Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
os 12 70 Hle te ciones y que se ha mantenido siempre en honrosa lucha contra todo lo que ha significado le ha parecido signibcar encadenamiento de su espíritu expansivo y liberal, resistió, hasta el heroismo que pagó bien caro, los ejércitos de Felipe V, cuando este monarca vió inclinada a su favor la balanza que sostenía el Destino mientras duró su torneo con el archiduque Austriaco.
Felipe de Anjou, al plantar sus pendones en Barcelona, quiso sujetar los catalanes y su ciudad santa especialmente, no solo quemando todas las leyes, anulando los fueros lisiendo mortalmente las costumbres, sino que para hacer ostentación pública y solemne de su poder y de su odio, derrib un barrio entero, llamado de la Marina, para en él levantar aquel formidable baluarte, que se llamó la Ciudadela, que más tarde se encargó el despótico y feroz Conde de España de convertir en cadalsa para todos los que hlasonaban de amor la libertad.
Pero como el tiempo es justiciero, la revolución de Septiembre de 68 derribó al grito de. Libertad! lo que el absolutismo habia edificado, De aquella Ciudadela, hoy Parque hermoso y que honra Barcelona, sólo queda en pie la iglesia convertida en Panteón de catalanes ilustres y sobre las minas enterradas de aquella fortaleza, se levanta majestuosa y gallarda la figura ecuestre del General don Juan Prim, encarnación y verbo del hecho histórica que acabó para siempre con el reinado del absolutismo y la intolerancia Al derribo de la Ciudadela habia precedido ya el de la mayor parte de las murallas iniciado en 1554.
Quedaba en pic, no obstante, la llamada muralla de mar, como cerco que impedía Barcelona extenderse hacia el Mecliterráneo y que privaba al Barcelona, año 1870. Muralla del inar comercio del espacio necesario para su desarrollo y desenvolvimiento Se creó entonces la Junta de Obras del puerto, que después de los trámites siempre laboriosos que obliga la administración, consiguió ver aprobado su grandioso plan y con ello la cesión del terreno que ocupaba la muralla.
No se hizo esperar la inauguración de las obras de derribo y fines del año de 183 no quedaba ya en pie nada de aquellos muros de secular Barcelona. Paseo de Colón existencia, comenzándose el terraplen de los terrettos ganados al mar y formándose el paseo de Colón que es hoy uno de los más hermosos de Barcelona.
La fiebre de mejoras se había apoderado ya de los barceloneses que supieron llevar al Municipio personas idóneas, y entre ellas al siempre llo2734 a, a Tin la HS eSEIS
Este documento no posee notas.