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motivo, no dudo que habréis ya observado que en la cátedra que está mi cargo, insisto siempre muy particularmente en el estudio del cerebro, pues, digámoslo de una vez, el cerebro es el órgano principal del alma, y como el espiendor del palacio debe de estar en relación con la majestad del monarca que aloja, es por esto el cerebro el órgano más complicado y más difícil de toda la Anatomía, y el alma que tiene en él su asiento, la más noble y más elevada de todas las funciones vitales. En efecto, señores, todas las funciones psíquicas del hombre tienen su base material en determinados puntos o centros de la corteza de los núcleos del cerebro. Una lesión accidental patológica de uno de esos centros, tiene siempre por consecuencia la pérdida Inmediata de la facultad intelectual que preside, y vice versa, los trastornos intelectuales de cierta clase se caracterizan siempre por lesiones pathológicas de sus centros cerebrales respectivos. La Ciencia conoce ya, un gran número de esos centros localizaciones cerebrales y los tiene bien estudiados. Sobre ese grupo de fenómenos psíquicos, que Grasset ha llamado psiqnismo inferior automatismo psicológico, la cuestión está ya resuelta, y el mismo Grasset reconoce que ellos son comunes al hombre y los animales, con diferencias de grado solamente. Pero no así cuando se trata del segundo grupo, que ese autor llama psiquismo superior y que pretende ser propio del hombre. Aquí no bastan los métodos comunes de investigación científica por medio de la experimentación y de la observación interna y externa, sino que es necesario llamar en nuestro auxilio los métodos comparativos, la historia del desarroilo y la especulación ayudada por los razonamientos inductivos y deductivos. Más que todo, nos instruye en este sentido la Psicología comparada, la cual nos enseña que las diferencias psicológicas entre el hombre y el mono anthropoideo, son menores que las diferencias correspondientes entre el mono anthropoideo y el mono más inferior. ese hecho psicológico corresponde exactamente lo que nos demuestra la Anatomía en cuanto a las diferencias de la corteza cerebral. Haeckel. No menos interesantes son los resultados obtenidos por medio de la Psicologia on:ogené.
tica, la cual estudia el desarrollo gradual y progresivo de las facultades psíquicas del hombre desde la infancia hasta la vejez, y de la cual la nacido, como una aplicación práctica, la pedagogía racional, que desde ese punto de vista resulta ser un ramo de las ciencias biológicas. Pero, de todas esas cien.
cias, la que más extiende nuestros horizontes, la que aclara con nueva y penetrante luz nuestro concepto sobre la vida del alma, es la Psicología filogenética, y no creo poder resumiros mejor mi pensamiento, que trascribiéndous textualmente los dos párrafos siguientes de Haeckel: El más maravilloso de todos los fenómenos naturales, aquel que designamos con el nombre, legado por la tradición, de espíritu alma, es una propiedad absolutamente general de todo lo que vive. En toda materia viva, en todo protoplasma, es necesario reconocer la existencia de los primeros elementos de la vida psíquica, la forma rudimentaria de la sensibilidad al placer y al dolor, la forma rudimentaria de la atracción y de la repulsión. Pero los diversos grados en el desarrollo y composición de esa alma, varían con los diversos seres vivos; ellos nos encaminan, desde la muda alma celular, a través de una larga serie de intermediarios más y más elevados, hasta el alma kumana, consciente y razonables. Alma celular y célula psiquica, 1878. En todo caso, y tanto en esos grados inferiores como en los grados superiores de la escala psicológica, cierta composición química del psicoplasma y cierta manera de ser física en él, son indispensables desde el instante en que el alma debe funcionar o trabajar. Eso es válido, tanto para la actividad psíquica clemental de los protozoarios, como para las funciones complejas de los órganos sensoriales y del cerebro de los animales superiores, a la cabeza de los cuales se encuentra el hombre. Los Enigmas del Universo, 1902. Si abandonando el terreno de la Fisiologia, es decir, de la ciencia de las funciones, sin excluir las del cerebro, pasamos la Morfología sea la 686

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