Guardar

El Telégrafo, 1875 El Preludio, 1878 El Instituto Nacional, 1881. La Prensa, 1881. El Albor. 1881. La Nave, 1882 La Patria, 1882. Diario de Costa Rica, 1885 Otro Diario, 1885. El Maestro, 1886 Costa Rica Ilustrada, 1888 Cantos Escolares, 1888 Librito de los deberes, 1889. Programa para un eurso de recitación en las escuelas Superiores, Normales e Institutos de a enseñanza, 1891 Colombinas, 1892 Lengua Quiché Sinopsis de Constructiva Gramatical, 1902 Tristes, colección de elegias, 1893. Índice de las leyes y en castodos los diarios de la capital desde 1892.
Fué autor de la letra del Himno Nacional que durante tantos años se ha cantado y se cantará, pues la inmensa mayoría del pueblo no aprendió más que esa y tienen que pasar algunas generaciones para que se borre su recuerdo y todos aprendan la nueva letra.
Como polemista de primera fuerza se dió a conocer en los periódicos La Palanca, fundada en Cartago en 1882, del cual fué Redactor y en La Prensa Libre editada en San José el año de 1889.
Por sus méritos obtuvo las siguientes distinciones: Diploma de Miembro Honorario de la Universidad de Costa Rica, 1886 Diploma de Socio Honorario de la Sociedad de Artesanos 1889 Medalla de plata en la Exposición del Centenario del descubrimiento de América, Madrid, 1892 Diploma y Medaila Condecorativa como Socio de Mérito de la Unión Ibero Americana, 1892 Diploma de la Academia de Ciencias y Bellas Letras del Salvador, 1892 Socio de Mérito de la Sociedad Económica de Amigos del país, Santa Cruz, 1893 Diploma y banda como Socio Honorífico de la Unión Obrera de Santa Cruz de la Palma, 1893. Título en la Sociedad Cosmológica de Santa Cruz de la Palma, 1893 Título, Medalla y Cruz, como Comendador de la Orden Española de Isabel la Católica, 1893 Diploma y Medalla en la Exposición de Chicago, 1893 Diploma y Medalla de oro en el Primer Congreso Pedagógico Centroamericano de Guatemala, 1894 Medalla de cobre en el Congreso Internacional de Americanistas de 1902.
Tal es, expuesta en breves rasgos, la personalidad del que nacido en Canarias, arribó estas playas los veintiún años de su edad, para hacer de Costa Rica su segunda patria y colaborar su progreso en una labor continua de treinta y cuatro años.
Deja inéditos varios trabajos, entre los cuales se encuentra una obra de gran importancia, titulada Estudios analíticos de la lengua Quiché la que consagró sus energías durante cinco años.
Ojalá que plumas competentes trazaran extensamente la biografía del que en este mundo se llamó Juan Fernéndez Ferraz y que para bien de la ciencia y de la historia, reseñaran en forma de índice los valiosos trabajos que durante su peregrinación por la tierra llevó a cabo.
San José, Febrero de 1904.
Los racionalistas modernos llaman al crimen desventura: día vendrá en que los Gobiernos pasen los desventurados, y entonces no habrá otro crimen sino la inocencia.
DONOSO CORTÉS 139

    Sociedad de Artesanos
    Notas

    Este documento no posee notas.