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Crepuscular Parwi huonez amiga aritu AMERICA SOLERA y bajan diciendo te inandi tu llants Ji pot se hal16: y el néct su labies más tard perdió ha de ser fel de un hoi Sentada en el regaza del amoroso abuelo, la aieta pensativa hablole con teinur. Querido viejecito. por qué miras al cielo con esos ojos tristes?
Te aflige algún dolor?
Hay flores en la vida, paisajes de colores que pinta delicado el arte de la luz; Pero hay un fondo negro que trazan los colores y surge tras la dicha la som ora de una cruz.
Liegó el momento ansiado: con vinculo amoroso unimos nuestra suerte ni dulce amada y yo: los dos llenos de gloria, los dos llenos de gozo, al ver que con sus alas la dicha nos cubrió.
Maszay! que todo acaba.
Mi sueño iné mentira; se cierne en torno mio la suerte que es muy cruel.
Mi esposa que se enferina, que tose y que delira, y en medio de nosotros la luna sólo hiei.
La tisis la devora.
Velando junto al lecho la mano de la ciencia batalla sin vencer: en tanto que la angustia revuelcase en el pecho y bliga mi alma triste inil lágrimas verter.
El cielo está de gala: brilla oro entre las nubes y hacia ellas videla el alma de mi alma y de mi hogar. Qué sabes, nict citla! le dijo con reproche: las penas de este mundo 10 puedes comprender; apenas tus a briles No formas sino el broche de un tierno capullitu de fresco rosicler. Abrelo, ya adivino lo que hay en tu tristeza: tal vez un dest nga ftu te oprime el corazón. Pero por esas canas Que ostenta tu cabeza.
no surge poderosa la luz de la razón?
Abus que ela yo mirat de lianto abuelo, One sient hay algui me besa algún ex. Elb que alun y con su Que el alt las inas Que lanza yalurnbr del miser Es belk encanto mio, vivir en la igaorancia del cierzo que marchita las fiores de ilusión; 12) pierdas el sosiego, ya que es la dulce infancia la miel que saborea con gusto el corazón. Mi pecze guarda nieve, inis canas, decepciones: con ellas a experiencia muy caro la compré: y el hombre observa tarde que son las ilusiones errantes fugitivas que arrastran con la té.
Gl poema del nido Paso 110 nariposa de alitas esinaltadas, haciendo ondulaciones con rumbo hacia el ja dia; y luego ante la vista de flores matizadas, llego a las amapolas tenidas de carmin.
Bien se que si te cuento millistoria de amargura.
mi pecho con el tuyo Ta van compartir.
Escucha y no te aflijas, que si mi vida es dura quizás ti te espere sonriente porvenir.
Alli paró, aspirando la esencia en briagadora, meciéndose en los pétalos alegre la infeliz.
ajena a la acechanza de u ve cazadora que arranca con su vida su sueño tan feliz.
Amé con el delirio de un corazón ardiente que encierra en sus entrellas el fuego un volcán, en la hora venturosa que a la pasión yehetnente las flores de ilusiones corona 11 con afán. Lluvia de perlas, nube de visten los campos primaverale rubias espigas las verdies loma nieblas azules los manantiales La agreste lira de los amores vibra en los sauces de la riber y allá en un toldo nupcial de cantan su dicha los ruiseñores, 1111a mañana de primavera.
1I Dióles el campo césped mi dibles el viento música y gaia y ellos cantando cubren su nid ya con sus besos, ya con sus a Todo era fores en la pradera; todo era nubes de oro en los ci era una tarde de primavera cuando arrullaron, por vez pris los ruiseñores sus hijuelos.
Ai contemplar la escena sintió la virgencita que in algo misterioso Hesaba e corazón: entonces el anciano le dijo a la ninita. Com esa mariposa dan muerte la ilusiou.
Yo sé de los placeres, yo sé de las ternuras que en kulettos acaricia la loca juventud: vos de las tristezas que engendran amarguras y al corazón fabrican un misero ataúd.
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