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Sully Prudhomme Para Páginas Ilustradas e S. El inmortal poeta francés rindió la jornada de la vida en la noche del siete de setiembre, en Chantenav.
Este hombre superior deja una estela luminosa de probidad, de benevolencia, de generosidad tierna, de sublimidad intelectual de sentimientos amables.
Desde sus primeras poesías, Stances et Poémes, Les Solitudes. Les Vaines Tendresses. el estro del poeta se advirtió colmado de exquisitas formas y de profundos idealismos; en ellas se exteriorizaron las virtualidades de su alma tierna en presencia de las vicisitudes de la vida, y la concentración de su espíritu, siempre embebecido en los enigmas del universo.
En sus últimas producciones. Les Destins. La Justice, Le Bonheur; el gran poeta con su inmenso acopio de conocimientos socionómicos, cantó la vida en sus faces nobles y sobresalientes. Sus estrofas más cristalinas y sonoras fueron consagradas al trabajo, al esfuerzo cuotidiano de los hombres de buena voluntad. que buscan animosos el pan de cada día sin dejarse atrofiar el nervio de la constancia por la inacción de los pesimismos cobardes.
Sully Prudhomme amó las libertades y soño con la bienandanza de los conglomerados humanos, pero siempre dentro de lo cierto y de lo justo, sin dejarse arrastrar por las exageraciones caóticas. De ahí, que podamos llamarle el hombre más justo y equilibrado de la moderna intelectualidad. más de pulsar con inaestría una lira de sonoridades argentinas y fecunda en acentos sugestivos irresistibles, también supo pensar hondamente y dilucidar sobre los grandes problemas sociales. Su espíritu siempre se arrobó en las más nobles meditaciones, y los ideales de justicia distributiva y de fraternidad humana, que clarean va en los horizontes del mundo moderno, siempre llenaron de jubilo su alma gene11 1a.
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la or ie Permaneció aferrado ese espíritualismo moral que Renan enseñó y que Combes reivindicó con calores tribunicios en el Senado francés.
El pensamiento del poeta siempre fué libre, y su poderosa razón siempre acató con espontaneidad las verdades y los principios de la ciencia experimental. La muerte. con su inmisericorde mueca, sorprendió al fecundo laborador terminando una obra sobre el problema del libre albedrío.
Como crítico y como esteta deja estos dos estudios, cual más meritorios: Expression dans les Beaux Arts y Reflexions sur Art des ver Este hombre genial nació en París, en el año de 1839, y en 1865 dió luz su primera colección de poesías; desde entonces se hizo célebre, y su fecundidad, excitada por ese gran medio artístico de la capital del 2685 )s

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