6A LA REPUBLICA. Lunes de abril de 1990 Derrotado el sindicalismo Abuso de la huelga afectó a sindicatos Il Parte José Luis Fuentes Nuevo enfoque para poder levantarse Deberá aliarse con otros movimientos Sindicatos sólo son fuertes en sector público José Luis Fuentes Fracasado en todas sus tesis, el sindicalismo reconoce su derrota y plantea la reconstrucción del movimiento con ideas frescas. En reuniones y congresos, los dirigentes claman por «nuevos rumbos» para su movimiento, que cayó víctima de los afuegos» del solidarismo y de sus propios errores.
Los sindicalistas gritan que una era de «reconstrucción» empezó entre sus filas, pero reconocen que sólo la unión firme de sus centrales sindicales, junto a la alianza con otros movimientos los salvará de su «lucha» frente al Estado y la sociedad.
El sindicalismo logró su punto máximo en 1980 y declinó vertiginosamente. En 1988, había 411 sindicatos y 153. 638 afiliados, de los que el 65 eran del sector público y el resto del privado. Contamos con un movimiento sindical afincado sólidamente en el sector público y con serios restos de organización en otros sectores productivos. reza un documento sindical.
La falta de unión, a pesar de reiterados intentos por lograrla, fue la debilidad que los llevó a la funeraria. Hoy más que nunca la desunión es signo de fracaso. vociferaron los propios sindicalistas, al clamar por la «unidad» de sus filas.
José Joaquín Meléndez, Secretario general de la CATD, dijo El sindicalismo está destruido que esa central promueve la unión de los sindicatos y trabaja De las conclusiones de los propios sindicalistas se en la organización de los campesinos.
desprende que el sindicalismo está destruido y que la prioridad actual es «iniciar una etapa de reconstrucción, institución que promueve cambios profundos en lo econóla cual quieren lograr ampliando el número de afiliados, mico y en lo social. También implica que el movimiento concentrándose en el levantamiento de sindicatos «estra sindical se alíe con fuerzas sociales y políticas como el tégicos» y pasando a la «ofensiva como un solo bloque. cooperativismo y el campesinado, y con movimientos de La razón principal de la derrota fue que los dirigentes diversa índole como los ecologistas, los de liberación «no interpretaron correctamente los cambios sociales en la femenina, los pacifistas, etc.
época de crisis y ahora se imponen el trabajo de adecuar Meléndez comentó que la CATD ya trabaja en la su actividad a las demandas insatisfechas, según el organización de miles de campesinos dispersos y en el documento «Los nuevos rumbos del sindicalismo y posi acercamiento con 67. 000 de ellos que durante la década de ción de la Confederación Auténtica de Trabajadores los ochenta, se agruparon en uniones en sindicatos y en Democráticos (CATD. presentado por José Joaquín cooperativas.
Meléndez, Secretario general de esa organización.
Sin seguir dogmas Por otra parte, mientras el sindicalismo se enfrascaba «Estamos obligados a actuar en un medio en el que la en lograr aumentos de salarios, el país se vio frente a una pluralidad ideológica es esencial; eso nos impone eliminar nueva fuerza, el solidarismo, que aglutinó mejores expec el dogmatismo y el sectarismo y nos obliga a crear una tativas para el trabajador y se alió certeramente con los cultura política sindical que permita actuar sólo de acuerdo patronos en «jaque mate» contra los sindicatos.
con los hechos. comentó el dirigente sindical.
Ahora los líderes hablan de un sindicalismo «sociopo. Debemos dejar de ser artesanos y actuar profesiolítico. Según eso, enfocarán sus baterías hacia una labor nalmente, especializándonos en temas de dirección polítipráctica, hacia elas luchas y necesidades diarias de los ca, asesoría técnica y cuestiones administrativas dentro trabajadores. y ya no se perderán en ensayos de teorías del mismo sindicalismo. enfatizó.
que condujeron al movimiento sindical a palpitantes fraca. La CATD llama al movimiento sindical a que incluya en sus negociaciones las consecuencias de la reconverNo quieren estar solos sión industrial, del desarrollo tecnológico, del crecimiento En su nueva etapa, defenderán la autonomía sindical; del sector informal, del deterioro del ambiente, y de la falta lo cual significa que los sindicatos se levantarán como una de educación sindical. expresó el dirigente.
La división de la izquierda en el país, el abuso de la huelga y la reducción de la libertad sindical, son algunas de las causas para el fracaso del sindicalismo en la década de los 80, en opinión del Director de Relaciones Laborales, Eugenio Solano Calderón.
Al analizar las causas por las cuales el sindicalismo decayó en la década de los 80, el funcionario consideró que también el ánimo de figurar de algunos sindicalistas fue otra causa de corrupción del movimiento. Yo diría que la falta de presencia del sindicalismo actualmente se debe a causas internas que vinieron a surtir efectos sobre las estructuras sindicales. Fue muy claro, hace unos años, aquí en el Ministerio que nosotros notábamos claramente la presencia de diferentes organizaciones que pugnaban por apoderarse de un movimiento sindical en atención a los propósitos que las diversas facciones de la izquierda pretendían. comentó Solano.
Asimismo, dijo que otra causa, interna, fue la pérdida de credibilidad que el trabajador tuvo hacia los dirigentes sindicales.
El abuso de la huelga fue cobrado por los trabajadores, quienes se percataron que los beneficios económicos que obtenían eran mínimos en relación con los sacrificios, luchas y esfuerzos a que se sometían cuando un movimiento huelguístico ocurría, básicamente, en las zonas bananeras. Es indudable que el Movimiento Solidarista al tomar auge vino a presentarle al trabajador costarricense una opción más propicia para satisfacer sus necesidades; es decir, el esquema sindical se había agotado, la lucha propia de los sindicatos, que eran las mejoras salariales quedaron relegadas a un segundo plano con el Solidarismo, que le dio al trabajador la opción de capitalizar sus ahorros y obtener una serie de beneficios de tipo social, económicos y cultural complementarios a su mejora saladestacó Solano. De esta manera, yo considero que con el Solidarismo el sindicalismo vino a sufrir la estocada final. afirmó. Por otra parte, es muy común observar por la prensa la presencia de dirigentes sindicales quienes aparentemente pareciera que sólo pretenden figurar en el ambiente político nacional y promocionar su figura, no los intereses de los afiliados, y el trabajador se ha dado cuenta de eso. declaró Eugenio Solano.
El funcionario ofreció datos fehacientes acerca de la conformación de los diferentes movimientos, tales como el cooperativo, el sindical y el solidarista, con lo cual se establece que la cantidad de afiliados sindicalistas es menor que las cifras suministradas por los propios dirigentes sindicales.
De acuerdo con el registro del Departamento de Organizaciones Sociales, existen 626 cooperativas, 504 sindicatos, 208 asociaciones solidaristas, 28 federaciones de cooperativas y 33 federaciones y centrales sindicales.
Asimismo, hay 134. 746 personas sindicalizadas, 175. 552 solidaristas y 291. 706 cooperativistas. De esta manera, se concluye que existe menor cantidad de sindicalizados que de otros movimientos. Los dirigentes sindicales, según estudios de 1988, habían dicho que su afiliación era de 156. 000 personas, dato algo superior a los 134. 746 que al 12 de enero de 1990 registra el Departamento de Organizaciones Sociales del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social.
rial. SOS.
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