En música de baile, tiene muchas y muy preciosas composiciones, extremo, de que es difícil creer tuviera tiempo para escribir tanto. Era un cerebro fecundísimo, inimitable.
Varias de sus obras han sido publicadas, y el resto de las que escribió, están inéditas en poder de su familia. Su aspiración en los últimos años era trasladarse Barcelona para darlas luz.
Respecto del valor artístico de los trabajos de Campabadal, nada diremos por nuestra cuenta, nos consideramos incompetentes; pero copiaremos el retrato que de él hizo La Música Ilustrada de Barcelona en 1900, que entre otras atinadas observaciones dice. Es una figura simpática, de carácter dulce, de corazón bondadoso, y rudo como el huracán, que acurruca luego su espí.
ritu ante todo lo noble y tierno. si como compositor fué una excepción, no lo era menos como conocedor de los grandes Maestros y de la historia, desde su origen de la música.
Conocía el pasado y estaba al tanto y estudiaba las producciones modernas. Sus críticas, publicadas en varios periódicos, dan alta idea de sus muchos conocimientos y del sereno juicio que presidía el fallo, más bien de comparación, que de censura ala banza.
DA sa larga ca ura de artista co. besos y alabanzas de partiEL MAESTRO JOSÉ CAMPABADAL lares de la prensa y de corporaciones, bastantes a enorgullecer otro que no tuviera como él la Stución de lo bello y del arte. Trabajaba por el impulso del genio sin duktimidad tomara más parte que la de satisfacer el oculto mandato de su cerebru vreador, siempre descontento hasta de sus mejores producciones.
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