De fuente que nos merece todo crédito. sabemos que en Honduras se Dimz com quite ri aradan encuentra punto de perder la vida, el y te destacan vice! ilustre ex presidente de ese país. don Policarpo Bonilla, casa de imputaciones calumniosas que sus enemigos políticos le hacen. para justificar así la reacción conservadora que en estos momentos se opera en el Gobierno de ese mismo país.
Con el doctor Bonilla nos ligan poderosos vínculos de amistad; y por esto, como porque él constituye una personalidad de indiscutibles merecimientos en Centro América, nos proponemos interesar a la prensa nacional y los liombres de influencia. fin de que ayuden a salvar una vida tan honrada como gloriosa.
Sobre este mismo asunto hablaremos con más extensión en el próximo número de esta Revista.
Ama edad muy avanzada falleció el martes último el apreciable ciudadano alemán don Otto Luthmer.
Acompañamos en su pesar los deudos.
Don Marcelino Argüello y señora han tenido la desgracia de perder un niñito.
Nuestro pésame muy sentido Encuéntrase en esta capital el doctor dou Alonso Reyes Guerra.
Es él una de las figuras más distinguidas de la juventud gallarda salvadoreña. e hijo de aquel país viril que tan generoso es en todas ocasiones con los costarricenses que tienen la dicha de albergarse en su seno.
El doctor Reres Guerra reine su distinción de notable jurisconsulto. las de ser un distinguido pedagogo, un periodista de fuerza y un carácter incorruptible Recordamos allora, por que lo leímos en el Diario del Surador que cuando los Licenciados don Ricardo reun Alberto Pacheco fueron a la capital salvadoreña. como representantes de Costa Rica al Segundo Congreso Juridico Centro americano, el doctor Reyes Guerra, con los doctores Víctor Jerezy Abraham Chavarria, organizó un gran banquete para obsequiar a nuestros compatriotas y los otros delegados.
El doctor Reyes Guerra fué uno de los representantes por El Salvador la Asamblea Nacional Contituyente de la República liayor de Centro América, reunida en Managua en 1898.
Con lo dicho basta para comprender que la personalidad de que nos ocupainos merece las más altas consideraciones de los costarricenses, y por ello nos permitimos presentarlo a nuestros colegas de la prensa y la sociedad en general.
Para terminar estos cortos renglones, debemos agregar que el Dr.
Reres (uerrit itaba de salir de la Penitenciaría de Santa Ana, en su papatria. por asuntos políticos.
Al verse libre de la opresión escogió para su residencia nuestro país, por el cual lia tenido él siempre marcadísimas simpatias, traducidas en lechos, con los costarricenses que en El Salvador liemos vivido 208