Victoria Limpia Para Páginas Ilustradas Las glorias de todos los grandes capitanes, desde Josué, que hizo detener el sol para triunfar sobre los enemigos de Israel, hasta Togo, que gozó de la ubicuidad del pensamiento debido al telégrafo sin hilos, han sido glorias muy costosas. En las grandes liquidaciones que hará algún moralista tuturo, pondrá al debe de esos héroes el luto y la desolación que llevaban al rebote de su espada. Allá la filosofía de la historia positiva, cuando al cabo de algunos años se vea en esa gran liquidación si queda algo al haber de esos eminentes segadores de vidas. ya que nos metimos filosofar sobre los triunfos, dejemos un lado los pirricos, tan cometidos en esta época de insana ambición, aun costa de los intereses más caros la humanidad. es que en todas las luchas de la actividad humana hay triunfos que son verdaderas derrotas, y viceversa: hay victorias que deshonran, así como fracasos que enaltecen.
Qué hermosos, qué humanos, son los triunfos que no dejan despojos en la liza, ni privan de ningún merecimiento los vencidos, que decía un ilustre compatriota. Cuántos triunfos de esta suerte se ven a menudo, que pasan desapercibidos y ni aun siquiera se mencionan como ejemplos para la cultura moral de la especie! 999 Dijo aquella famosa lady Hamilton que así como cuando queremos averiguar qué rumbo lleva el viento no arrojamos al espacio una bala, sino una pluma, asímismo para juzgar del carácter de las personas no debemos fijarnos en los ostensibles y sensacionales actos de su vida pública, sino en los pequeños de la vida intima o privada. múltiples por demás en el constante comercio de las ideas y de las cuotidianas relaciones.
En corroboración de esta verdad, viene aquel apólogo de Martín Lleras, que lleva por título El conejo extraviado, que quizá no conocen algunos de los lectores de Páginas.
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