nes periódicas. Este fenómeno se anuncia generalmente con un movimiento de agitación de las aguas muy cerca del centro de la laguna. Estalla luego un rugido sordo y prolongado como el de un trueno subterráneo; las aguas revueltas y ennegrecidas por el lodo se levantan grande altura empujadas por la fuerza de los vapores que se escapan, vuelven a caer éstas con gran ruido mientras una espesa columna de gases de color blanquecino se levanta vinlentamente muchos centenares de metros para abrirse Juego en la forma de penachos de reluciente blancura que se deshacen por el viento que caen otras veces condensados en finísima niebla. Entretanto, la pequeña laguna causa de la violenta sacudida semeja un mar tempestuoso cuyas olas, de dos metros de altura, azotan los peñascos de la orilla produciendo mil ecos en el fondo de los barrancos. Poco a poco la tormenta se apacigua, las aguas vuelven a su acostumbrad nivel las nieblas, ya disipa las, im ver de nuero el foc. de aquellas erupciones.
Después de uno de esos pa.
roxisintos que tan menudo se repiten, es istiral que nuestro espíritu tra le interrogar la naturaleze sbre la causa de tan extra meno. Puede sueeler muy bien come dice el seo Pitue bajando el Erupei del volein en su tercera fase agua ie lecina por el tubo Fotografias de Max Rudin.
de la chimica llegue hasta las rocas hirtes, se vaporice por efecto de la gran temperatura, y cuando la masa dei cases así formados haya alcanzado la tensión suficiente para vencer la resta de la columna líquida, esta se levanta, disminuye su peso, porazuma parte de sus aguas hacia la laguna y la erupción se produes Escue según esta hipótesis, se ha verificado un doble movimier y descenso en las aguas que llenan el tubo y por consije nivel en la laguna.
esinembargo notarse gran diferencia en el nivel aparente, ni crea suponer que el agua baje por la misma chimenea. Hay ces para cnsiderar al volcán como un verdadero yryser de los sa tan estudiados la geografía física en Islandia y en otros punts En estos curiosos aparatos de la naturaleza, el agua que