La Tierra Nativa de Isaias Gamboa mosas ideas Bello libro, todo lleno de sentimiento y de nobleza; en él se reflejan los deseos de aquel proscrito que, allá lejos, suspiraba por pisar, otra vez, el suelo patrio, el hermoso valle del Cauca donde estaba ma viejecita que lloraba esperándolo.
La prosa elegante de la novela está salpicada de herque kual piedras preciosas, brillan engastadas en aquel pie de dulzura y delicadeza.
Así como Isaías era noble y generoso, así Andrés del Campo despierta con su nobleza y generosidad las simpatías de quien lee La Tierra Vatica Los dos amaban el mar como lo aman los hombres audaces e inquietos que se lanzan al mundo sin miedo en el alma y afrontan todas las aventuras, que llevan gérmenes de grandes ideas y profundos anhelos y que necesitan horizonte sin límites en donde sacudir las alas.
Los dos suspiraban por llegar al terruño, por abrazar a su familia y visitar el sitio donde descansaba su buen padre que no vivio lo suficiente para volverlo a ver.
En La Tierra Vatira deja Isaias admirar sus sentimientos de poeta admirable. cada paso es preciso detenerse para me litar sobre los hermosos conceptos que matizan la relación y perfuman el ambiente de ternura en que se re si el lector de novela tan simpática.
Frases lichas al acaso y que encierran muchísimas enseñanzas se encuentran en todas las páginas.
Aquí el protagonista al ver ma niñita que viaja en el mismo vapor exclama cou tristeza como interrogando el porvenir. Quien irá a hacerla infeliz si no la comprende. 514