PAGINAS ILUSTRADAS 4203 NISA CELINA VOLIO MATA Pues yo quiero cochecitos y camitas y un negro y un payaso.
Fots. Paynter una muñecota que se duerma y que diga mamí, y todo. Qué alegria!
cruza calles y plazuelas recordando en su amargura la tentadora muñeca. No será falso, verdad. Cómo, muchacha! Tú piensas. No, señor. perdone usted. Pero. vamos! la sorpresa. Si voy volverme loca de alegríal. Quién dijera!
Que Dios le premie en el mundo le dé la gloria eternal apretando entre sus manos convulsivas la moneda, corrió por la calle abajo veloz como una saeta. Caballero, una limosna esta pobrecita huérfana. Déjame, que voy de prisa. Por Dios, señor! Aunque sea un centimito. Tengo hambre. Pero, niñal (IMe da pena. Toma ¡Señor. Si es un duro. Te lo doy para que puedas, siquiera por esta noche tener buena cama y cena. Déjeme usted que le bese la mano. Quita, tontuela!
Que Dios se lo paguc usted.
Un duro. Estoy más contenta! la mañana siguiente se comentaba en la prensa el hecho de haber hallado en el quicio de una puerta, jel cadáver de una niña abrazada una muñeca!
VITAL AZA