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Fragmento desiloblamiento, supo el artista de que trato, imprimirlo, valga la palabra, en esa su obra, la cual, como concepción artística, la cantaría en el más raro poema que mi Musa me dictara.
Id la Caiedral y hurtadillas, para que no os califiquen de sacrilegos, destapad el santo sepulcro, descorred un velo albo y luego un sudario también albo y os hallaréis con una maravilla de arte escultórico, es un Jesús muerto, una escultura yacente que representa ai Profeta, al soñador y moralista más grande y abnegado que vieron los siglos pasados. Allí veréis la tranquilidad de la muerte resignada, la frente amplia de los grandes pensadores, ajada con el polvo de la escabrosa ruta del Calvario, la boca inflamada por el fuego de la elocuencia divina, la planta tostada por los cá lidos arenales del Asia, las manos delicadas que acariciaron a los niños y los golpes cárdenas asestados por los jurados enemigos de los que llevan un rayo de sol en el cerebro y aliento y esperanza en la palabra Esa obra no estaría mal al lado del Nazareno de Montañés, y fué esculpida por el artista Rodríguez, ese que veis en el fotograbado, con la nieve que arroja el tiempo en los cabellos y de barba que rebela la noblezit de su estirpe.
Su genio aieteó por levantarse y encontró un buen punto de apoyo, la escuela mística: sobre esa enorme roca se posó, hatió las alasile se numen y logró dominar la forma relielde en el cedro oloroso de nuestros bosques, con el cortante filo de las herramientas, Por lo que hace la escuela nada hay que decir como no sea en su luor. en ella las conquistas de Murillo, Zurbarán y Ribera; en la Cúpula Sistina Miguel Angel desplegó su fantasía y derramó uva aurora de su genio.
En esa escuela magna se inmortalizaron muchos artistas: Velázquez se inspiró en ella cuando pintó el milagro de su Cristo y Rafael sus inimitables Madorsas.
La gran Naturaleza era la Fuente Castalia en donde bebía el artista costarricense. Natur fué maestre; ella le dijo mil secretos y le dictó la forma de los miscnlos, la candorosidad de la faz de los niños, el reposo de sus Cristos y el gesto dolorosos del rostro de los Nazarenos que esculpía. Habrá mejor escuela?
Viejo artista, descansa so la dosa funeraria, so el triunfo de tus obras; uno de los pocos que supieron comprenderte, el más grande de tus admiradores, irá una tarde, llena de incendios vespertinos, tu sepultura escuchar el sollozo de tu Musa y pensar una elegia iugenua y cariñosa.
Agoniza el aito y su vida miserrima se ya perdido en el caos profundo de la eternidad: bre las ruinas ele semejante desastre, un inmense vida esa, decíase. repitiendo ese aforis feliz.
El gran baile del Teatro Nicional que en doble objeto: despedir, en la dulce embriague cadáver fantástico se amontonan pesares, decep ato naciente con esa alegria explosiva que se cuando el nito lanza los aires de la existencia ansiosa su primera suavisima sonrisa: pintura ex hace contemplar el pasado con languida tristeza de anhelo, hacia los horizontes del porvenir, en metida. un Atlantida poblada de ensuelos y de En aquella oportunidad, más que en otra puesto que el baile itera espléndido y su OSO.
Bellas artes, nustrada en noche tal todas sus gal: cillas de colores, en artistico concierto caminad ya entre las blancas columnas de mármol o la plandecía entonces; los frescos se animaban con las friss imponderables curcas de las estatas, en la pintura del platourd. tient de mujeres deseti de besos y quejas de voluptuosidad, como bálit.
gas.
El sitire de a refa con Tisa perversa: la caje como para una cita galante: polo parecia árboles inmóviles de este y del otro paisaje, agis pulso de una brisa imperceptible: la miseara de en naa mueca de placer las figuras de alto relie raula codiciosa desde el fondo de las relucientes pa Habia flores por dooniera, en las cráteras or rosas blancas, claveles encendidos, desde el lige griento; azucenas esmu pentélicas, de amarillo pullo y camelias medio abiertas: magnolias violetas de tette deleitoso aroma: ramus colgan men florido, pues, que llenaba de perfume trio no es esto solo. Drisse que de aquel jar o de los callados pifanos pastorites, se levantalu juro de Orfeo, las musicales cadencias de herkes Vibraba la música cun tiernos y alegres sones; ora la sangre y suspende el espiritu: ora ei ritmo loco gico diapasón el juicio se pierde la irose apas onda de la Mazurca, con su dejo sentimental de Dovia sus sueños encantadas y el galan con amor de su alma repleta de esperanza y todas las conjos dura incertidumbre.
Manilestaron los cronistas the quella fiesta elegantes reseiras, que lo mas conspicio de la la miras femenil belleza como en lo que tiende a di congregado en el baile, cual si para ello hubiese tan cierto en efecto.
AllS se esparcian, con todos los tonos de ler lindas mujeres. Había de las rubias ideales de au con celestial mirada, prometedora de celestial vent que semejan humanos mármoles por delicado artifi cales ángeles terrestres de nuestra poderose tatu euridad brillante de las noches americanas y en my darte rojo del beso se ostenta como blasón tentador: ginales, que por su exquisita belleza provocan las acallan el resoplido de la bestia sensual: de las que a rea insuperable de los grandes artistas: de las arte el matiz de una virtud angélica de las que en cada Listricco Chavarria 2224
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