M. Flammarión y el eclipse de sol de 1900 Era en mayo de 1900. Flammarión, el poeta de los cielos, el científico admirado por academias y muchedumbres de todos los países, llegó Alicante.
Iba realizarse una vez más la profecía de la ciencia. La razón individual, potente y hermosa creadora, había anunciado que la marcha de la sombra de la Luna el 28 de aquel mes y año, proyectaría su trayectoria sobre Portugal. España, Argelia y Túnez. causa del excelente tiempo reinante la sazón en la provincia de Alicante, de clima generalmente dulce y benigno, decidió Flammarión observar el eclipse total de sol, en Elche, cuya línea de centralidad por allí pasaba.
Improvisóse en el terrado de la casa de campo del Alcalde según el propio astrónomo refiere, y nosotros personalmente vimos su observatorio, desde el cual el horizonte se vislumbraba con todo el esplendor y la diafanidad de que en toda época se enorgullece la histórica ciudad de las palmas.
En el momento en que observé en el telescopio el primer contacto del disco lunar con el sol. exclama Flammarion. mandé lacer un disparo de Elche (Alicante. La Palmera del Cura.
visitada por Mr. Flammarion el 28 de marzo de goo cañón para anunciará las cuarenta mil personas que estaban esperando el fenómeno, el principio preciso de la ocultación. la emoción que en todos los que presenciamos aquel sombrío cuadro de la naturaleza nos produjo, fué encarnación real de lo grandioso, de lo sublime del espectáculo. Sintióse un viento frío: la multitud yacía en éxtasis de sopor; los segundos parecían siglos: la vida se apagaba la luz era opaca, siniestra, mortecina. La angustia dominaba los espíritus. Los 79 segundos de la totalidad han pasado. Un resplandor deslumbrante brota del sol haciendo ver que la Luna, siguiendo su cur2683