El reinado de la locura Llegará extinguirse el pensamiento?
Un loco por cada 365 habitantes Wells, el genial autor inglés, nos muestra la humanidad, en una admirable visión futura, a través de las páginas de su Máquina para explorar el tiempo, dividida, en su crepúsculo, en dos especies, de las cuales, la de los Eloim, que procede de las viejas aristocracias y de las clases directoras en el curso de los milenarios, ba vuelto a la infancia.
Sus cerebros, enmohecidos, como si dijéramos por falta de actividad mental innecesaria ya desde el momento en que los hombres llegaron a la meta de la civilización, han perdido el divino privilegio del pensamiento.
Wells describe a los hombres de ese crepúsculo de la humanidad, pequeñi.
nes, sonrosados, lampiños, casi insexuados, vagando como locos pacificos y sonrientes, por los verdes prados, bajo los piadosos árboles, durmiendo agrupados en inmensos palacios majestuosos, de otras épocas, que se arruinan lentamente. Estará en efecto el idiotismo o la locura al final de esta ruta misteriosa que sigue la humanidad?
Se extinguirá perturbará por completo el pensamiento, en el ocaso del mundo, después de haber mostrado Horecimientos tan maravillosos. Será futuro rey de la creación un monarca enagenado, de un imperio vacío. Inania Regna. Casi dan ganas de pensar esto cuando ve uno las proporciones que adquiere la locura en los países civilizados, sobre todo en Inglatera, que es a la que con especialidad se refiere, naturalmente, Wells, en sus libros.
La prensa inglesa en efecto, cada día se muestra más alarmada de los casos de enagenación me. tal que se presentan en el territorio británico.
He aquí las revelaciones, verdaderamente alarmantes, de la estadística, acerca de este mal que el Pearson Magasine califica en su último número de un peligro nacional.
Durante los últimos setenta años, la población de Inglaterra y del país de Gales se duplicó; pero el número de locos sose cuadruplicó.
Remontándonos al pasado, encontramos que en el año de 1859 apenas había 37, 000 personas en el Reino Unido; privadas de la razón. Ahora bien, el 19 de enero de 1905, ese número había llegado casi ciento cincuenta mil.
Esto equivale a decir que al paso que en 1659 había un loco por cada 366 habitantes de Inglaterra y Gales, la proporción es hoy de un loco poa cada 285.
De todas las determinantes de la enagenación mental, las dos principales son la tendencia hereditaria y la intemperancia.
Durante los últimos cinco años, los miembros de la comisión especial designada para estudiar este asunto, verificaron que, de los casos de locura ocurridos, el abuso del alcohol había originado 22 por ciento entre los hombres y por ciento entre las mujeres.
Por lo que ve la influencia hereditaria, produce 18 casos de cada cien, en los hombres, y 24 por ciento en las mujeres.
Las dolencias físicas contribuyeron con 14 por ciento en los masculinos y con 13 por ciento en los femeninos; los reveses de fortuna, con un por ciento entre 2010