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4108 PÁGINAS ILUSTRADAS Lo cual, por obligada asociación de ideas, me hace pensar con cierto rencor hacia los que manejan nuestros debates públicos, en el fallido empeño del provec.
to que presentó a la Camara nuestro gran pintor Échandi, con el fin de establecer en Costa Rica una galeria (pincotecii de cuadros famosos, copiados por su genial pincel en los grandes museos de Europa.
Alguien ha dicho: El sistema de malquerencia que separa a los grupos y las personalidades artisticas, aislándolas, impi.
diéndoles desarrollar todo su esfuerzo. comprometiendo el triunfo de muchas ideas avanzadas, es el palo enjabonado de las Bellas Artes. Ahl. señor Echandi; cuando se nos presentó la ocasión de des.
truir un poco en nuestres cerebros el sedimento de la ignorancia en que hablamos de Moisés de Buomarretti el naturalista y de Fra Angellico el místico del homérico Miguel Angel homérico por la grandio sidad y excelsitud de sus creaciones, he aqui a esa malagradecida ignorancia encerrandose en su caparazón, y significando con los movimientos de cabeza del asno: No!
rosarcir los lectores de la escasez de grabados que aquejó los otros números de Páginas. Creo que por ahora no tendrán motivo de queja ni por lo que al ma terial se refiere, ni en cuanto a la profusión de ilustraciones. La conferencia que aparece en este número, sobre aeroplanos, debida la encomiable laboriosidad de la señorita Angela Baldares, y que creemos habrá de ser leída con interés y con cari ño, esti ilustrada por un número suficiente de fotografias que señalan uno a uno los progresos alcanzados por la que podría llamarse nautica del aire. Traslado a los lectores. La conferencia de la seño rita Baldares, bequista por Cartago en nuestro Colegio de Señoritas, levo su trabajo el de setiembre, en una de las fiestas que aquel plantel verifica mensual mente.
El veintitrés de octubre en la noche, fué obsequiado el caballero don Rafael Iglesias, con motivo de ser víspera de su natalicio, con una espléndida serenata que un grupo de amigos del señor Iglesias encargó a la batuta incomparable de Julio Fonseca, el joven maestro. Formaban la orquesta por ahí de diez quince artistas, Las piezas escogidas, entre ellas La Feria no podían estar mejor. El obsequiado correspondió galantemente desa muestra de simpatía.
Julio Flores, el bardo de la melanco lia; el artílice escanciador de las gotas de ajenjo, nos dio la mano al despedirse de nosotros para la región americana; a donde lo lleva (adivinad qué. nada menos que un negocio brillante. iJulio Flores metido en negocios. Pero no crean que ha dicho adiós su musa; la lleva consigo; y volverá con ella muy pronto. Sólo que ahora trocará sin duda el manto negro y lloroso de su sacerdotisa del dulor, por ricas telas de brocado, y en la cabellera rubia, la fina paja amplia como un quitasol y abrumada de flores. Bajo la falda menuda y sensual, recogida graciosamen.
te hasta el tobillo, dos lindos pies ence.
rrados en el estuche de unas chinelas glacé charolado. el poeta, todo un respetable Buckingham, muy señor nuestro.
Divertirse, amigo, y traer esas pesetas, que aqui no faltará medio de que les demos buen empleo.
Llamado por nuestro Gobierno, que sé yo con qué fines, estuvo entre nosotros procedente de Nicaragua nuestro Ministro en aquella República, Jenaro Cardona, el poeta correctísimo y el novelista autor de El Primo, obra de critica social bien observada y mejor escrita, que ha merecido elogios de personalidades eminentes como el Doctor Nordau. Pocos dias permaneció en esta su Patria el joven plenipotenciario. Nicaragua le dispensó una acogida rumbosa y fraternal. Una vez definidas las cuestiones para que fue llamado, a Nicaragua volvióse ya que alli se encuentra su familia, que es como el preciado nido de sus afecciones. ya que al saludarlo por su arribo nos vemos obligados a despedirlo en su retirada, repare el buen amigo anibas muestras de Todo el número se lo dedicaríamos al querido bardo, no ser que deseamos

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