LA REPUBLICA. Viernes de febrero de 1990 A de Bibliotek LA GENERACION DEL 48 DIO EJEMPLO AL MUNDO nuo HEMEROTECA Bibliote Hoy, cuando es derribado el MURO DE BERLIN y son derrocados los dictadores comunistas de la Europa oriental y en América, los trujillos, pinochets, noriegas, etcétera, es cuando puede medirse la magnitud de las conquistas y reformas que hizo nuestra generación en Costa Rica.
Por ello es necesario analizar el origen de la nueva Costa Rica, para que las juventudes actuales asuman la responsabilidad que les corresponde de encontrar el derrotero que nos permita alcanzar la plenitud de las metas que nos propusimos en la década de los cuarentas, las cuales no se han logrado en su totalidad por culpa de componendas políticas hechas entre algunos dirigentes de los partidos mayoritarios, a espaldas del pueblo.
Porque, es a partir del derrocamiento del régimen de los Ocho Años que se caracterizó por toda clase de desmanes, que fue necesario para su eliminación pagar un alto costo en vidas y haciendas a efecto de restablecer plenamente el ejercicio de las libertades públicas, cuando se inicia el proceso de las conquistas que lograron la transformación política, económico social e institucional de nuestro país. Nuestra generación alcanzó la paz y la reconciliación de la familia costarricense dentro de la coyuntura más difícil del presente siglo.
Reconocemos que dentro de este contexto se nota la ausencia de una norma constitucional que prohíba el nepotismo en el ejercicio de la función pública, mal que se generalizó y tuvo su máxima expresión en el nefasto régimen a que nos referimos.
Providencial resultó la instauración después de la lucha armada de un gobierno que como el de la JUNTA FUNDADORA DE LA SEGUNDA REPUBLIC CA, que presidió don José Figueres, lograra como logró, con la anuencia de los integrantes del Ejército de Liberación Nacional, proscribir dicha institución armada; suceso que ciertamente se produjo por primera vez en la historia de América. Así también se sentó el precedente en el mundo entero, al eliminar también por primera vez en la historia universal la influencia nefasta que el comunismo había alcanzado en el régimen derrocado en el año 1948 con el cual cogobernaba e igualmente, se marcó el camino a seguir a los pueblos hermanos, al demostrarles una actitud de condena y de lucha permanente contra las dictaduras de cualquier signo ideológico, como lo fueron las de Somoza, Trujillo, Batista, Pérez Jiménez y entre otras.
Dicha Junta de Gobierno, interpretando el sentir mayoritario de nuestro pueblo y sin pérdida de tiempo, convocó a una Asamblea Constituyente que tuvo entre sus principales objetivos restablecer el estado de derecho, el cual permitió el reconocimiento de la legítima elección que como Presidente de la República había recaído en la persona del ilustre periodista don Otilio Ulate Blanco, a quien como se sabe, 27 diputados del llamado Bloque de la Victoria. integrado por calderonistas y comunistas, le anularon su elección en la trágica sesión del Congreso del día 1º de marzo de 1948.
Al analizar hoy el proceso revolucionario iniciado en esa época, concluimos en que constituye un modelo ejemplar, que podría servir a aquellos pueblos hermanos aspirantes a vivir auténticos regímenes democráticos dentro de un concepto de pleno?
desarrollo institucional.
Porque, obsérvese que para consolidar la libertad del sufragio, se creó el actual Tribunal Supremo de Elecciones del que hoy nos honramos todos los costarricenses sin distinción. También en el campo social se fortalecieron las garantías sociales y la Caja Costarricense de Seguro Social, rescatándolas de las influencias nocivas de la poliquitería y de la demagogia; además de que gracias al ex presidente Mario Echandi se estableció la universalización del Seguro Social.
Igualmente se crearon la Banca Nacionalizada, el Consejo Nacional de Producción y el Banco Central, cuyos frutos alcanzados en el campo del desarrollo económico y social nadie puede negar, si tan solo comparamos hoy lo alcanzado con la raquítica e ineficiente producción agropecuaria e industrial que existía antes de nuestra Revolución, logro que se ejemplariza recordando que más de un cincuenta por ciento de la población de aquel entonces era descalza reflejo de la pobreza existente Para detener la corrupción y el desorden que imperaban en la gestión administrativa, surgieron organismos como la Contraloría General de la República y el Estatuto de Servicio Civil. Fue preocupación en igual medida de nuestro Movimiento, la solución de los graves problemas que se afrontaban por la increíble carencia de energía eléctrica y la ausencia casi total de un buen servicio telefónico, lo que dio origen a la creación del Instituto Costarricense de Electricidad, que corrigió esas anomalías entorpecedoras del desarrollo del país.
Debe reconocerse que sin la creación del Instituto Nacional de Vivienda y Urbanismo (INVU) y el Instituto de Tierras y Colonización (hoy IDA. no se habrían resuelto los millares y millares de casos de falta de vivienda y de tierra para los campesinos. Mención especial merece el magnífico y pujante incremento de la industria turística por medio del Instituto Costarricense de Turismo que del todo no existía en aquellos tiempos.
Aunque dejemos de señalar muchos otros logros importantes de la Revolución, no pueden desconocerse los altos niveles que en el campo de la salud se han alcanzado y que son motivo de satisfacción y orgullo reconocidos internacionalmente. Tampoco podemos pasar inadvertido el ensanchamiento y la democratización de la educación en los diferentes niveles, hasta alcanzar altas metas en lo científico y tecnológico que también son reconocidos en el concierto internacional.
Ante lo expuesto, resulta imperativo que todas las generaciones que hoy conforman nuestra nacionalidad tengan muy presente la experiencia histórica que parcialmente hemos narrado aquí, a efecto de que con sus decisiones y actos en el presente, nu se malogre este legado. Con ello se impedirá, además, la repetición de los hechos que nos llevaron a una dolorosa lucha fraticida en el año de 1948.
Enero de 1990 EX COMBATIENTES DE 1948 MIEMBROS DE ACCION PATRIA Sr. José Figueres Ferrer Sr. Carlos Manuel Hernández Sr. Guillermo Castro Echeverria. Presidente a. Sr. Fernando Herrera Sánchez Lic. Fernando Barrenechea Consuegra Sr. Fernando Castro Loría Dip. Jorge Rossi Chavarría Prof. Carlos Caamaño Reyes Lic. Alberto Cañas Escalante Sr. Isaac Amador Pérez Dr. Manuel Aguilar Bonilla Sr. José María Castro Odio Cap. Otto Escalante Sr. Juan Solano Víquez Sra. Virginia Guier de Ramírez Ing. Otto Castro Rodríguez Lic. Roberto Fernández Durán Sr. Alfonso Salazar Carranza Lic. Alexis Gómez Guillén Sr. Alvaro Barrantes Guerrero Dr. Ramón Jiménez Cooper Sr. Rubén Quirós Astorga Lic. Arnoldo Campos Brizuela Sr. Alvaro Fernández Escalante Dr. José Luis Orlich Bomarcich Sr. José García Aguilar Sr. Ramiro Brenes Peralta Sr. Ulises Ramírez Blanco Sr. Roberto Güell Mora Sr. Mario Zúñiga Chacón Dr. Roberto Ortiz Brenes Sr. Alvaro Facio Segreda Sr. Arcelio Solís Guerrero Sr. Gonzalo Loaiza Cedeño Sr. Juan Carlos Feoli Aubert Sr. Alvaro Umaña Volio Sr. Juan José Castro Sr. Rodrigo Silesky Rojas Sra. María Teresa Merayo Sr. Jorge Montero Arguedas Sr. Juan Bta. Sosa Douglas Sr. Carlos Martínez Piedra Sra. Virginia Mata de Montealegre Sr. Horacio Montero Prof. Mesías Espinoza Porras Sr. Daniel Morera Herrera Ing. Arturo Lizano Rojas Lic. Claudio Cardona Cooper Sra. Ana María Picado Espinoza Sr. Oscar Aguilera Góngora Sr. Guillermo (Pany) Hernández Carvajal Prof. Nana Zonta Vda. de Durán Sr. Rolando Fco. Cerdas Picado Sr. Manuel Orozco Sr. Alberto Lorenzo Brenes Sra. Nely de Brenes Sra. Leda Espinoza Vargas Sr. Raúl Solórzano Ing. Claudio Volio Guardia Sra. Cecilia Montealegre Sr. Ricardo Garro Garro Sr. Luis Campos Lic. Luis Felipe Morúa Carrillo Sra. Laura Castro Montealegre Sr. Miguel Blanco Arata Sr. Max Cortés González Arq. Rodrigo Masís Dibiasi Sra. Ana Mercedes Matamoros de Feoli Sr. Humberto Quesada Sr. Benjamín Piza Carranza Sr. Wilhelm Peters Schneider Sra. Mercedes Suárez Fernández OTRAS FIRMAS Lic. José Miguel Corrales Bolaños Sra. Lyda Jiménez Rohrmoser Sra. María Emilia Ledo Montero Sr. Oscar Mora Quirós Sra. Marita Camacho de Orlich Sr. Roberto Quirós Rodó Sr. Rodolfo Bonilla Montealegre Sra. Nina Villalta de Quirós Ing. Ricardo Echandi Zürcher Sra. Sylvia Pacheco Oreamuno Sra. Anabelle Bonilla Montealegre Sra. Claudia Villalta de Rojas Sra. Luisita Figueres de Castro Sra. Ana María Rodó Duverrán Sr. José Manuel Ricardo Lara Sra. María Villalta Rojas Dr. Max Terán Torrents Sra. Flora Calvo de Moreno Sra. María Luisa Macías Sr. Carlos Bonilla Montealegre Dr. Mario Brenes Díaz Granados Sra. Evelyn Dale Valdivieso Sr. Carlos Bonilla Durán Sra. Nancy Ledo Fernández Sra. Carmen Azuela de Brenes Sra. Ana Isabel Calvo de Morera Sra. Graciela Montero Carballo Sra. Olga Martha Jara Avila Sra. Nora Jiménez Rohrmoser Sra. Trina León González Sra. Mireya Montero Ramos Sra. Giselle Champier Sra. Flory Lizano de Barrenechea Sra. Isabel Domínguez Chacón Sr. Sergio Ledo Fernández Sra. Cecilia Solís Alvarado Lic. Ramón Elías Mora Monge Sra. Míriam Calvo Arguedas Sra. Julieta Bonilla Durán Sra. Blanca Picado Sra. Virginia Maroto de Fernández Sr. Geovanni Salazar Rojas Sra. María Lourdes Salazar Sr. Victor Cedeño Torres Sra. Roxana Castro Echeverría Ing. Oscar Collado Martínez Sr. Juan Bautista Villalta Sr. Manuel Arévalo Zamora Sra. Eugenia Castro Echeverría Sra. Elvia de Suárez Sr. Carlos Quirós Pérez Sra. Sonia Bravo Trejos Sra. Trina Pacheco Gutiérrez Sra. Isabel Montero Decock Sr. Carlos Quirós Villalta Sra. Seidy Francesi de Segura Sra. Lilly Soler de Soley Sra. Orfilia de Cortez.
Sra. Isabel Montero Decock Sr. Alvaro Segares Masís Sra. Elfrida Masís de Castro Firma responsable Sra. Anabelle Castro Calvo Sra. Nydia Calvo Arguedas Bruce Masis Dbiasi Sr. Guillermo Ramos Valverde Este docyklvaro Bertalda Meritealegreal Miguel Obregón Lizafereel betelaaQuirósilölbaltael Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.
Céd 064 192