspectivas vocacionales, vamos a impulsar un seminariopostulantado, que funciona desde hace tiempo, pero nunca se le dedicó todo el esfuerzo debido en cuanto a personal, medios e infraestructura. Esto nos hace pensar en el futuro con confianza en cuanto a la renovación del personal, y algo muy importante: estamos vivos, somos capaces de engendrar vida. En cuanto al trabajo ministerial, podemos decir que, a corto y medio plazo, seguiremos sembrando en el surco la semilla del evangelio en este pueblo. largo plazo, sólo Dios sabe; además, las Ordenes tenemos una tarea supletoria, El día que hay clero nativo suficiente, tendríamos que decir que hemos cumplido la misión para la cual nos requiso la Iglesia. Igualmente podríamos decir que hemos sido fieles al espíritu de San Agustin, que nos manda servir a la Iglesia, somos unos pobres siervos que hemos hecho lo que teníamos que hacer Las opiniones contenidas, en los artículos publicados en esta página, son las personales de quienes las firman y no coinciden, necesariamente, con las del periódico.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

    Spain
    Notas

    Este documento no posee notas.