Debido a los elevados costos del mantenimiento de las imágenes, se ha restringido su acceso solo para las personas registradas en PrensaCR.
En caso de poseer una cuenta, hacer clic en “Iniciar sesión”, de lo contrario puede crear una en “Registrarse”.
cunque se encuentran por centenares en las playas, otros se dedican al estudio de este interesante rio, Con sobrada razón decian los antiguos egipcios que el Nilo era el padre del Egipto. En efecto, aquel río había formado el valle y lo seguia fertilizando con sus inundaciones periodicas; prestaba sus aguas para que con ellas hiciera el riego de las tierras y daba frescura y humedad al ambiente para atenuar los efectos del clima abrasador, No otra cosa podrian decir de sus ríos los vecinos de El General: el suelo es fértil, porque las inundaciones frecuentes dejan por todas partes grandes extensiones de tierra aluvial, que, a diferencia de las que dejaba y aun deja el gran rio africano, son aqui arenosas y ligeras. Un sistema de irrigación en El General no seria cosa difícil por la poca profundidad del cauce, que en algunas partes se encuentra al nivel de las tierras. Esta circunstancia da lugar la subdivisión del rio en varios brazos y al desplaye consiguiente de las vegas.
En vano se harían esfuerzos para precisar la anchura del río en este punto de su curso: nosotros lo intentamos pero hubimos de encontrarnos con que las últimas avenidas del mes de octubre próximo pasado habían dado origen tro cauces distintos, algunos de los cuales arrastraban poco caudal de aguas, y habiéndose, además, abalanzado la mayor parte de ellos sobre la llamada Quebrada Hermosa, esas inundaciones habian producido un cambio completo en la topografía del terreno, la pérdida de muchos cultivos y el aislamiento de otros en medio de las islas nuevamente formadas.
Los materiales de acarreo están formados, no sólo por las tierras arenosas sino también por los extensísimos pedregales que deja de año en año, y por otros materiales constituidos por los restos y detritus de las plantas, los troncos y las ramas muertas. Aqui fué notada por primera vez una costumbre que es generalmente observada también por los habitantes indígenas de toda esa parte del pais: para hacer un puente sobre un río no hacen falta ni los ingenieros ni los trabajadores; la misma corriente habrá dejado en alguna parte un gran tronco de árbol al través del cauce que les servirá de puente natural, aunque tenga para ello que comunicar sus trillos con el puente así construido. Así ha pasado aquí, y en muchas partes la travesía se efetcúa de esta manera.
En el verano el caudal del rio disminuye notablemente y el vado es cosa fácil en cualquier parte.
En cuanto a sus condiciones de potabilidad, las aguas de El General dejan mucho que desear: muchos ranchos, por la gran distancia que se encuentran del río se procuran las aguas que encuentran en los cauces menos importantes, en los cuales, por ser las aguas poco corrientes, forman unos depósitos que se cubren de algas y son el foco de gérmenes nocivos la salud, Se nos dijo en varias ocasiones que a causa de la mala calidad de las aguas.
la gente padece de paludismo y una especie de cansancio el tustús) que de seguro es producido por el anquilostoma tan conocido ya en Costa Rica.
Una rama de la agricultura, fuera de toda exageración, la más producti va de Costa Rica, seria, sin duda alguna, la explotación sistemática de la ganaderia en el valle de El General. Los pastos naturales son allí abundantes invaden el suelo por todas partes a despecho de los montes y matorrales.
La industria pecuaria prospera alli admirablemente. Por eso es muy sensible que el Gobierno abandone por completo esta rama de la agricultura, y que no supla, como es debido, la falta de la iniciativa privada. Introduciendo sementales y vaeas de buena raza podrían mejorarse las condiciones existentes de la ganadería. Ya se ha hecho un ensayo con un toro de la raza Holstein y se ha visto que las crías en nada desmerecen las obtenidas por los agricultores de San José, mediante una selección cuidadosa, fomentando la formación de potreros y terrenos de repasto podrían habilitarse esos lugares para el mantenimiento de un número mil veces mayor de animales que el que en la actualidad existe, pues, tan exiguo como es, apenas satisface por el momento las necesidades del consumo local. Los beneficios que obtendría el país en general serían incalculables, hoy que la producción de reses y bestias de trabajo no al3006 Este documento es propiedad de la Biblioteca Nacional Miguel Obregón Lizano del Sistema Nacional de Bibliotecas del Ministerio de Cultura y Juventud Costa Rica
Este documento no posee notas.