En el hospital fic со ро ESE tre со ch di mni са 10 la to to lo SI. El doctor Echeverria. preguntamos. Se encuentra visible, sírvase esperarlo. el criado hizo ademán de que tomáramos asiento, No conocíamos personalmente al Galeno, pero teníamos por dónde conjeturar Habiendo ya tratado sus hermanos don Francisco y don Gerardo, natural era aplicarle aquello de «nobleza obliga. en efecto, es el doctor Echeverría toda una per sonalidad distinguida: lo que en inglés se denomina un gentleman.
Apareció el doctor.
De aspecto, si asi nos lo permiteun poco severo, es no obstante muy afable; poseyendo como toda persona de selecta educación una cultura de buen tono que le atrae las voluntades.
Previo el saludo identificación de rigor quedamos inutuamente presentados.
Expusimos el objeto nuestro: conocer el hospital.
Justamente voy a comenzar la visita. Si usted gusta de acompañarme? repuso el doctor.
Eran en aquel momento sobre las ocho de la mañana y antes de penetrar en los aposentos del dolor tendimos la vista en torno: El sol haciendo fiesta de colores en el jardín se mostraba juguetó cu las mil flores de variados matices.
Los regios gira soles se ostentaban soberbios sobre sus varas enhiestas; en tanto que el ambiente se saturaba de los sutiles y delicados olores de la flor de limoneros, madre selvas y violetas. Había tanta poesía en aquel cuadro como en la de todos los episodios de la Naturaleza. Doctor Emilio Echeverría para con pletarlo, llegaban imponentes nuestros oídos el retumdel mar, al estrellar sus olas espumosas contra la rompiente de las rocas.
Una caprichosa y colosal esmeralda emerge airosa de la linfa bullente del Océano. Es manera de un islote cubierto de musgo y arbustos que reviste singular importancia geográfica; pasa por él exactamente, el grado 109 del meridiano de Greenwich, 600 millas al Ecuador!
Sacónos de nuestra contemplación la voz del doctor exclamando: vamos! Has.
ta entonces había el estado dando órdenes sobre los más mínimos detalles, hasta los asuntos de mayor importancia, todo esto sin trepidar un solo instante, y tan pronto en inglés como en alemán, francés y otros idiomas que posee como el nativo.
Es, pues, un políglota. cabe aquí, aunque de paso, hacer una ligera apreciación. b ti 3199