La monomanía de formar palabras al arbitrio, es casi la propia confesión (de esos modernistas) de que no conocen no han podido traer la memoria, en el momento, otros vocablos, que hubieran empleapo con más acierto y elegancia.
No debe entenderse por enriquecer un idioma el simple hechu de formar palabras sin eriterio filosófico.
Si enriquecer el idioma fuese aumentar así, del modo aludido, el número de las palabras, ninguno más propósito que los analfabetos que, por ignorancia de principios filológicos, viven formando palabras como se les ocurre. Plausible es el deseo del señor don Carlos Gagini, de Costa Rica. y debe ayudársele realizarlo. de un congreso de filólogos hispano americanos, con el objeto de acordar qué dicciones deben ser autorizadas como cultas y castizas.
De los vicios prenotados y otras muchas faltas en que incurren aun personas que están muy lejos de ser tenidas por no ilustradas, se deduce cuánto perjudica la falta de estudio de la Gramática. Muchos creen y es un yerro. que entienden lo que es «escribir correctamente y con propiedad. y a pesar de esa creencia no lo hacen así.
II Deben los niños esforzarse en el aprendizaje de las reglas de la Lengua Castellana, muy especialmente, no sólo por ser el idioma patrio sino también por ser el mejor entre todas las lenguas vivas. Vamos demostrarlo en el curso de nuestras conferencias, haciendo algunas comparaciones con las dos lenguas aludidas.
Un idioma perfecto es auxilio eficaz para el desarrollo de la inteligencia. La perfección se halla en la claridad con que expresa las ideas, ya deriven de éste de aquél movimiento del alma.
En la riqueza y fecundidad del castellano está su interés incontestable.
Por eso ha sido la lengua de los pueblos más civilizados; y su inmenso número de voces demuestra que es la más propia para el creciente progreso de las ciencias filosóficas.
Nuestro idioma, cual ningún otro, refleja fielmente los actos de la inteligencia. No es el más extendido, porque la difusión de las lenguas depende siempre de alguna causa accidental. El inglés se conoce en muchísimos pueblos, debido a la mayor facilidad en su aprendizaje.
El castellano y el francés, son los idiomas del Genio. Por eso los puebles amantes de la verdadera civilización se esfuerzan en perfeccionarlos, como preciadísimo tesoro de una raza que vivirá muy despecho de los embates de otras razas, y cuya hermosa literatura será ciempre fuente de fecunda inspiración y sabias enseñanzas. CONTRERAS Del Ateneo de Guatemala)
RONDEAU Por Carlos Ancay Tus ojos de lirio dijeron que sí; tus labios de rosa dijeron que no; Al verme tu lade muriendo por ti, tus ojos de lirio dijeron que sí.
312 Auroras de gozo rayaron en mí, mas pronto la noche de luto volvió: tus ojos de lirio dijeron que sí, tus labios de rosa dijeron que no.