abundair la reala artista: muñeca consiguiente, la señora Iris queda, con todo rigor, en el triste predicado de genio mediare. Gran injusticia. La encantadora tiple dista no poco, sin duda, de ser un genio; pero, la vez, ella merece en el arte de las tablas una calificación superior, muy superior la que malamente la palabra ilistinguida comporta. Un consejo amigo. de amigo ignorado, que es la mejor casta de amigos. no deje la señora Iris que le pongan motes en los anuncios de la Compañía: ese expediente de cartel está ya muy desacreditado en América. En España no se usa. Por lo demás já qué los calificativos convencionales mentirosos cuando el público ha de hacer por su cuenta las rectificaciones correspondientes?
tos autoina ima señora que se ación de los secontraria: grande: usión se la realiexactitud turas de Gasion de Pilva Oh, femina!
Para Páginas Ilustradas raya si tampoco cia, esta a de su er Heras el papel Mis ojos en el ansia vespertina cegaron de fatigas en la espera.
y me así a tu recuerdo cual si fuera un dulce lazarillo. Buena y fina algunas Ora intelie el gris tal como una caricia femenina calmar un dolor. la noche alstera sobre la triste y larga carretera alzaba un reino de quietud divina.
es predisTgado de de perto sobre a tiple. Mala con tituMianhelo solloza ba, itas en vano.
que mi dolido corazón la mano adversa castigaba con rigores: e lo que quiere toEh, como ne dejar y en esa lobreguez. consoladora.
tu recuerdo inflamó como una aurora el oro de mis cielos interiores.
go, al ser Levis Sablanca Tvó hace á mea) es de siguiente. ís de la Os, y, por Ocaia. Colombia.
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