Guardar

3902 PÁGINAS ILUSTRADAS la construcción, en Cartago, del palacio destinado las reunior de este alto cuerpo de arbitraje.
Al abrirse las sesiones, el 25 de julio de 1908, fué electo presidente el delegado costarricense don José Astúa Aguilar, uno de los primeros jurisconsultos en Derecho Penal de Centro América.
El Gobierno de los Estados Unidos se hizo representar por Mr.
Buchanan y el de Méjico por su embajador don Enrique Creel. Este eminente diplomático pronunció un discurso en el cual hizo el mayor elogio de Costa Rica.
Para darle gracias de este noble homenaje a la nación mejicana, Costa Rica envió Méjico uno de sus mejores hombres políticos, el señor Anderson Este acto de cortesía fue muy apreciado por el Gobierno y pueblo mejicanos y los periódicos elogiaron Costa Rica ya su joven diplomático.
Lo que precede muestra suficientemente la paz que reina en Costa Rica.
Este pequeño país, de sangre latina, que estima la Francia, no sería el hijo de la grande y guerrera España si no supiera mostrar su heroísmo, llegado el caso; su paz es perfecta, pero no transige con el honor.
El Presidente señor González Víquez, dijo en un discurso pronun ciado en un banquete. Seamos pacíficos por el honor y el amor la humanidad, pero debemos estar siempre preparados por si algún día desgraciadamente debemos tomar las armas para defender nuestro territorio o por el honor de la patria; ese día yo seré uno de los primeros que me haré matar por la defensa de nuestros derechos.
He ahí la energía y la dignidad del Primer Magistrado de la República de un país libre y valiente!
Costa Rica, sus hombres de Estado y y su pueblo merecen la mayor estima El Doctor Alvarez Cañas es un amigo de Francia y en su representación consular un asiduo colaborador del distinguido Ministro de Costa Rica en Francia y al que le unen estrechos lazos de amistad, el señor don Manuel de Peralta, uno de los más antiguos miembros del cuerpo diplomático en París; acreditado también ante otros gobiernos europeos y además personalidad muy conocida en el mundo científico y literario.
El Doctor Alvarez Cañas goza de una gran popularidad en Costa Rica y su conducta está en perfecta armonia con las ideas de su país.
Este año, en una de las sesiones del Congreso, al ocuparse del cuerpo consular, fueron reconocidas por unanimidad y con palabras llenas de entusiasmo sus innumerables servicios prestados en París.
Estas líneas son la vez una recompensa, un estímulo y un homenaje.

    FranceSpain
    Notas

    Este documento no posee notas.