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8. DOMINGO. LA REPUBLICA. Domingo 26 de febrero de 1989 Por Pedro Camacho para DOMINGO ¿A dónde van los caballeros después de la oficina? POR UNA VIDA LLENA DE ILUSIONES ERCIOPELO, roble, obor a buen whisky, aroma de pipas y camareros silenciosos: elementos esenciales de los aristocráticos clubes ingleses, esos dinosaurios de épocas muertas en una sociedad que ya no es lo que era. Otros clubes de caballeros posiblemente se ajusten mejor a la realidad Algo que tiene poco que ver con el abolengo de esta época; lugares donde hombres de negocios que ya han pasado la edad de la conquista dejan correr su pobre fantasía. El caballero inglés se adapta al deterioro entre ríos de champaña mediocre, luces mortecinas y mujeres con poca ropa y Un ambiente ante chicas ligeras de ropas ningún interés en ellos.
Gran Bretaña es el país de las fantasias POLIZAS DE VIDA DEL INSTITUTO NACIONAL DE SEGUROS sexuales por excelencia: hay señores que pagan castigar por mujeres, sin hacer otra cosa; hay individuos de mente peculiar que también pagan para estar solos en un cuarto con una mujer y sacarle fotos no precisamente artísticas; hay servicios telefónicos en los cuales se disca un número, para oír al otro lado de la línea una voz femenina o masculina sensual, que describe todas las cosas que podría hacer si estuviera de este lado del tubo. por supuesto hay toda una galería de personajes que representan las diversas categorías de la represión sexual, desde los que ojean al disimub las revistas pornográficas en los puestos de periódicos, hasta los violadores sádicos.
En un punto medio de estos dos extremos se encuentran los señores de traje oscuro, de 40 años para arriba, que durante la semana dicen a sus esposas que se quedan en la oficina trabajando hasta tarde.
No tienen el espíritu para mantener una amante, ni el atractivo para conquistar una mujer diferente cada semana, pero gustan de contar sus aventuras en prostíbulos extranjeros o sus encuentros casuales con alguna maravilla exótica, dispuesta a hacer cualquier cosa por un pequeño regalo.
Estos son los clientes de esos otros clubes de caballeros. clubes donde el principal requisito de admisión es dejar la tarjeta de crédito en el mostrador de entrada.
Cumplido este ritual indispensable, el socio o cliente pasa a un bar con mucho terciopelo rojo, luces bajas y cómodos sillones donde esperan los objetos de su fantasía: mujeres más o menos ligeras de ropas, casi siempre rubias y dispuestas a la conversación trivial, con su debida carga de alusiones sexuales. Sintiéndose ya como sultán en el harén, el fantasioso caballero elige compañía y comienzan las rondas de champaña, a unas 50 libras por botella.
Las botellas desaparecen rápido, tan rápido como deseen ganar su comisión las acompañantes; las risas tímidas del entretenido señor se van transformando en grotescas risotadas y sus manos comienzan a reptar sobre medias de seda y blusas escotadas. Luego viene una cena sin mayor estilo, en la que sigue corriendo la champaña y siguen caminando las manos; a eso de las tres de la mañana se encienden luces más fuertes, el bar se cierra y el príncipe vuelve a ser sapo. veces logra irse acompañado, para hacer de su fantasía algo más palpable y tener al día siguiente algo que contar en la oficina, sin mencionar las 200 400 libras que pagó, por supuesto. Pero ésta es la excepción, más que la regla, ya que por lo general los propietarios del club no están interesados en mantener un negocio de prostitución con todos los consiguientes problemas legales. Todo depende de la acompañante, siempre y cuando cumpla su parte de hacer desaparecer la mayor cantidad posible de botellas de champaña. si el señor se pone insistente, salen de la nada caballeros de metros de altura, que COSTA RIES se encargan de mostrarle la salida.
Además, si todavía le queda alguna energía, el osado señor puede encontrar Haciendo tutus algún apartamento discreto en los alrededores del club, donde otras señoritas están dispuestas a darle algo más que vino con burbujas. ALA)
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
La vida está llena de ilusiones y usted puede hacer mucho para que se mantenga siempre así.
Pienselo.
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T: INS
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