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UOSdo lo COCO0en ué 11el en elihasta ahora me he gastado. Cómo esta ocasión, hacérselos comprender decir si no Daniel Ureña el pesar una vez aún profundo que experimente cuando en la calle me detuvo para decirme Domingo Sáenz rindió al fin compungido estas palabras: mi ma su tributo a la tierra el de los codre ha muerto! Es necesario forrrientes. Muere demasiado joven.
marse una aunque somera idea de Hacía año y ocho meses que una lo que vale ese pedazo de gloria con penosísima enfermedad lo tenia posque el cielo nos doto para contra trado. Su muerte ha sido un dulce rrestar las terribles amarguras de la descanso para aquel organismo aniexistencia; es necesario que haya quilado. No obstante. cómo remos aprendido analizar esa pala signarnos la desaparición del buen bra sacrosanta: madre, y encerrado en amigo? Lleven mis palabras su bálnuestro cerebro la idea de lo que ante samo coi olador la distinguida la vida significa el ser que lleva ese familia Sáenz Esquivel.
nombre, para poder decirle quien tiene la espantosa desgracia de perderlo: oh inconsolable, oh cuitado, Don Juan Madriz nos da también motivo para derramar sooh infeliz amigo: llora, no dejes de bre su recuerdo unas cuantas lágrillorar un solo instante: eres el más mas. Qué conjuración de la vida es desgraciado de los hombres. la que tiene dispuesto que las víctimas se sumen unas tras otras sin Padre Salazar, venga acá esa ofrecernos por lo menos la tregua mano; déjeme estrecharla fuertemen indispensable que necesita nuestro te para que el calor de la mia im organismo para reponerse de las prima en ella muy hondo, muy sincrisis anteriores? Cuántas familias cero, un apretón que le diga lo en desgracia registra hoy la sociemucho que comprendo esa desgradad josefina! Para los deudos del cia que el cielo ha arrojado sobre señor Madriz, nuestro sentido pé.
usted, llevándose su santo y venerable padre. Qué le diré yo de resignación, ni de fé, ni de esperanza por último, Juan Félix Bocuando usted sabe de sobra tenerlas, nilla Carranza quiso también que ya que toda su vida la ha consagra su nombre orlase de negro esta do predicar esos grandes y pode crónica. Juan Félix Bonilla. joven rosos lenitivos del alma? Pero mis todavía, buen hombre, buen hijo, sentimientos de cariño sí quiero en excelente hermano, buen amigo, 11, cas an de los tarosi; same es uy las de ble que