que 5, de ten cum.
Lins mocerse e suabajo ular, Gilias; as y, dad, uilial de icio til ni pero e no de plemás, pero ne la renle lo pero que reruc.
den trucción popular. es de advertir, en el que ahora habla, la gran parte de responsabilidad que en esto le corresponde, por haber desempeñado en dos períodos sucesivos la presidencia de la República, animado de buen deseo y con medios suficientes llenar tan imperiosa necesidad; mas vaya en mi descargo el no haber llegado comprender entonces las deficiencias que ahora me refiero, con el deseo de que quienes me oigan y pueden, las subsanen en beneficio de la educación en general.
Yo no condeno en toda su extensión el sistema adoptado, sino en cuanto lo conceptúo demasiado científico, y dudo mucho, en consecuencia, de sus resultados prácticos, por la dificultad de formar maestros tan competentes como se requiere, y porque es tan severo y extremado en la metodologia como prolijo en la manera de enseñar que, la verdad, hace del niño casi un autómata, sin acción propia ó, si acaso, muy lenta y tardía para la concepción de las ideas y de las cosas.
Yo he creído siempre que nuestros hijos, retoños de una raza vivaz y nacidos en los trópicos, tan fecundos en el desarrollo de la inteligencia, les convendría un sistema más rápido y, por lo tanto, de mayor esfuerzo, que en vez de contradecir esas condiciones indudablemente ventajosas, fuera la par de ellas, encauzándolas y dirigiéndolas con acierto. Asimismo, considero inconveniente el que se descuide o, mejor dicho, se condene la memoria en el niño, por exagerado modo de razonar cuanto se le enseña, no obstante lo elemental de la instrucción, sin tomar en cuenta que esa potencia del alma es de las primeras en manifestarse, pero tarnbién la primera en desaparecer, y que, en consecuencia, hay que cultivarla en la primera edad con el aprendizaje de aquellos conocimientos que requieran de menos el raciocinio del niño, usando para ellos de los respectivos textos; que en todo caso, es bueno caer en cuenta de que lo contrario de la memoria es el olvido y que no poca desgracia sería para nuestros hijos el abandono de esa preciosa facultad.
Me explico perfectamente que en otros países de raza diferente y de diferentes latitudes a la nuestra, donde sobran medios para ello y lo reclama el lento desarrollo intelectual de los niños, el medio ambiente y las condiciones de vida ya normalizadas en todos sentidos, se haya llegado a la adopción de ese sistema de enseñanza, en fuerza de observaciones atentas y de minucioso y profundo estudio de todos estos factores, con tanto acierto como se llega a una conclusión matemática; mas juzgo que entre nosotros no debe aplicarse en todo su rigor y que conviene modificarlo, conservando sus fundamentales principios hasta donde sea posible, prefiriendo en todo caso sacrificar, si se quiere, ventajas científicas por resultados prácticos; pues no debe perderse de vista que Costa Rica, en materia de instrucción publica, como en todas sus demás instituciones, está de tal manera democratizada que lleva sus escuelas todas partes y que el sistema que adopta lo establece por igual desde el último villorrio hasta la capital. Esta generalización de la enseñanza, de manera tan profusa, no existe en la mayor parte de los países donde rige el sistema que analizo, y es por esta razón también por lo que se hace allí más factible su adopción; en tanto que para nosotros llega ser, en la forma en que está implantado y por las razones ya indicadas, dispendioso en tiempo y en apropiados elementos, y poco halagüeño, por no decir inconveniente, en sus resultados.
La labor de la enseñanza primaria, considerada en su armonioso conjunto y en sus fundamentales propósitos, es de tal manera difícil y delicada en su desarrollo que requiere, indefectiblemente, voluntad inquebrantable y firme propósito en la prosecución de un sistema que se adapte completamente a las condiciones del país, que tome en cuenta los elementos de que se puede disponer; que se compenetre de la indole, tendencias y aspiraciones del pueblo y se inspire en su propio bien. Organizar escuelas, formar maestros, redactar programas y esta.
2841 gran la que de ntos lido os lo cto.
diatias, altaaron CSdel sas, elas Ni sisdo, ins