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Natura yorda Inédita, para Páginas Ilustradas Como cerros vibrantes, coronados de nieve, Se alzan las negras ondas tapizadas de espuma bajo el velo enorme de la borrosa bruma, Mi barco cruge al golpe de la borrasca aleve.
El huracán sacude su gran látigo, en breve, ronco y rebosante de su cólera suma, De la gaviota eriza la inmaculada pluma a castigar al monstruo que se encrespa, se atreve. se empeña la lucha de los ciegos gigantes: El uno trae el soplo y el otro aporta el tumbo; El rayo vuelca el carro de los truenos sonantes; mientras que se escucha del ciclón el retumbo, Al cielo alzo, contrito, mis manos suplicantes, Pero mi barco sigue sin velas y sin rumbo!
Julio Flóre: Iulio Flórez Abandonando la región que un día Meció tu cuna con materno celo, El ruinbo tomas de la patria mía, Quizá buscando en extranjero suelo Lo que cual Herold, tu pasión ansía: Hallar en las regiones de tu anhelo Un sol que brille en el oscuro cielo De tu negra y tenaz melancolía. Hosanna oh bardo! del dolor eterno, Del estro virgen delicado y tierno Como el perfume que en tus sueños flota; que mi patria, que tu genio admira, Oiga la tenue y errabunda nota Vibrando bella en tu gallarda lira! SOLERA VIQUEZ de febrero de 1906. De La Prensa Libre 1312

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