Guardar

ENEND e fuera obstá. desinterés y hijas emancicontemplaban iración perduamar, porque sy todos los nquera, Pidal, ir levantar gresará todatra nacionalielosa siempre ino federano crecerán ade fulguren illas de la incentelleos del plaba, en perstra voluntad salva la nave sino por más aternidad del donde Colón, iz de nuestras americanos, portugueses y españoles, sitiendo latir al unísono el corazón de todos y encaminar por las mismas anchuras de la Historia aspiraciones idénticas y propósitos inalterables de fraternidad, de amor y de respeto.
No ondearán ya por aquellas tierras las banderas de los conquistadores, pero ¿qué importa, si hoy se han conquistado los espítus?
Portugal, poniendo en sus enseñas el azul de los cielos y el blanco de las espumas de los los mares, sujetándolos como con broche augusto con el escudo de las sagradas quinas, y España, arrancando para sus pendones los rayos de su sol y los colores de su sangre, encerrando aquéllos entre dos mares de ésta, han visto, y verán hasta que los siglos se caben, que en todas las banderas americanas hay colores de las suyas, como hay en todas las arenas de sus valles y de sus montes, en todas las ondas de sus ríos y en todas los oleajes de sus mares, huesos de Sus héroes, cenizas de sus mártires, surcos de sus navíos, palpitaciones de su genio y poesías de sus leyendas. No tengo duda, no, de que se acerca el tiempo en que la semilla humilde se convierta en robustísimo árbol, para orgullo de quien la sembró y satisfación de quienes la cultivaron.
Parecía insignificante y modesta; nadie, muy pocos, confiaban en que arraigase; pero la fe y la voluntad lo pueden todo, y, lejos cerca, con obstáculos sin ellos, lo que nace de la inspiración, lo que se propaga sin egoísmo y lo que se defiende con firmeza, desgarra, las brumas de la en vidia, vence las indiferencias, inflama los corazones y allá en la región misteriosa donde los espíritus se congregan, sabe desplegar sobre la humanidad el rocío bienhechor Una lección objetiva sobre el Radium que la regenera, el bienestar que William y Ada Paynter la fortifica y aquellas patriarcales tranquilidades que, enlazando la tradición y el progreso, sabrán hacer del mundo una patria y de todos los hombres una familia.
JOSÉ MARÍA DE ORTEGA MOREJÓN 24 904. Madrid. Unión Ibero Americana)
dable sesión 85; allí, en el Centro de la aspiraciones, liván, poetisa iella ocasión, rales, Balbín de Colombia, obierno de la da endeble, cimos que se canos, en la I, habían de cio, para que asen nunca emancipados mo en todas iciendo de él ar y tantos a conseguir ara ser corodiplomático rid, recibido jamás, como Ita, insigne es del nuevo le los siglos ifianza para je recuerdo, GRANOS DE ORO Cada uno meta la mano en su pecho y no se ponga juzgar lo blanco por negro y lo negro por blanco, que cada uno es como Dios lo hizo, y aún peor mucbas veces. Cervantes. Mis versos se leerán mientras haya seres hnmanos que respiren. Durarán más que los yelmos de los poderosos y que sus sepuleros de metal. Shakespeare. El poder es el primero de los placeres. Me parece que amor puede superarle, y el amor es una enfermedad feliz que no se puede buscar como un ministerio. Stendal. Si tienes dinero, la sociedad te dispensará tus vicios. Si no lo tienes, apenas notará tus virtudes y tu saber. Encuentro tan terrible la muerte que odio la vida más porque a ella me conduce, que por las espinas que en ella se encuentran. Mad. de Sevigné.
759

    Spain
    Notas

    Este documento no posee notas.