VARIEDADES La longevidad de los peces Las carpas pasan por ser animales de larga vida: se cree que los cien años están en todo el vigor de la edad.
Esto se halla confirmado, en gran parte al menos, por la experiencia. En efecto, en 1903 se pescó en un estanque de Bélgica un pez de esa especie que llevaba sujeto al labio un anillo con una inscripción que indicaba haber sido depositado allí el animal en 1802 Recientemente, para que se puedan tener datos en adelante sobre la duración de la vida de los peces, y además sobre su crecimiento y sus emigraciones, el comité internacional para el estudio de los mares del Norte, ha hecho echar al agua, en diferentes puertos, peces con medallas, anillos y otros distintivos: y cada pescador que remita algunos de esos ejemplares a la estación central agrícola de Boulogne sur Mer, se le pagarán tres francos por cada uno.
VOCES Cuando de noche en mi mente, un odio viejo dilata su contorsión de serpiente oigo una voz que estridente parece decirme. mata!
Luego, esa voz extinguida que lz venganza pregona, sucede otra voz sentida que me dice extremecida: jantes que matar perdona! Costeño La garza y los peces EL CANGREJO PICARÓN modo de fábula HUMORADAS La niña es la mujer que respetamos, y la mujer la niña que engañamos.
Según creen los amantes, las flores valen más que los diamantes.
Mas ven que al extinguirse los amores, valen más los diamantes que las flores.
Al pintarte el amor que por tí siento, Suelo mentir, pero no sé que miento.
Te sueles confesar con tu conciencia, y te absuelves después sin penitencia.
Algún dia, a pesar de tus encantos, te matará otro tí cual tú me matas, que en materia de ingratos y de ingratas venimos salir tantas tantos.
CAMPOAMOR ra.
Una garza que vivía junto un estanque, habíase vuelto loca; y como no tenía fuerzas para apoderarse de los peces, reflexionó sobre la manera de arreglarse para vivir.
Dijo un día los peces. Sabéis la gran desgracia que se os prepara? He oído decir los hombres, que se piensa vaciar el estanque para cogeros, asaros y comeros. Detrás de la montaña hay otro estanque; bien quisiera llevaros él; pero soy tan vieja, que con dificultad podría ayudaros.
Los peces rogaron que no los abandona. Sea! dijo la garza. Voy sacrificarme por vosotros: os llevaré uno tras otro, porque a todos de una vez no puedo.
Los peces se regocijaron, y todo fué cuestión de conseguir pasar al primero. Llévame, llévame. gritaban miles de peces. la garza comenzó el trasporte. Toma un pez, lo lleva al campo y se lo coine, Así se tragó muchos.
En aquel mismo tiempo y sitio, vivía un cangrejo anciano. Comprendiendo el objeto de la garza, le dijo. Garza mía. Quieres librarme de la cazuela?
La garza asió el cangrejo y se lo llevó.
Llegados al campo, ella quiso dejar el cangrejo. Pero éste, al mirar los huesos de otros peces, estrechó con sus pinzas el cuello de la garza, y la estranguló.
Luego volvió al estanque y refirió el ca.
so los otros animales.
Juventud y vejez Eras de barro y te soñé de oro, no fué tuyo el error, que lo fué mío, quise encontrar en corazón vacío de amor y de virtud todo un tesoro!
Ni amor te pido ya, ni gracia imploro, ni me puede asombrar tanto desvío. cómo hallar fuego donde reina el frío? vergüenza siento cuando sufro y lloro!
La juventud no puede en lazo eterno, tener a la vejez por compañera, eso es soñar un cielo en un infierno!
Es ley fatal, mas justa y verdadera: no viven entre nieves del invierno las galas de la dulce primavera!
NARCISO DÍAZ DE ESCOBAR