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La Pan un República día especial DOMINGO SECCION 12 PAGINAS DOMINGO 26 DE AGOSTO DE 1990 La otra maldición ferencias de opinión entre los expertos. paralizan la mayoría de los intentos de restauración. Si no ocurre un milagro, el Egipto de los faraones está condenado.
de los faraones que de atracciones. Tumbas y templos, junto a sus preciosos jeroglíficos, filas de esculturas, bajorrelieves y pinturas murales se deterioran a un ritmo más rápido que el de los estudios de los arqueólogos. La humedad producida por el sudor y la respiy ración de cientos de miles de visitantes ha activado las sales de las rocas en el interior de las catacumbas, cuyas paredes y pinturas de desprenden y agrietan sin remedio. La lentitud de la burocracia, los intereses económicos y las insalvables diADEMAS Tomado de Blanco y Negro, de ABC que los cuarenta siglos precedentes.
Aviones, autobuses y lanchas vomiEn página 14 En las viejas historias, los arqueólogos que penetraban en los sancta sanctorum de Egipto morían tan sin cesar turistas para que escudriñen y palpen todo un país que se ha convertido en un gigantesco parLa esfinge en extrañas circunstancias o de desno morirá conocidas y terribles enfermedades.
Ahora la maldición parece haberse invertido, y son las tumbas las que están en peligro. El aire contaminado de El Cairo baña las pirámides de Gizeh con ácido nítrico y sulfúrico.
Las aguas residuales y los detergentes se filtran a través del suelo del desierto y envenenan la Esfinge.
Dentro del Museo Egipcio de El Cairo, sin aire acondicionado y demasiado pequeño para albergar todos los tesoros que posee, las antigüedades se resquebrajan y desprenden, como una terrible y destructiva caspa, pan de oro y astillas de madera. En el delta del Nilo, miles de monumentos se desmoronan en el más absoluto abandono. Río arriba, las aguas de alcantarillado dejan sucios círculos en el templo de Luxor. En el Valle de las Reinas, una erupción salina ha desfigurado la tumba de la reina Nefertari. en el Valle de los Reyes, un hongo parduzco está devorando las paredes de la tumba de Tutankamón.
Los últimos setenta años de excavaciones, junto con el tráfico, el aumento de la población y el turismo, han causado más daños en Egipto Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud, Costa Rica.

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