della Viola. en 1585 subió con gran lujo de decoraciones el Amico filo, con intermedios musicales de Strizzi y Malvetzi; y por fin son dignas de mención otro Combate de Apolo con la serpiente, representada en Florencia cuando las bodas de Fernando de Médicis con Cristina de Sorena, 1589. los intermedios del Conte Ugolino, puestos en música por Vicente Galileo, padre del gigante de la astronomía moderna. el Sátiro y la Disperazione de Pleno, representadas ante el duque de Toscana, por Emilio del Caballiere en 1590; Il giuccuro della Ciér, pastoral representada en 1595 y que tuvo por toda orquesta un guitarrón italiano, una guitarra española, un laud y un clavecin; y las representaciones del Amyntas del Tasso y una pastoral de Trausillo cog.
teada gran gasto por don Garín de Toledo, virey de Sicilia, y puestas en música por el jesuita Marotta.
Sin embargo estos ensayos eran muy deficientes bajo el punto de vista melódico y easi nulos en cuanto a su harmonía instrumentación; concretábanse coros aislados, arias de escasa valía y cantos al unísono, acompañados por instrumentos que no hacían más que reproducir la misma nota del cantante. Para encontrar la verdadera ópera, es necesario llegar al año 16096. En 1594 (ó 97) Jacobo Peri hizo representar en el palacio Corsi de Flo.
rencia, la ópera Daphne, sobre palabras de Octavio Renucini. En esta opera, que es considerada como la primera en el orden cronológico, tuvo por eolaboradores Julio Pacini, sea Julio Romano, y al mismo conde Corsi, que recogió las primicias del lirismo teatral.
Pero Daphne no pasaba de ser un ensayo; la consagración de las nuevas teorías, el bautizo solemne, el gran día del nacimiento y pública presentación de la ópera fué en 26 de octubre de 1600. En ese día memorable se celebra.
ron en Florencia los despesorios de Enrique IV de Francia con María de Me.
dicis y se representó la Muerte de Euridice, tragedia lírica, palabras de Renuccini y música de Peri con la colaboración de Pacini, talvez de Cavalliere.
Este fué el primer drama lírico escrito en estilo representativo y en el cual se comenzó a emplear la batuta para medir los tiempos, como cetro musical puesto en manos del director de orquesta para anunciar al mundo la inauguración de un nuevo reinado. Sin embargo, la orquesta, como se ha podido ver, por los apuntes que he anotado más arriba acerca de la invención de los elementos vrquestrales, no era aún sobrado abundante; la Euridice fue am pañada tan solo por un guitarrón, una gran viola de 13 cuerdas y un gran laud.
Sea lo que se quiera, estaba dado el gran paso; poco después en 1607, Claudio Monteverde entregaba al teatro de Mantua su Orfeo, y en 160 su Ariadna con ocasión de las bodas de Francisco Gonzaga con María de Savr.
ya, inventaba las modulaciones tonales sobre la disminuída y data a la parte musical una importancia igual a la de la literaria.
Sin embargo, la orquestración todavía no era homogénea; en el Orfen dos clavecines ejecutaban los ritornelos y acompañaban en el prók la música personificada, dos violas de 13 cuerdas acompañaban Orfeo, 10 hajos de viola Eurídice, un arpa doble al coro de ninfas, dos violines y un clavecin la Esperanza, dos guitarras Cavón, órganos los espiritus infernales, tres bajos de viola Proserpina, un organillo Apolo, por fin el coro final de los pastores era acompañado por un flayolet, cortet. trompetín y trompetas con sordinas. Total: una pequeña Babilonia propi riada por tandas.
Por fin, cuando Apostolo Zeno hizo representar en Venecia, 1635, inganni felici, con música de Pollarolo, se pudo saber que la ópera la definitivamente organizada y podría emprender por todos los escenaris mundo su viaje triunfal y fecundo en nobles goces y dulcísimos encans. Continuará)
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