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Orfebrería Indigena metal forzos: cobre abund por sig cual seis cristia que, seis e cristis ralle luciente.
glo XVI.
oro, abund el hal años. señor name quí el graba colecc millo fundi Los go, st Debido a la costumbre que tenían los indios americanos de sepultar con los cadáveres los objetos de uso personal y las piezas de oro, jade, hueso, concha y otras sustancias con que fabricaban sus joyas y amuletos podemos hoy conservar en los museos muestras valiosas de manufactura antigua. La sed de oro que se apoderó de los conquistadores hizo fundir todas las piezas del rico metal que los indios lucían como objetos para ellos de valor incalculable. águilas, lagartillos, sapos, arañas, medallas, patenas y otras hechuras, que de todos rro eso consignaban en sus memorias los historiadores, y las cargas de joyas. pasaban la Capitanía General de Panamá convertirse en pastas de oro reLos pueblos indios estaban calificados de bárbaros y el arte de aquella civilización ningún valor tenía para los hombres blancos del siEl hijo de Dios inteligente como el hombre, dueño del espacio como el águila y señor de la tierra como el tigre había bajado de la altura para destruir el poder de la serpiente, por eso lo representaban con forma humana, dotado de alas y cabeza de águila, con cuatro cabezas de tigre un lado y otro, como símbolo de la sabiduría, la destreza y el poder invencibles.
En esta industria, dice el doctor Zerda, se modelaba el objeto en tierra porosa y refractaria; este molde seco se cubría con cera negra de abejas, estirada en láminas del grosor del objeto que se quería amoldar y fundir, y con la misma cera se modelaban los adornos tales como hilos, figuras, especies de cariátides, fijándolas en su lugar conveniente; una vez cubierto con esta ca N! 20. Mide 38 milímetros pa de cera, se recubría de cantidad suficiente de y pesa 17 gramos tierra amasada en una pasta dúctil, dejando una abertura conveniente para intruducir el metal fundido. Se dejaba secar lenta mente este molde, dentro del cual estaba el modelo de cera y finalmente se ac tivaba la desecación con el fuego aplicado en contorno y cierta distancia, En esta operación el calor elevado a un alto grado, liquida la cera que fuade 669, y sale por aberturas practicadas en la parte inferior del molde, y otra porción és absorbida por los poros de la tierra. Estando aún caliente el molde y cerradas las aberturas de salida de la cera, se vierte el metal perfectamente fundido por la abertura que se había hecho exprofeso. El oro se distribuye en todas las sinuosidades, acabando de hacer desaparecer la cera que hubiese quedado, debido al alto grado de temperatura que necesita el metal para fundirse.
El cobre se funde 7889 centígrados, el oro mucha mayor temperatura; pero la mezcla de ambos se funde con mayor facilidad que cualquiera de estos metales aisladamente y este es motivo bastante para que los indios mostrasen por la liga marcada predilección. Así, casi todas las piezas de oro que aparecen en las guacas son de 14 18 quilates poco más o menos.
Raro ha sido no hallar los crisoles de barro en que los indios fundían el oro para modelar sus ornamentos: mas no es extraño que los moldes misPieza de cobre dorado mos tampoco parezcan porque una vez vaciado el etc.
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