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LA REPUBLICA. Jueves 26 de julio de 1990 17 PERSPECTIVAS ECOLOGIA Basura, basura y más basura Carlos Rodriguez Echandi Abogado y Notario, UCR; Maestría en Derecho Ambiental, SMU, Texas; Asistente Legal de la División Dallas, Texas.
En Costa Rica se producen más de 500 toneladas diarias de basura, de las cuales sólo el 30 por ciento se deposita en lugares autorizados, un 16 por ciento de manera oficial pero en forma inadecuada, y un restante 54 por ciento no se recolecta del todo: simplemente se lanza a rios, calles o lotes vacíos.
Por lo tanto, entre 800 y 900 toneladas diarias pasan a ser fuente directa de contaminación. El problema a pesar de las apanencias, afecta todo el país ya sea las áreas urbanas como rurales, pues no se aplican técnicas de manejo y disposición final adecuadas.
Fuera del Area Metropolitana los desechos de cualquier tipo son depositados en sitios totalmente inadecuados, dándose preferencia por los rios. Seis municipalidades rurales hacen este tipo de disposición final de basuras. Al parecer, la mayoría de las municipalidades cuentan con el permiso respectivo del Ministerio de salud; sin embargo, la falta de estudios previos impide que se tomen las medidas necesarias, para la protección de mantos acuiferos y centros urbanos próximos. Ante la deficiencia municipal, el habitante urbano, y sobre todo el rural, no tiene sitios adecuados para botar la basura; por lo que opta tirarla en cualquier parte.
La recolección de desechos sólidos no es suficiente por falta de equipo adecuado en calidad y número, selección apropiada de las rutas, de adiestramiento de trabajadores, mantenimiento del equipo y, en grado importante, por la falta de cooperación del público.
Asimismo, existen rellenos sanitarios (léase botaderos) en las ciudades de Cartago, Heredia, Alajuela, San Isidro de General, Limón y Area Metropolitana. En las tres primeras, el manejo de los relienos no es el más adecuado, y ya están en el limite de su capacidad. Al relleno del Area Metropolitana, concurren las Municipalidades del Convenio Intermunicipal, que constituyen doce. El resto de las ciudades y poblados del pais vierten sus desechos en botaderos a campo abierto.
En el Area Metropolitana, definitivamente, se debe promover la creación de un nuevo relleno sanitario; el cual debe construirse con base en las mejores técnicas de ingenieria sanitaria. El nuevo sitio debe encontrarse fuera de San José, preferiblemente en la Zona Atlántica, ya que los niveles de humedad son los más altos del país, lo que ayudaría a acelerar la descomposición de los desechos. Se requerirá de un inmueble de entre 50 y 100 hectáreas, con lo cual se podrán satisfacer las necesidades de los próximos 30 años. El relleno debe tener una base impermeable, confeccionada con arcillas especiales o de plástico, para poder controlar las emisiones de gas y malos olores, que son propios de un sitio como éste. Además de una base, mediante un tuberia debe recogerse el agua que pase por el relleno y proporcionarle un tratamiento especial antes de libraria, para evitar posible contaminación. El relleno deberá contar también con una malla tapavientos que podrá ser de árboles.
Con este planteamiento no desaparecerá la basura de la noche a la mañana. Lo que se busca es controlar su disposición para luego buscar soluciones tecnológicas que deriven en algún tipo de beneficio económico.
Otro de los inconvenientes es la falta de una actitud positiva para colaborar en el control de la basura, achacada a poca información del hogar, la escuela y el ambiente social. Se parte de que la nueva concepción de la salud integral debe preparar al individuo a preocuparse, no sólo por la higiene personal, sino además por la de su entorno ambiental.
Un nuevo relleno vendrá a solucionar, ante la vista de los costarricenses, el problema de la basura a mediano y largo plazo.
Pero eso no significa que no tenga que adoptarse otras medidas para mejorar los hábitos de consumo y producción. Quitar la basura de la vista tiene un costo, y muy alto, pero no hay que evadir el problema.
ECOLOGIA Con el fin de ayudar a situarse a más de un entendido y al público en general que quiera entender de que se trata este asunto tan importante como urgente, partamos de una definición que nos encontramos en un jugoso editorial de La Civilta Cattolica titulado Ecología y cristianismo, convergencias y divergencias. documento que se estudia y discute en el Grupo de Estudios Libres.
Lic. Claudio Calderón Licenciado en Relaciones Internacionales, UNA; analista de temas sobre calidad de vida; profesor universitario.
La ecologia comienza por casa La definición dice: La ecología se ocupa de la situación ambiental de nuestro planeta, de la degeneración paulatina del mismo, sus causas y las intervenciones urgentes, para no agravarlas y encontrar los medios de mejorarlo, así como solucionar las incidencias económicas, sociales y la escogencia de las autoridades políticas que deben intervenir.
Antes de continuar, quiero advertir que muchos consideramos que debido a nuestra formación cultural y política, es nuestro deber rechazar cualquier enfoque sobre los problemas ambientales, que no respete al hombre y que no sea fruto de una científica y sabia búsqueda del equilibrio entre el hombre, su trabajo y la naturaleza; ya que el hombre es también naturaleza que con su esfuerzo, es capaz de transformarla.
El hombre ha transformado pantanos fuentes de enfermedades como la malaria y otras en bellos jardines, o valiosas y productivas plantaciones; ha penetrado valles, mares y montañas aisladas, con caseríos llenos de miseria y todo tipo de plagas, para construir lugares saludables y civilizados; así podriamos seguir dando ejemplos positivos y valiosos. Pero ay! también es cierto que el hombre ha transformado muchos bellos y saludables lugares (el otro lado de la moneda. como bosques y praderas, en desiertos; ha ensuciado y continua ensuciando con desatado furor cuanto rincón encuentra a su paso, desde las cristalinas y potables aguas, hasta playas, praderas, parques y el colmo! algunos hasta su propia casa.
En fin, si el hombre puede destruir y arrasar, también es capaz de restaurar y mejorar lo que se le ocurra o convenga, como nos dice el Prof. Cattaneo desde 1845 en oportuna cita del gran periodista Vitale.
Es nuestro caso salvar el ambiente y llegar a desarrollar un turismo de alta calidad y proyección, con visitantes que paguen lo suficiente por los servicios que reciban y se comporten decentemente, para poder así conservar adecuadamente el ambiente ecológico paisajista, que es en definitiva, una de las razones más importantes (o quizás la más importante) que atrae al turismo. Es indispensable contar con leyes muy claras y severas que regulen todos los aspectos: ecológicos, ambientalistas, paisajísticos, sanitarios, aduaneros, etc.
Hoy existe posibilidad de confeccionar mapas de las zonas geográficas (en nuestro caso, por ejemplo los parques nacionales. con el apoyo tecnológico de computadoras, con datos transmitidos por satélites. como ya lo han hecho en países desarrollados y realizar planos para la construcción de infraestructuras, que lejos de afectar, más bien coordinen los intereses propios del ambiente natural con los negocios de los inversionistas, en desarrollo de proyectos turísticos de gran perspectiva para el presente y el futuro.
ECOLOGIA Arturo Uslar Pietri Réquiem por un pedazo de costa Era un pedazo de costa abierta sobre el Caribe. El impulso de las corrientes marinas no había permitido la formación de playas de arena. El mar rompía abierta y directamente sobre las rocas para estallar en estruendo y espuma. Las rocas oscuras, de todas las dimensiones y formas, estaban recubiertas de líquenes espesos y mojados como cabelleras de sirenas. Al subir y bajar la ola peinaba las verdes cabelleras y aparecían entre ellas las manchas negras de numerosos moluscos asociados a la roca, al líquen y al mar para su vida.
y Hasta el borde de la marea y por entre las piedras pululaban los cangrejos, con su ruta diagonal y sus tenazas alzadas.
Casi al borde del mar surgian macizos de uveros de playa, de gruesos troncos retorcidos en las formas más imaginativas, con su caparazón de grandes hojas verdosas tejedoras de brisa. Aves marinas venían continuamente en busca de los crustáceos, los moluscos y los alimentos que arrojaba la ola.
Desde los menudos picadores de arena, hasta las gaviotas y los alcatraces de lento vuelo quieto y majestuoso. El oleaje continuo resonaba en una gran sinfonía para aquella vastedad en la que podían caber todas las imaginaciones.
En los últimos cuarenta años se alzaron en esa playa salvaje, que no podía ofrecer refugio para bañistas o pescadores sino su propio y magnífico espectáculo, numerosas viviendas y, más tarde, comenzaron a levantarse grandes edificios de apartamentos y algunos hoteles.
Ha podido, tal vez, en la hora oportuna de definir las zonificaciones urbanas, haberse destinado buena parte de esa zona para permanecer en su estado primitivo para el disfrute de los amantes del paisaje natural. han podido, por lo menos, impedir que nadie osara destruir ese maravilloso cuadro ecológico creado por la naturaleza en millones de años. Un mal día, inesperada y tristemente, aparecieron inmensas maquinarias de construcción de caminos, revolviendo las rocas, destrozando el cuadro natural, para tender sobre la propia rompiente un terraplén largo y costoso, que habrá de servir de base a las estructuras de cemento y a las ornamentaciones artificiales de un paseo peatonal.
Era evidente el crimen contra la naturaleza, era aberrante la destrucción del marco natural, era absurdo querer sustituir, a gran costo, aquella maravilla que el tiempo, las fuerzas naturales y la prodigiosa red de la vida misma habían formado.
Para poderlo hacer no sólo se violaron derechos legítimos y disposiciones legales con el mayor descaro, sino que se pretendió presentar aquella lamentable destrucción como una obra de progreso y beneficio para la comunidad.
Ha sido dura y, en mucha parte, infructuosa la lucha que hoy se libra en el mundo entero para enseñar a los hombres a respetar a la naturaleza. No sólo se han aniquilado bosques y rios, se ha contaminado el aire y el agua, sino que se ha deformado y destruido el paisaje creado por los siglos de vida espontánea para reemplazarlo por costosas, perecederas y muy discutibles obras de hierro, cemento y vidrio, que nunca dejarán de ser cosa inerte, intrusa y estéril. Ya son innumerables los bosques, los prados, las costas y los montes que han sido estúpidamente destruidos y desnaturalizados en nombre de una falsa idea de progreso y de bienestar colectivo.
Nada más doloroso e irreparable que la sistemática destrucción del marco natural de la vida que los hombres han cometido en nombre de un falso y agresivo progreso. Es difícil de aceptar que alguien pueda pensar que es preferible una via peatonal, sin destino práctico, para borrar para siempre un maravilloso pedazo de vida salvaje y poner en su lugar la afrenta de la más vulgar manía constructora. Donde estaban la brisa, los árboles, las rocas, los pájaros, los crustáceos y la entera belleza del mar libre, habrá una estructura amurallada para que sobre su pavimento muerto se extiendan, como el fruto de una conquista, las más banales formas de la rutina urbana de nuestro tiempo.
Todo esto se pretende hacer en nombre de una falsa idea de progreso, de un absurdo pretexto de mejorar lo que el tiempo viviente ha creado, de substituir el cuadro natural, tan poderoso y significativo, por una aparatosa construcción municipal sin ninguna justificación válida.
Lo que ya no puede ignorar nadie es que, a la luz de lo que hoy conocemos del peligro de la destrucción continua del medio natural, vale más un bosque que una fábrica, vale más un río que toda la industria maderera, vale más un acantilado salvaje que una plataforma de cemento, vale más un árbol que un motocicleta, es decir, vale más la vida real que la inerte, estéril y discutible obra del hombre.
Sirva ésto de réquiem a un pedazo de costa destruido y sacrificado torpemente.
Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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