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El nido de las aves Por Alfaro LAS OROPÉNDOLAS Pertenecen nuestras oropéndolas a la familia de los ictéridos, ocupando entre ellos un lugar prominente por ser pájaros más grandes y bulliciosos. Su estructura es esbelta, tienen el pico cónico y agudo, las piernas robustas, con dedos largos y armados de uñas filosas; alas bastante largas, así como la cola; en su plumaje predomina un tinte general de chocolate, renegrido y lustroso por encima; la cola es amarilia por debajo, lo cual da estos pájaros, cuando se columpian en sus nidos, cierta semblanza con una péndula de oro.
Las oropéndolas son pájaros hermosos, vivaces y movedizos, que habitan en toda la América tropical, desde México hasta el Ecuador. En Costa Rica tenemos dos especies, una que vive de preferencia en la vertiente del Paeífico, desde la costa misma hasta una elevación de dos mil metros en la meseta central; y la otra que se halla confinada las tierras húmedas de la región atlántica.
Viven las oropéndolas en colonias numerosas que fabrican veces hasta cincuenta nidos colgantes de un mismo árbol. Cuando se ven atacadas en su propia morada, al punto acuden todas las demás, haciendo gran ruído con las alas y dando voces de alarma sus compañeras, como si tratasen de comunicarles el peligro que las amenaza.
Cuelgan sus nidos de las ramas más altas y delgadas en árboles solitarios, que en el bosque se destacan por su elevación. Candelabros gigantescos parecen las palmas de coyol, cuando al extremo de sus hojas espinudas atan las oropéndolas sus curiosos nidos.
El Doctor Richmond que ha observado estos pájaros construyendo sus nidos en Río Frío, dice que el trabajo de acarrear el material corresponde principalmente a las hembras; mientras los machos holgazanes apenas si las acompañan en sus activas labores (1. Desde principios de Marzo comienzan las oropéndolas sus correrías por los campos cultivados en busca de fibras de plátano, hebras de zacate, bejucos delgados y otros filamentos con que tejen sus nidos en forma de bolsas, de ochenta centímetros un metro de longitud, redondas por debajo, y anchas como de veinte centímetros en su parte más abultada, pues en el exZarhynchus wagleri tremo superior son sumamente angostas. Un poco (arriba de la mitad de la bolsa tienen la abertura de entrada, que conduce al fondo, donde se ha(1) Proceedings of the U, National Museum. 1893. Pág. 493 553

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