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Del diestro Para Páginas Mistradas Esta es la frase consagrada por el uso de los doctos y no de tliestro, como con tanta frecuencia se oye por alí, a pesar de que en los autores clásicos no es del todo desconocida como nos lo comunica nuestro erudito amigo doctor Lisandro Alvarado, que la encuentra en López de GOinara, Conquista de Méjico, empleada constantemente con preferencia la otra. del diestro. Sea como fuere, esta forma es la más usada, como vamos demostrarlo con testimonios respetables. Fuí mi desdichado macho. y llevándolo de diestro lo más poco a poco que pude fuí considerando. Vicente Espinel, Marcos Obregón. Ya enzarzado en lo más espeso y fragoso del monte, llevando del diestro la caballería por entre sendas casi impracticables. anduve vagando al azar un buen espacio de tarde. En piadosa procesión.
conduciendo los caballos del diestro iluminándola con el rojizo resplandor de las teas. llevaron consigo la milagrosa imagen hasta Borja. Bécquer, Obras. 11, pp. 282 y 350. Los dos mozos de cuadra llevan del diestro los caballos. Pardo Bazán. traducción de los hermanos Zemganno. Pero no todos los hombres se dejan llevar del diestro. Francisco Flores Araenas, Coquetismo y Presunción. Cuatro mil son los infantes, y tres mil los que ijadean buscando paso del diestro sus caballos de guerra. José Velarde. Ponces y Guzmanes)
Restauradas sentí mis fuerzas todas, y oprimiendo los lomos de un caballo, que Nuño pie del diestro dirigía un castillo partimos inmediato. Angel Saavedra, El Moro Extós. rom. III. que oyeron contar cómo el tordillo se huyó, volviendo del beber. por culpa del mozo que del diestro le traía. Id. Ib. rom. X7. precediéndoles cuatro caballos que, desuncidos. llevaban del diestro los señores doctores Luciano Arocha. Medina, Guánchez y Aquilino Ponce, discípulos del sabio. Jesús Morales Marcano. 4poleosis de Vargas, Introduc. XVII. Salió primero don Juan, y con Lorenzo se fué fuera de la ciudad, y en una huerta algo desviada ballaron dos muy buenos caballos, con dos mozos que del diesti o los tenían En esto estaban, cuando se descubrió don Antonio de Isunza, que fué conocido de don Juan en el cuartago desde algo lejos. pero cuando llegó cerca se paró, y vio los caballos de don Juan y de Lorenzo, que los mozos tenían del diestro y acullá desviados. Cervantes. La señora Cornelia. En las Disquisiciones mágicas del Padre Delrio, se lee la historia de un 26(266 documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregon Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y seventud Costa Rica.

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